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Te amo Te amo Te amo Te amo, maldita sea
Lo habia dicho, Te amo y que él era suyo. No era la mejor reconciliación pero poco a poco el cuerpo de su Nene fue desapareciendo dejando a un Namjoon confundido y extraño. Ya no estaba su Nene. No le había dicho <<Te amo>> porque todo fue su imaginación. Nam lentamente fue abriéndo sus ojos para ver que solo fue un sueño. Sintió todo su cuerpo sudado y su pecho que subia y bajaba por su respiración agitada, se removió en su cama para ver si estaba Jin y que eso no fue un sueño. Lastimosamente su Nene no estaba a su lado recostado como siempre lo hacía después de un buen sexo. No, Seok Jin sensual en el laboratorio no era realidad. Sin embargo para él si lo fue...
Era cruel que los sueños solo fueran una imaginación de lo que quisiera tener y nunca perder...
Nunca le dijo sus sentimientos a su Nene... Ese <<te amo>> nunca sucedió. No paso la follada que hicieron En laboratorio... Nunca y Nunca.
Se sentó al borde de la cama, y llevó sus manos a su rostro como si sintiera una tristeza y un arrepentimiento que nunca pueda arreglar.
Ir a buscar a Jin y pedirle perdón era una buena solución... Pero ese era el segundo paso para su reconciliación, aun conservaba la llave de su departamento pero no se atrevio en esas dos semanas de ir a abrir esa puerta y preguntarle que si estaba bien y que si no le faltaba nada. El moreno pensó que la última pregunta fue muy estúpida ya que a Jin si le faltaba algo... Le faltaba un hombre que lo ame y lo adore como él deseaba. Namjoon pensó que él no era el indicado para amar a un ángel que anhelaba amor verdadero. El no saber amar como quisiera le daba una presión en el pecho... Su Nene, Jinnie, Seokinie y suyo.... Pero Seok Jin seguro no lo queria ver.
Los tres días después de su cumpleaños sacó una gran bolsa de basura con ropa.. Y Namjoon curioso fue a abrir esa ropa para luego ver que era de él. Su Nene había votado todo lo que le recordaba a él, prácticamente lo sacaba de su vida porque también estaba algunas cosas que el moreno compró para su Nene en esa bolsa negra. Saco aquella bolsa y la llevo a donaciones. Esa ropa no tenía que ser desperdiciada.
Y bueno, un Jin frío y serio que ignoraba a un moreno lleno de arrepentimiento. Jin sufria internamente pero no quería dar pena a las personas así que se guardaba todo en su débil corazón de pollito. Ver a un Nam con una mirada suplicante le daba molestia. "Para que quiere arreglar algo que destruyo con palabras" Decía el menor. Ya no sabia si odiarlo o amarlo a su Namu, Jonnie, lobo lujurioso y su sacerdote que le daba las mejores bendiciones. Jin mando a cambiar la cerradura de su departamento para que Nam no venga con su llave a abrirla y a hacerle cualquier cosa, el menor tenia la llave del departamento de Nam, pero ¿para qué? Ellos ya no eran nada así que decidió votarla al río Cheonggyecheon donde frecuentaba caminar. Ya no tenía recuerdos de su ex pareja sexual. Tenía tranquilidad y un corazón destrozado. Era cierto que extrañaba a Namu pero tenía dignidad y no la iba perder para decirle "Namu ven y profaname" Jamás haría algo así. Si querían arreglar algo él que tenía que hacerlo era Namjoon, no él.
