Coming of Age at High Tea [Bellamione,Cissamione,Andromione]

Invitados inesperados en una fiesta tan esperada

Se terminó. Después de siete años, innumerables batallas y demasiados amigos perdidos, Lord Voldemort finalmente había sido derrotado. La escuela era una ruina, con enormes agujeros en las paredes del castillo y los residuos de miles de hechizos combinándose de formas nuevas e impías por toda la alfombra animada. El Ministerio estaba sumido en un caos total, si el Ministro recién desposeído era una indicación, y la gente deambulaba por los terrenos del castillo, sin confiar del todo en su recién descubierta libertad.

Harry se preguntó cuándo se asimilaría todo. Si todas sus cicatrices alguna vez sanarían. Había perdido a muchas personas que amaba: sus padres, Sirius, Dumbledore. ¿Cedric? ¿Una conversación sincera en torno a una copa contaba como algo querido para él? Snape cruzó brevemente por su mente, pero no había manera de que Harry permitiera que un acto heroico de autosacrificio borrara años de maltrato, todo lo cual surgió de un deseo retorcido de follar a la madre muerta de Harry. El comportamiento de Incel, es lo que era. Dumbledore era el tipo de hombre que "veía lo mejor" en las personas, incluso cuando no lo merecían.

Ahora que lo pienso, ¿era Snape la única persona cercana a él que había muerto la noche anterior? Colin Creavey había sido aplastado por la caída de mampostería, pero sólo porque no dejaba de tomar fotografías con esa maldita cámara. Típico Omega, intentando ser parte de las cosas sin tener la temeridad de agarrar la vida por los bezoares.

Había habido otros apuros. Lupin estaba en San Mungo, habiendo "arreglado las cosas" exitosamente con Fenrir Greyback. George había sido mordido por una araña, de alguna manera, pero no era como un castillo construido al lado de un Bosque Encantado, el bosque infestado de arañas no tenía grandes cantidades de antídoto a mano. Hagrid, que lo bendiga, había intentado maldecir al Señor Oscuro después de la "muerte" de Harry. Realizar Imperdonables fue bastante difícil con años de entrenamiento y una varita funcional: el paraguas de Hagrid tenía tantas posibilidades de maldecir a Voldemort como Harry de resucitar de entre los muertos. En circunstancias normales, eso es. La noche anterior había sido una excepción, y Harry no estaba ansioso por repetir. Ni siquiera le gustaba King's Cross, por el amor de Merlín.

Harry suspiró, pateando una piedra al Gran Lago mientras dejaba que sus pensamientos se calmaran. Si no hubieran perdido a Hermione en la oscuridad antes de su búsqueda de los horrocruxes, realmente no habría habido mucho que empañara las celebraciones. Tú Sabes Quién estaba en lo que fuera que pasara por el infierno mágico, y sus seguidores habían sido detenidos mientras esperaban el castigo. Él y Ron nunca habrían podido ver las cosas sin su amiga perdida, el Cerebro Omega , el Alfa Harry y el Beta... Beta de Ron. Nunca habrían encontrado la espada, la copa o la diadema, ni el conocimiento que necesitaban para matar al mismísimo Lord Voldemort. A veces se sentía como si Hermione estuviera cuidándolos incluso en la muerte, transmitiéndoles información que pudieran necesitar, susurrándole aliento al oído a Harry mientras dormía. Se sentía bien pensar que ella siempre estaría con él, incluso si no hubiera aparecido durante la Piedra de la Resurrección del día anterior. Probablemente esté ocupado o algo así. Más allá parecía una escena bastante activa.

Oh bien. Sólo necesitaba terminar una serie más de aburridas felicitaciones en el Gran Comedor antes de que todo terminara, al menos por un tiempo. Se enfurecerían más tarde, y tal vez él podría convencer a Ginny para que le diera una oportunidad a todo el asunto del apareamiento. Después de todo, ahora era el Alfa más elegible en el Mundo Mágico.

El Gran Salón estaba lleno hasta los topes cuando llegó, lleno de combatientes victoriosos y aduladores vacilantes. Nada como ganar una guerra para sacar a relucir a las fanáticas, supuso, y la mitad del Ministerio había seguido como de costumbre durante los siete meses de reinado de Voldemort. Si intentaran procesar a todos los que habían colaborado, rápidamente se quedarían sin magos.