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Renjun gruñó molesto cuando intentaste cerrar las piernas por centésima vez. Agarró tu muslo con su mano libre y lo presionó contra la cama.
"detente"
"no puedo. Se siente tan bien, Renjun" te quejaste, echando la cabeza un poco hacia atrás. sus dedos trabajaban dentro de ti de la manera más pecaminosa y su otra mano agarraba tu muslo con tanta fuerza que estabas seguro de que iba a dejar marcas.
Renjun sonrió. él sabía que te estaba haciendo sentir bien por todos los gemidos y gemidos que no puedes contener por mucho que lo intentes, pero escucharte decir tus pensamientos en voz alta disparó su ego.
"Bien, eso es todo lo que quiero", ronroneó, acercando su rostro al tuyo. rozó sus labios con los tuyos e inmediatamente abriste un poco la boca, dejándolo deslizar su lengua dentro.
Renjun sintió cómo empezaste a apretar sus dedos y sabiendo que estabas cerca, comenzó a frotar tu clítoris con su pulgar para llevarte más rápido al borde.
"Joder", gemiste en su boca y te relajaste por completo cuando el orgasmo invadió todo tu cuerpo.
Dándote las últimas caricias, apartó su mano y miró sus dedos relucientes llenos de tus jugos. Una mirada a tu jodida cara y tuvo una idea.
"Chúpame los dedos. Pruébalo tú mismo", murmuró, tocando tu labio inferior.
Dejaste que insertara sus dedos en tu boca y comenzaste a chuparlos, girando tu lengua y poniendo los ojos en blanco para alejarte de la suciedad.
Renjun te miró con tanta hambre y adoración, su mente completamente nublada por ti. "buena niña"
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