Esperanza y curación

Capítulo 13: Un retorno a la Normal

AN: Advertencia de activación por abuso en este y próximo capítulo

Capítulo 13: Un retorno a la Normal

Harry abotonó la parte delantera de sus pantalones, el temblor persistente ocasional que hacía que su dedo se deslizara del plástico duro. Una vez que finalmente logró sujetar las cosas obstinadas, se puso la camisa sobre la cabeza, con cuidado de no romperse las gafas en la nariz. Tiró de la parte delantera, deseando desesperadamente que tuviera algo que usar además de la camisa un tanto ratonada que había elegido para la tercera tarea. Salió de detrás de la cortina, encontrándose cara a cara con una pequeña botella azul.

"La última," dijo la señora Pomfrey, colocando la botella en su mano. "No detendrá el último de los efectos secundarios, pero debería reducir su frecuencia."

Asintió, girando hacia donde se abrían las puertas del ala del hospital, permitiendo la entrada de la familia Delacour. Fleur llevó a su madre y a su padre adentro, ofreciéndole a Harry una ola rápida mientras avanzaba. Se había cambiado del atuendo que había usado para la tarea, y a juzgar por su cabello plateado ahora impecable atado con una cinta naranja, había encontrado tiempo para ducharse.

De pie en su ropa rasgada sin tanto como un chorrito de agua, se encontró un poco celoso, pero en su mayoría avergonzado.

Harry suprimió la tensión inmediata que precedió a una contracción lejos del Sr. Delacour que se acercó, con la mano extendida.

"Es bueno conocerte en circunstancias menos extremas", dijo. Sus ojos marrones claros se arrugaron con una sonrisa, casi ocultando las profundas ojeras que descansaban debajo. Stubble oscureció sus mejillas y barbilla, pequeños puntos de blanco que se destacaban contra la barba oscura. Apretó la mano de Harry con un agarre firme, luego dejó caer su mano. "Aunque supongo que eso no es del todo cierto, ¿verdad?"

"No, Señor."

"Oh, por favor. Después de todo, siéntase libre de llamarme Sebastian, o el Sr. Delacour por lo menos."

"Queríamos ver cómo estabas", dijo Apolline, intensificando junto a su esposo. Fleur se paró a su otro lado, con una sonrisa incómoda revoloteando sobre sus labios. "Fleur nos ha dicho en general de su terrible experiencia, y para ser sincero, me sorprende que esté fuera de la cama."

Madam Pomfrey dejó escapar un olfato audible de cerca.

"Tengo mucho descanso, señora", dijo Harry, resistiéndose a la mirada reprochable que recibió a cambio. "Er...Señora Delacour."

Una sola ceja imperiosa se levantó en respuesta a su declaración que casi lo hizo reír en voz alta. Lo había visto de Fleur más de una vez cuando dijo algo con lo que no estaba de acuerdo.

"Sea así como sea,", dijo, su gentil incredulidad se desvanece. "Sebastian y yo queríamos volver a agradecerles antes de despedirnos. Por favor, cuídate este verano. La mayoría de las personas están postradas en cama durante las semanas siguientes...ese hechizo." Ella escupió las últimas palabras como un juramento particularmente sucio. "Pero no ustedes dos."

"Estamos bien, mamá", intervino Fleur. Harry vio el ligero rollo de sus ojos. "Cualquier efecto persistente ha desaparecido."

Harry asintió lentamente, apretando las manos detrás de la espalda.

"Como dije antes", dijo Delacour, una vez más ofreciendo su mano. "Estamos en deuda con usted. Avísame si hay algo que pueda hacer por ti", se detuvo, escondiendo un bostezo debajo de una mano. "Si alguna vez puedes atraparme fuera del trabajo, eso es. Hay días ocupados por delante."