LA EMPERATRIZ MASCULINA ADORA SU MOÑO

85.SI NO ENCUENTRO UNO PUEDO CASARME CONTIGO

Ning Jie sonríe al ver a su hermana y al emperador en el patio disfrutando del té.

"Su majestad imperial, ¿qué opina?"

"Hmm... sabroso"

"¡Sí! Mezclo dos de las hierbas más comunes para obtener un sabor suave y sabroso"

"Buena Meimei"

Ning Jie se escabulló para evitar ser visto, luego, en el último momento, abrazó al emperador por el cuello por detrás. Ning Yuan se sorprendió.

"Gege, ¿de dónde vienes?" Ella pregunta.

"Jie Er estuvo aquí", dijo el emperador, acariciando suavemente el dorso de la mano de Ning Jie con cuidado.

Al ver esto, Ning Yuan sintió este pinchazo desconocido en su pecho.

"¿Por qué nunca te asustas? Fui súper astuto y callado", hace puchero Ning Jie.

"Jie Er es extraño", dijo el emperador.

"No respondiste la pregunta, pero como sea".

Ning Jie lo suelta, luego camina, se sienta en el regazo del emperador y toma su té.

"¡Gege, eres demasiado atrevida!" Ning Yuan grita.

"No te preocupes, simplemente estoy sentado, no es gran cosa, um... sírveme un poco más de té", se atreve Ning Jie.

"¡Esa es la copa del emperador!" Ella exclamo.

"¿Qué importa? ¿Es una taza de cualquier manera?"

"Gege..."

El emperador acaricia la cabeza de Ning Jie, "Jie Er, no, necesitas un marido", dijo el emperador.

"Hm, ¿crees que no encontraré un marido? Si no encuentro uno, puedo casarme contigo o mejor aún, me casaré contigo, así que mejor trátame bien, ¿vale?" Ning Jie sonríe.

El emperador acaricia suavemente su cabello, "bien, pero debes buscar marido" dijo el emperador.

Aunque solo estaba siguiendo la corriente de Ning Jie. El corazón de Ning Jie se acelera: "No te preocupes, ya tengo uno en mente".

El emperador estaba un poco desconcertado, "¿quién?"

El emperador se pregunta si es alguien de la academia. También se pregunta si esa persona es digna de los sentimientos de su amigo. Se pregunta si esa persona puede manejar a Ning Jie ya que tenía un espíritu muy salvaje.

"Descúbrelo, tonto" Ning Jie se sonroja mientras toma la taza de té y bebe. "Oh, hace frío"

"Bueno, obviamente, estabas ocupada coqueteando con el emperador..."

"¡Oh, la pequeña Meimei está celosa! No te preocupes, Meimei, ¡pronto encontrarás el amor! Quién sabe, podría estar cerca", anima Ning Jie.

Ning Yuan mantiene la cabeza gacha y se sonroja mientras echa un vistazo al emperador que le ofreció bocadillos a Ning Jie. Se pregunta si ella fuera su Gege, ¿la trataría el emperador de esa manera?

Más tarde, el emperador caminaba por el patio abierto, mirando a su alrededor mientras se detenía ante el regalo de flores de cerezo. Por lo general, Ning jie estaría allí planeando algo travieso, pero las ramas estaban tan vacías que se pregunta cómo es tener un espíritu tan libre.

"¡Su majestad imperial!"

Ning Jie lo abraza por detrás del emperador y luego se da cuenta de algo recientemente: Jie Er ha tenido más intimidad con la forma en que lo toca. Quizás sólo lo estaba imaginando.

Pronto Ning Jie le sonríe tontamente confundiendo al emperador, pero momentos después el pequeño zorro ladrón se escapó con un colgante en la mano.

"¡Me llevaré esto!" El saca la lengua

"Pequeño zorro travieso"

El emperador persigue a Ning jie, que ya estaba saltando de árbol en árbol. El viento sopla a través de sus ropas mientras sus cabellos ondean a través de la brisa fresca, la risa primaveral de Ning Jie resuena en el cielo.

Ning Jie no sabía a dónde iba, pero iba a algún lugar y un segundo después dio un paso en falso y se cayó.

"¡Ah!"

Alarmado, el emperador rápidamente salta para atraparlo en una fracción de segundo mientras ambos caen a un manantial de agua.

"¡Ja, ja, ja!" Ning Jie se limpia la cara y se quita el pelo. Al ver al emperador hacer lo mismo, lo empuja de regreso al agua.

"Jie Er", dijo el emperador en voz baja.

Ning Jie hace una pausa y se sonroja al ver la belleza del emperador más allá de la luz de la luna, un hombre verdaderamente hermoso. Ning Jie se acerca sigilosamente al emperador, quien lo mira y sonríe inocentemente.

"¿Qué estás haciendo?" Pregunta con recelo.

"Su majestad imperial es hermosa"

El emperador quedó desconcertado pero dijo: "Jie er, eres más hermosa".

Se quita un mechón de pelo de la cara y mira a los ojos claros de Ning Jie. Ning Jie sonríe ante el gesto del emperador, ¿se estaba acercando al emperador?

"Su majestad imperial, si hace comentarios como ese, lo tomaré como si intentara cortejarme. ¿Quiere cortejarme?" Ning Jie se burla.

El emperador hace una pausa y luego mira hacia otro lado, había un ligero tinte rojo en la punta de su oreja. Trató de escurrirse la ropa mientras salía tratando de deshacerse de este sentimiento vergonzoso. Ning Jie estaba confundido al principio, pero sonrió porque al menos el emperador no lo rechazó.

El emperador se quita la túnica, la deja en el suelo y le da unas palmaditas a su lado mientras se sienta en ella, Ning Jie sonríe sentado a su lado.

Ning Jie suspira y luego apoya su cabeza en el regazo del emperador, el emperador mira a Ning jie y le cepilla el cabello mientras el otro hombre cierra los ojos en su regazo.

Wei Zhao durante mucho tiempo nunca se sintió real para la gente, en los cielos, a pesar de que sus padres lo miman con amor y la gente lo adora, él sabe que no es para él. Y cuando regresó al reino terrenal, el ex emperador tampoco lo estaba esperando a él, sino a su hijo Wei Zemin, no a él.

Nadie espera ni busca a Wei Zhao, mira a Ning jie. Quizás lo era. Wei Zhao cerró los ojos por un momento mientras descansaba, sintiéndose feliz en el momento.

Antes de que ambos se den cuenta, ha pasado otro año y Ning Jie se ha graduado de la academia.

"¡Sí!"

"¡Es un misterio que te hayas graduado con cómo son tus actuaciones!" Madame Ning lo regaña, pero sonríe y acaricia suavemente su mejilla y luego la besa, "pero estoy orgullosa de ti".

Ning Jie le sonríe felizmente a su madre, su rostro siempre es tan malo y rígido pero realmente es bonita cuando sonríe. "¡Deberías sonreír más, así tendrías menos arrugas en la cara!"

Ella tomó el abanico y lo golpeó en la nuca, "ten cuidado con cómo me hablas, todavía puedo enviarte de regreso al lugar por donde viniste".

Madame Ning se vuelve hacia Ning Yuan con una sonrisa brillante, "niño, no seas como tu tonto hermano, crece brillante y brillante".

Ning Jie estaba listo para quejarse hasta que vio al emperador a distancia, sonríe y luego corre hacia él con un gran abrazo.

"¡Su majestad imperial!"