Capítulo 34

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Yibo se encontraba caminando junto a Jackson en los pequeños pasillos de la cabaña que ocultaba la gran habitación de las celdas. Jackson no podía creer que esa pintoresca cabaña, pintada de un color alegré y perfectamente acondicionada para vivir, fuera en realidad una fachada a un lugar del horror.

— ¿Qué es lo que estás pensando?— la voz calmada de Yibo interrumpió los pensamientos que comenzaban a invadir la mente de Jackson.

— Lo genial que es este lugar... Digo, podría dormir aquí y nunca me daría cuenta que hay un montón de celdas debajo de esta cabaña, incluso pensaba en comprarte la cabaña y mandar a construir una réplica en Corea, sería un gran lugar donde encerrar a los que molestan mis operaciones — le dijo algo sorprendido al ver como llegaban a lo que parecía ser una celda vacía con sólo un montón de trapos en el suelo.

Yibo solo sonrió con algo de superioridad. Él había mandado a construir la cabaña pensando en los pretendientes de Zhan, era cruel, pero la cabaña era muy acogedora, incluso podría venir con Zhan y disfrutar de una linda tarde con él mientras sus pretendientes se morían de hambre debajo. Después desechó esa idea.

Ahora solo la utilizaba para personas que sabía, jamás serían reportadas como desaparecidas, así no tendría problema alguno de ocultar su existencia y la policía jamás encontraría la cabaña.

— ¡Hey!, ¡Despierta, Omega holgazana! — gritó Yibo golpeando repetidas veces la reja de la celda y Jackson pudo ver como las mantas comenzaban a moverse de manera rápida.

En su visión logró ver como el cuerpo desnutrido y casi esquelético de una chica se asomaba por arriba de las mantas, su rostros desfigurado y sus ojos inundados de terror. La chica producía un olor de algún frutos podrido, eso representaba que la chica se encontraba en muy mal estado.

— ¿Quién es ella? — preguntó Jackson algo confundido, no le molestaba la imagen delante de él pues, sabía cómo era el mundo de la mafia, si alguien era un estorbo, no tenías que presentar ningún tipo de piedad.

— Es una de las omegas que trabajó junto a Ayanga, ella es una de las responsables del ataque contra Zhan — gruñó con algo de furia y la omega solo tembló más. Jackson comprendió que ella era una de las claves para encontrar al beta.

— Entonces no sé porque perdemos el tiempo con idioteces— suspiró y miró a la omega —¿Dónde está Li Ayanga? — dijo utilizando su voz de mando.

Jackson no tenía tiempo para jugar a los interrogatorios, tenía asuntos que atender en Corea y cuidar de Mark. Recordar la expresión vacía de su omega al preguntar que le habia ocurrido, le hacía enfurecer de sobre manera, ese Ayanga no era solo un beta que decidió golpear a Mark y molestar a Zhan, él tenía que ser algo más que eso.

Y podrían decirle exagerado, pero recordar como Mark lloró en silencio, acariciando el sitio donde Ayanga le había golpeado, por el dolor que sentía en ese momento, activó su instinto de asesinar al responsable, él nunca se había atrevido a levantarle la mano, ¿Por qué dejar que otro si?.

La omega soltó un sollozo agudo y de temor, el horrible olor de la enfermedad junto al aroma de la tristeza y terror de la omega hacía a su lobo reaccionar de una manera algo agresiva.

— A-Ayanga...Beta líder...Dinero... a Zhan...Mark...Un plan... Herirlos...— comenzó a decir la omega entre sollozos.

Jackson no entendió nada y miró a la omega esperando que se explicará más detalladamente, Yibo solo suspiró y negó con la cabeza.

— Es inútil, perdió la razón de las palabras, su cerebro se fundió o algo, por eso habla así...

Jackson gruñó con furia y pateó la reja. La única que podría decirle lo que Ayanga planea y descubrir donde se encuentra, ahora no podía hablar con claridad.

Yibo también estaba frustrado, pero lo que Ying le había explicado, era que todo lo que tenía que hacer era leer entre líneas.

— ¿Beta líder? — preguntó Yibo al aire llamando la atención de Jackson.

— Es cuando un grupo de omegas son liderados por un beta, eso es porque los omegas aún no están emparejados, entonces el beta se hace cargo de ellos — dijo una voz en la celda de un costado, atrás de ellos.

— ¿Tú sabes quién es Ayanga? — preguntó Jackson a la beta que se encontraba recargada y respirando con algo de dificultad.

— Claro que lo sé — dijo con algo de arrogancia — ese maldito egocéntrico bueno para nada, es hijo del señor Li, quien es el actual dueño y presidente de las empresas Li, bueno...Eso es lo que él dice — suspiró con algo de dificultad.

— Si lo qué dices es verdad, Ayanga no tuvo problemas para encontrar a Mark y a Zhan, estoy seguro que busco contactos que le ayuden — gruñó algo molesto el alfa de Jackson.

— ¿Qué más sabes? — preguntó Yibo y Nayeon solo sonrió con autoconfianza.

— Vaya, creo que alguien necesita algo de mi ayuda — canturreo en broma, pero no duró mucho cuando comenzó a toser —Veamos...Li Ayanga...Es un niño rico que ha recibido demasiados dulces, tantos que han terminado por pudrirle todos los dientes...le encanta presumir cuan rico es, tanto que le encanta humillar a los omegas, en especial hombres, dándoles una cantidad enorme de dinero por sus "servicios"— volvió a respirar — Por lo que escuché, unos años atrás, conocio a un par de omegas, cuyos nombres son Zhan y Mark — al escuchar eso, la piel de ambos alfas se erizó —Claro, Zhan y Mark se negaron y al parecer, eso dañó su orgullo y reputación, desde entones, tiene cierto rencor contra ellos, algo exagerado en mi punto de vista — rodó los ojos.

— ¿Tú cómo sabes todo esto?  — preguntó Jackson desconfiado. Todo rastro de autoconfianza se esfumó de la cara de Nayeon, en cambio, su nerviosismo se hizo notar un poco.

—... Y-yo...le di la información necesaria para encontrar a Zhan...— admitió avergonzada y solo tuvo que ver el rostro de Yibo para arrepentirse, sin embargo, se armó de valor — ¡A-admito que fue un error, pero estaba desesperada, necesitaba dinero para ayudar a pagar la renta del departamento, Ayanga me prometió pagar por cualquier pequeño detalle que compartiera con él!, El dinero pudo más, ¿de acuerdo? — dijo más segura de si misma y volviendo a toser por haber forzado su voz.

— ¡Dime ahora mismo que es lo que planeaban y ¿Por qué estás confesando todo ahora?! — Yibo gritó junto un gruñido, deseaba golpearla con todas sus fuerzas y verla retorcerse buscando piedad. Pero hasta su lobo se daba cuenta de el poco tiempo que le quedaba de vida. Nayeon solo cerró sus ojos.

Pensó que ya todo daba igual, incluso pensó que era lo mejor, su lobo podría sintierse algo mejor tras confesarse, igual, no había ya nada que perder...

El omega del alfa❤ 🐺Where stories live. Discover now