Fenix ~ Los Juegos del Hambre

⚔Capitulo 7:El fin de los juegos

-Déjenme ver si entendí -pedí arreglando mi cabello ante el pequeño grupo de vencedores frente a mi- Me ausento unas semanas y tu tributo se enamora de Cato -señalo a Finnick- Cato de una loca -miro a mis tíos- Tu chico se une a los nuestros para matar a la chica pero luego ¿La salva? -pregunto confundida a Haymitch y este alza su copa antes de beber igual de confundido.

-Al menos no soy el único que no lo vio venir -murmura este bebiendo.

-¿Y tu haces encarcelar a un juez en el distrito 2 para cumplir el deseo de Finnick? -pregunte volteando a ver a mi padre confundida.

-En mi defensa, también era tuyo -dijo cruzándose de brazos- Y el niño es bastante convincente -señalo a Finn haciéndolo sonreír encantado.

-Si que lo es -replico Haymitch sarcásticamente haciéndome rodar los ojos.

-wow -murmure sin palabras viéndolos a todos.

-No puedes juzgar niña, tu estabas allí encerrada volviéndote loca -señalo Xavier hacia mi cuarto sin puerta- Hasta que el loco de tu novio rompió la puerta.

-Okay, bueno gracias por tu breve alianza Haymitch suerte -asentí despidiéndome del ebrio e ignorando a mi tío.

Este se levanto dándome un abrazo antes de murmurar que podía contar con él para irse.

-En cuanto a ti... -señale a Finn antes que un cañonazo resonara en el cuarto obligándonos a ver la televisión.

Tresh acababa de asesinar a Clove quien trato de matar a Katniss jactándose de matar a Rue, rodé los ojos algo entristecida, linda niña  pero bocona y justo cuando iba a voltearme para continuar Tresh mato a la chica de Finnick haciéndome voltear a verlo con pena.

-Bueno ya no importa... -murmure viendo al rubio suspirar- Bien papá en vista de que ya no queda a quien chantajear, matar o incriminar -enumere sarcástica haciéndolo rodar los ojos- prescindiremos de ti, Finn...

-Iré a llamar a las chicas, es mejor que ver esto -me interrumpió deduciendo que le pediría irse.

-Salúdalas diles que las extraño -sonreí como niña antes de aceptar un beso rápido de su parte mientras se iba con mi padre.

-Y la dictadora a vuelto... -canturrio August haciéndome sonreír de lado con maldad.

-¿Que tal tus bolas, ya volvieron a crecer? -pregunte haciéndolo rodar los ojos antes de quedarse callado.

-Ahora sobre Cato...

-Lena, cariño -llamo Lyme acercándose y la abrace rápidamente.

-Lo siento por todo lo que dije yo...

-Yo también lo siento linda -interrumpió peinando mi cabello y sonreí antes de volver a abrazarla.

-¿Estamos bien? -pregunte separándonos y ella asintió con una pequeña sonrisa haciéndome copiarla- A trabajar entonces...

.               .                .

-Señor -asentí colocándome recta frente a él al verlo cortar rosas.

-Ha llegado a mis oídos que el señor Odair y usted son padres ahora, felicidades -murmuro antes de pasarme una rosa blanca haciéndome palidecer.

¿Cómo diablos...

-Gra.. gracias -murmure apretando la flor contra mi vestido.

-Helena... ¿Qué opina del distrito 12, sus tributos? -pregunto luego de varios minutos confundiéndome por tantos temas.

-Yo... pienso que son buenos en...

-Helena -interrumpió serio volteando a verme y me detuve- Siempre he podido confiar en la honestidad de su padre ¿Puedo hacerlo en la suya?