❝ they see right through me. can you see right through me? ❞
𝒊𝒏 𝒘𝒊𝒄𝒉 | megara descubrirá que tal vez
aquello que sea su mayor problema no sea
la peligrosa profecía con fecha de expira-
ción, ni la criatura capaz de secuestrar a la
muerte mis...
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xi. nueva roma ! ━( the son of neptune )
Caí dormido como un tronco toda la noche.
No había descansado en una cama sólida y cómoda desde... ni siquiera me acordaba. A pesar del día de locos que había tenido y del millón de pensamientos que me cruzaban por la cabeza, mi cuerpo había asumido el control y dijo: «Ahora vas a dormir». No me opuse.
Soñé, obviamente. Soy normal. Más sin embargo, estos sueños pasaron como imágenes borrosas en la ventanilla de un tren. Un fauno gritaba emocionado viéndome cuando me detuve en uno.
—¡No tengo ninguna moneda! —chillé enseguida, con mi casi nula experiencia con las criaturas.
—¿Qué? —decía el fauno— No, Percy. ¡Soy yo, Grover! ¡No te muevas! ¡Vamos a buscarte! Tyson está cerca; al menos, creemos que es el que está más cerca. Estamos intentando localizar tu posición.
—¿Qué? —grité, pero el fauno desapareció en la niebla.
Le siguieron tantas imágenes que me dejaron mareado. Todas como un torbellino de momentos, que para el momento que se detuvieron lograron causarme una migraña.
Me levanté, aturdido, sin recordar en dónde estaba parado con una sensación de aire fresco estrellándose en mi cara.
No es que sea agradable admitirlo, pero doy un salto una vez escucho una voz a lo lejos, reclamándome.
—¿Qué haces aquí?
Es ella. No logró ver su rostro, como ya es costumbre, pero por el cabello dorado, largo, ondulado y revuelto puedo saber que es la misma chica que ha estado atormentando mis recuerdos.
Estoy dispuesto a preguntarle quién es, qué hago aquí y cómo es que llegamos a la orilla del río Hudson, más sin embargo, ninguna de esas preguntas brotan de mis labios.
Sino, un: —¿Qué haces tú aquí... y qué se supone que es esa camiseta?
Observo a la chica terminando de alistar su armadura. Su rostro sigue borroso, pero aún puedo distinguir una sonrisa.
—Sabes que hago aquí y a quién estoy buscando —no la veo, pero obvio el hecho de que probablemente blanquea los ojos—. Todos lo hacen —responde como si la respuesta fuera obvia—. ¿Mi camiseta? Es del campamento, chico. Mejor dicho, ¿por qué llevas solo esa camiseta y no tú armadura encima? La batalla ni siquiera es aquí cerca. Jason se pondrá como loco si su plan no sale cómo planea. Vamos. Necesitamos todos los refuerzos posibles.
