Capítulo cuatro: Welcome to Brasil.

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Malika Brown Menéndez.

7/2/2023

Alicia sacude mis hombros mientras mira mi investigación sobre "Cobra Negra" mafia que tiene a la hija de Enzo Rocha, gobernador de Brasil. Volaremos el amazonas, junto a tres compañeros más y el piloto. El plan inicial es aterrizar en una central que está por la selva, un momento ahí tenemos que ejecutar de manera inmediata, se supone que haremos un "trato" con la mafia, pero todos sabemos que la FMEF no hace alianza con delicuentes.

Estoy nerviosa, es mi primer operativo aquí, ha de salir excepcional.

-Relájate, Malika, ya verás que te irá bien, encima irás con el coronel, siempre las cosas salen perfectas en sus misiones.- Alicia habla buscando consolarme.

-Ya, pero no quiero arruinarlo, tengo que dar todo de mí. -suspiro- Parker se burlará en mi cara como estropee la operación.

-Pues yo le estropearé la cara.

-¿Arruinarás la cara que tanto quieres besar?- levanto mi ceja de forma dudosa.

-Sí. -baja su cabeza- Puedo besarlo antes de darle su toma toma.

Rio ante sus ocurrencias. Mi teléfono suena y me levanto buscándolo.

-¿Dónde está? -el tintineo continua- Ayúdame y deja de morderte las uñas.

-Voy, tata, que tenía una cosilla en el dedillo. -alza las sábanas de mi cama, mi móvil reluce en sus manos mientras ella lo agita- aquí está, no buscas nada bien.

-No me regañes, atrevida. -presiono el boton para darle paso a la llamada es un número privado, raro, posiciono el aparato en mi oreja y me dispongo a hablar- ¿Hola?

-Teniente. -la voz de Christopher suena a través de la línea telefónica.

-Coronel, ¿cómo puedo ayudarle?

-¿Está lista? -en voz se siente un tanto molesta, ¿estará enojado?

Analizo mi figura en el espejo, el traje negro de una pieza se pega a mi piel, es de cuero, miro mi caderas y el cinturon con armas y municiones reposa alrededor de esta, en mi muslo llevo cullillas, mi mochila negra lista con kit de emergencia esta en mi mesa, mi pelo esta recojido en una coleta alta dejando caer mi pelo riso.

-Sí, coronel, estoy lista.

-Pues venga a mi oficina, ya.

La línea se corta sin darme oportunidad a aceptar su orden.

-Es muy grosero, ¿qué desayuna? ¿Ositos cariñositos o heavy metal? -halaga Alicia aguantandose la risa.

-Vaya comparación más insípida. -rio, porque al ser tan "¿ah?" La hace graciosa- Me voy con el coronel. -camino hacia la puerta- y creo que
desayuna alacranes con heavy metal. -grito mientras adelanto el paso.

Mi cuerpo sale de la zona de dormitorios femeninos, me encamino al ascensor, entro y presiono el piso diez, las puertas se abren y como siempre Laurens está llorando mientras sorbe sus mocos.

-Laurens. -hablo despacio para no asustarla como la primera vez- Por favor, anunciame con el coronel.

Sorbe sus mocos, que asco y justo no tengo papel para ofrecerle.

-Coronel la teniente Menéndez está aquí. -hay un silencio en donde Laurens solo asiente con la cabeza- Puede pasar teniente. -me informa.

Me adentro a despacho y la misma vibra del primer día surge, el hecho de que Christopher esté sentando con el pelo mojado hace notar mechones rebeldes sueltos, está recostado en la silla, con sus piernas abiertas y los brazos entrecruzados, sus ojos oscurecidos por la penumbra de la oficina me deja notar aún más el atisbo de enfado en sus ojos, aun así brillan por la poca luz. Su posición dominante me pone nerviosa.

Llamas de DeseoWhere stories live. Discover now