Son, finge por mí. |•MiChaeng•|

42: |Tan parecida a Chaeyoung|

La pequeña Wonyoung se encontraba con la cabeza hacia atrás. Un pedazo de algodón descansaba contra su nariz.

-Perdón por manchar tu piso, Ángel.- murmuró sosteniendo el algodón.- 

-No pasa nada, amor, ¿Te sientes bien?.- la mayor sonrió mientras lavaba sus manos.-

-Ujum... ¿Cómo se encuentra tu mano?.- señaló con su manito libre las manos de la japonesa.-

-Está bien, no te preocupes.- secó sus manos y comenzó a buscar algo en un estante.- ¿Te parece si no le contamos nada de esto a tu hermana?.- sugirió mientras se ponía una bandita en el espacio entre los dedos pulgar e índice.- 

-Me parece buena idea.- asintió a la vez que su mano libre mostraba el pulgar hacia arriba.-

-Bien, quédate un ratito aquí que iré a limpiar el suelo, ¿Bueno? Por nada agaches la cabeza.- la menor volvió a asentir, recibió una sonrisa de la nipona y esta se alejó.-

¿Qué paso? Bueno, Wonyoung al llegar donde Mina junto a Chaeyoung, quien tuvo que irse rápidamente después de dejarla, conoció a Ray y de la aparente emoción, su nariz sangró y sangró durante varios segundos. Y Mina quien para ese momento estaba cortando algo, al ver el rostro y manos rojizas de la menor, se asustó, olvidando el cuchillo en su mano, lo que provocó que se hiciera un corte un tanto profundo.

Unos minutos después, Mina entraba nuevamente al baño, con una leve sonrisa.

-¿Y? ¿Qué tal?.- 

-Me lo quité un segundo y ya no sentí nada.- contestó sentada en la tapa del inodoro.-

-Mientras tu hermana viene, Sana y Momo vendrán, ¿Quieres salir a algún lado o quieres quedarte aquí?.- habló alzándola.- 

-¿Podemos ir al parque con Ray?.- preguntó con una sonrisa.-

-Claro amor, pero primero iremos a cambiarte.- contestó mirando la mancha de sangre en la remera de la menor.- 

-Pero tu ropa me quedará grande.- dijo.- 

-Tengo una prima de tu edad que se queda de vez en cuando, tengo ropa de tu talle.- sonrió mientras salía del baño.- Tengo vestidos, conjuntos, remeras y pantalones al azar, tú solo elige.- mencionó mientras entraba en una habitación que Wonyoung no había visto la última vez que exploró la casa Myoui.- 

Mina dejó a la pequeña frente a un armario y lo abrió dejando que la niña eligiera lo que quisiera. Wonyoung rápidamente al ver un vestido floreado con un collar de mariposa ya agregado, lo tomó con una sonrisa.

-¿Puedo usar este?.- preguntó con una sonrisita que hizo que Mina se derritiera.- 

-Claro que si, linda. ¿Te ayudo o puedes sola?.-

-Puedo sola, soy una niña grande.- 

-Si, lo eres.- se rió mientras salía de la habitación y esperaba afuera. Unos minutos después la puerta del cuarto se entreabrió, Wonyoung asomó su cabecita y sonrió nerviosa.-

-¿Me ayudas, Ángel?.- Mina soltó una risa antes de asentir. Entró en la habitación y ayudó a la niña a ponerse bien el vestido.- 

-No era tan difícil pedir ayuda antes, Wonnie.- alzó a la pequeña para empezar a caminar hacia la planta baja.-

-Pero yo podía, no necesito que me ayudes con todo.- se cruzó de brazos con un puchero que hizo que la mayor su mordiera el labio. Eres tan parecida a Chaeyoung. Pensó con ternura.-

-Eres igual a tu hermana.- con su dedo tocó la nariz de Wonyoung, quien la miró mal y arrugó la nariz.- 

-No me parezco a Chae, no digas mentiras.- una mueca se instaló en su rostro y Mina solo rio un poco más.-

-Eres una copia de ella, Wonnie, mira tu nariz arrugada, tu mueca, tus bracitos cruzados. Tu hermana hace lo mismo cuando está enojada.- 

-Ay, conoces tan bien a tu novia.- una voz conocida hizo que Mina quitará la vista de la pequeña enojada.-

-Ustedes entran como si esta fuera su casa.- miró a sus amigas con una sonrisa divertida.-

-Es que es nuestra casa, el que tú todavía no lo aceptes no es culpa nuestra.- Sana habló con una sonrisa.- 

-Hola Won.- Momo saludó a la niña quien quitó el rostro de molestia y estiró su brazos hacia ella.-

-¡Momo!.- exclamó con una sonrisa cuando la mayor de las niponas la alzó.- Mira, ¿Te gusta mi vestido?.- señaló la prenda, la pelinegra asintió.-

-Es muy bonito, te queda bien.- 

-¿Están listas para irnos? Tzuyu nos espera en el auto.- Sana mencionó mientras le sonreía a Wonyoung.-

-¿Tú te despegas de Tzu, Sana?.- la pequeña preguntó confundida. Mina y Momo se rieron del rostro de su amiga, quien estaba sorprendida por la pregunta.-

-Claro... .- contestó, aunque lo pensó un poco.- No, de hecho no.- 

-Puedo darme cuenta.- y aunque no lo decía con mala intención, así parecía. Sana hizo una mueca de dolor, claramente fingida. Wonyoung la miró con una sonrisa.- Aunque te entiendo, Tzu es linda, yo tampoco me alejaría de ella si fuera mi novia.- apoyó su cabeza en el hombro de Momo y la abrazó.-

Las tres mayores se miraron con sonrisas confundidas.

-Nosotras solo sabemos propagar la homosexualidad.- Sana comentó, las otras dos asintieron.- 

-Ya vámonos mejor, antes de que Chae llegué.- Mina comenzó a caminar, detrás de ella fue Momo y de último salió Sana, quien cerró la puerta con una llave que Mina no recordaba haberle dado.- Así que con eso entraron.- señaló la llave mientras se acercaban al auto de la taiwanesa.-

-Tu madre me la dio en caso de emergencias.- se encogió de hombros mientras subía en el asiento del copiloto.-

-Hola Chou.- Mina saludó cuando se sentó en la parte trasera. Wonyoung se apartó del cuello de Momo y sonrió mientras agitaba sus manos.-

-¡Hola TzuTzu!.- la más alta sonrió y se estiró hacia atrás para dejar un beso en la mejilla de la pequeña.-

-Hola Young. Myoui.- le dedicó un asentimiento a la japonesa menor y volvió a su lugar.- ¿Alguna idea de a donde quieren ir?.- preguntó a la vez que encendía el motor.-

-¡A comer helados!.- Wonyoung exclamó. Todas la miraron.-

-A comer helados.- Sana apoyó.-

-A comer helados será, entonces.- con eso, el auto entró en las calles, directo hacia la heladería más cercana.-