-CAPITULO 12-

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Hyukjae llegó antes que su jefe al penthouse, se acomodó en la cama y tomó su móvil. Abrí el navegador que le arrojó la página en la que había dejado el vídeo antes de salir de la oficina. O bajará el volumen al mínimo y observará el vídeo.

Se dio ideas para su tarea, y se excitó un poco sintiendo como se le apretaba el boxer bajando los pantalones y comenzaba a tener calor. Deseaba que llegara el menor pronto. Se lo iba a devorar apenas entrara. Tomó los cojines y los acomodó como había visto en el vídeo. Sería su primera mamada y su primera vez comiendole el culo a un hombre, quería que fuera digna de recordar.

Se quedó sentado a un costado del colchón, mientras esperaba que Donghae llegara. Se sintió ansioso. Escucho el ascensor subir a planta, y se preparó. Se acomodo en la cabecera de la cama, poniendo un brazo bajo la nuca y el otro sobre su pecho, tenía ya la camisa abierta hasta el esternón, se había quitado el saco, arremangado la camisa hasta los codos y despeinado un poco el cabello. El juraba que estaba sexy así, o eso esperaba.

-Esta bien, mañana estará ahí- hablaba Donghae con un tono dulce- que siiiii Pingu- se rio- yo más, ya, debo dejarte, descansa Pingu.

Colgó el móvil el menor mientras entraba a la habitación y llevaba su mirada al atractivo chico que estaba en la cama, a un lado de los cojines acomodados de forma extraña. Sonrio.

-Hola.

-Hola- respondió el mayor- ¿que o quién es Pingu?

-Nada importante, ¿qué sucede con los cojines?

-Nada importante- respondió Hyukjae- ¿es otra de tus excepciones?- se levantó de la cama metiendo las manos en los bolsillos del pantalón.

-No- camino el menor hasta él, poniendo sus manos en el duro pecho del mayor que lo miraba curioso- ¿empezamos?

-Como quieras- bufo poniendo los ojos en blanco el mayor y lo toma de las caderas.

Justo cuando lo iba a besar Donghae se apartó y el mayor frunció el ceño.

-¿Estás molesto porque no te cuento eso o que te pasa?- dijo Donghae cruzándose de brazos.

-No quiero discutir, ya solo vamos a...-intento besarlo de nuevo y el menor dio un paso atrás.

-NO, ¿qué te pasa?- insistió el menor con un movimiento de cabeza- amigos somos ¿no?, entonces dime.

-No pasa nada Hae...

-Si que pasa, la última vez acabaste por empezar a hacerlo suave, así que o me dices o no te doy la sorpresa ni nada.

-¿Sorpresa?- exclamó el alcalde.

-Habla Hyuk.

-Va- suspir- me tiene de los nervios el tema de "tu excepcion" y ahorita vienes hablando con alguien a quien le dices Pingu, y dices que no es importante, y antes de que lo pienses o lo digas, no, no son celos, solo que siento que no te conozco, ni tu a mi, y creo que sí somos ahora amigos, mínimo debemos contarnos ese tipo de cosas, hay muchas lagunas entre nosotros, y no me quejo, es tu vida, y es mi vida. . , pero no se es raro, ¿no lo sientes así?

Término. Una vez más sus vómitos verbales cuando estaba nervioso lo habían atacado. Donghae lo miraba asintiendo lentamente, repensando sus palabras. Cuando parecía tener claro todo, dio un paso cerca de él.

-¿Te pone de los nervios Jieun?- el mayor avanzando- vale, no hay nada de qué preocuparse, solo es una amiga ¿ok?- miró al mayor esperando su asentimiento, lo vio hacerlo un poco tímido- Pingu, es una sorpresa vale, una sorpresa que te va a gustar más a ti, cuando sepas de Pingu- sonriendo.

Sí, señorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora