Capítulo 10: Colapso

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-¡Bruno Madrigal estás en problemas!

La abuela estaba enojada, muy enojada.

Los dos hermanos se miraron y Bruno bajo la profecía escondiendo la tablilla de su Abuela.

-La cena fue un desastre, la propuesta fue un desastre, el control de esta familia deja mucho que desear y por si fuera poco, en el centro de la mesa encuentro una de esas … de esas tablas de mala suerte… ¿Cómo lo explicas Bruno? – el tono enojado se hacía notar.

Isabela estaba muy confundida y Bruno tuvo que encontrar la forma de responder el cuestionamiento que se le hacía, pero francamente estaba en blanco.

-Eh, yo …

-No hay excusas Bruno! Me enteré de que has roto varias reglas estos últimos días – Su Abuela dio un paso enfrente y Bruno retrocedió instintivamente.

-El solo estaba tratando de ver como estaba… - Isabela en acto de valentía se acercó a su hermano, le coloco una mano en su hombro de señal de apoyo.

-Si Abuela yo solo quería ver como estaba Isa y ¡Salvar el milagro! … - Fue interrumpido.

-¿Salvar el milagro?, ¿De qué estás hablando Bruno!?, La magia está bien, el milagro es fuerte, Casita está mejor que nunca.

-Pero...

-Pero nada Bruno! Mira nuestro hogar está intacto, no puedo decir lo mismo del estado de tu hermana, mira el desastre que es – señalo la forma en que está Isabela – te deberías de enfocar en tratar de no estropear el camino de camino de tú hermana! Se arruinó su propuesta, por supuesto que estaría mal, no esperaría que alguien estuviera feliz en su lugar …

-No lo entiendes Abuela – Bruno interrumpió a la mayor – Yo no quería arruinar su propuesta, pero – le dio una mirada de confianza a su hermana – las cosas pasan por algo!, Ella me necesitaba para arruinar su propuesta, ¡Ella no quiere casarse Abuela!, Necesitábamos pasar por todo esto por qué los dos estamos destinados a salvar la magia, eso se probó cuando nos abrazamos, Casita comenzó a repararse y … - la Abuela le daba una mirada de decepción y confusión ahora.

-Bruno debes parar ya!

-No, no, no es que …

-¡Debes parar ya Bruno! Lo que sea que tú dices haber visto, debió de haber iniciado contigo, este fallo en la magia que todos los demás dicen que tú dices que pasó, no sucedió, lo único que de lo que eres culpable aquí aparte de arruinar la propuesta de tú hermana, es de que tú tía Mirabel tuviera que encerrarse en la torre!, Luego, hacer que una parte de la familia participe en la locura que pasó está noche, tú padre se comporta de una forma inadmisible – Bruno e Isabela observaron en ese momento como los demás miembros de la familia se asomaban poco a poco desde afuera -Camilo se pone fuera de control e inclusive arrastraste contigo a Dolores … Bruno – bajo un tono de su voz – El no recibir un don no es excusa para que halles la forma de dañar a la familia. – Termino mirando a Bruno con desesperación.

El joven sin magia abrió los ojos antes esa última revelación, indignación, consternación, dolor, tristeza, irá fueron muchas emociones por las que su rostro paso en ese momento, su hermana aunque no lo veía de frente, observo a la Abuela con la confusión e indignación, Isabela iba a hablar para defender al menor, más su hermano se le adelanto.

-No importa lo que haga siempre haré daño a la familia tus ojos, ¿Verdad Abuela? – comenzó Bruno – Nunca seré lo suficientemente bueno para ti ¿No es así? – el joven diviso como sus padres lo miraron a lo lejos – No importa que tanto lo intente …

-Bruno- susurro su hermana y lo trato de recargar en su costado pero el chico se alejo lo suficiente.

-Y tampoco importa que tanto lo intente cada uno de nuestra familia – el joven empezó a subir la voz – Luisa nunca será tan fuerte como deseas – Su otra hermana se asomó por el marco de la puerta – Isa nunca será tan perfecta como deseas – la mayor dividió su mirada entre la preocupación por su hermano y la expectación de la reacción de Abuela, pero afirmó el apoyo en el hombro del menor – Y así es con todos … Camilo nunca podrá ser el mismo, Dolores siempre se entrometerá, tía Pepa nunca controlará bien el clima y mamá nunca curará a las personas tanto como quieres – su voz se empezó a quebrar – Tía Mirabel se encerró en su torre por qué tú no viste el lado positivo de sus profecías y la consideraste un peligro, ¡Tú – señalo a Alma – le prohibiste dejar la torre, se obligó a vivir en la torre por qué le hiciste pensar que era un peligro! – La familia entera abrió los ojos antes esas declaraciones y varios se llevaron sus manos a la boca.

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