Capítulo 09

526 82 5
                                    

---Me perteneces, te pertenezco. 
Eres mi ángel caído del cielo...

  Eres mi ángel caído del cielo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


---Narra Hyunjin---
~~~~~♥︎~~~~~

Mentiría si dijera que no me exitaron las palabras de Felix.

Fueron sus palabras, su cuerpo, su belleza, su sonrisa, su forma de protegerme, su manera de cuidarme y su voz tan profunda las que me llenaron de mariposas el estomago. Nunca me considere como activó pero tampoco pasivo, puedo decir que soy vastante versátil.

Felix me observa sentando en mi regazo y puedo observar la lujuria que hay en esa mirada que me regala, sus pupilas rojas están dilatadas y con total delicadeza sus manos hacen un recorrido desde mis labios pasando por mi abdomen marcado en el cual se detiene un momento y se inclina para lamer ese lugar que parece una tableta de chocolate debido al constante ejercicio que Changbin me obligó a hacer con él y ahora se lo agradezco por que Felix esta más que fascinado.

Mi cuerpo se estremece con el contacto de sus labios y su lengua picando mi hombligo, un escalofrío recurre mi cuerpo y siento como una corriente eléctrica sacude todo en mí y termina en mi pene el cual esta totalmente despierto y en su punta yacen gotas de presumen.

---Tu cuerpo es realmente delicioso--- Me susurra Felix mientras sube su mirada y sus ojos conectan con los míos haciendo que me vuelva totalmente sumiso ante él.

Su mirada penetrante escanea cada parte de mi cuerpo sin pudor alguno, mis mejillas están completamente rojas lo puedo sentir, nadie nunca había visto mi cuerpo en total desnudez pero aquí estoy en mi cama con un dulce ángel que gobierna el infierno, estoy sin ninguna prenda y completamente a su merced, soy suyo, mi cuerpo le pertenece al igual que mi alma.

Y mierda, quiero y deseo ser follado malditamente fuerte por ese bello querubín.

---¡Aaaahhhmmm!--- un gemido sale de mi boca cuando siento que mi pene es succionado por la cálida boca de Felix, su lengua envuelve mi falo y una vez más esté es succionado, arqueo mi espalda sintiendo miles de sensaciones inexplicables. Inconscientemente llevo mi mano hasta su cabeza y mis dedos se enredan en su fina y suave cabellera, muerdo mis labios con fuerza mientras muevo mi cadera para follarle esa bonita  boca que tiene.

---Aaah Ff-fefe Felix--- Siento como dos de sus dedos entran en mí y comenzan a estirar ese lugar que pronto será invadido por el miembro de Felix el cual tiene un tamaño bastante increíble, a lo mejor me parta en dos y como soy tan masoquista se que me encantara...

---Eso mi amor, gime mi nombre--- Mis gemidos son tan fuertes que incluso pienso que los vecinos vendrán con antorchas y lanzas para cazar a la bestia que no los deja dormir; pero eso no me frena, no impide que disfrute de la mamada que el diablo me está dando.

---¡¡Dios!!-- digo en un jadeo y siento como él se detiene.

---No menciones a mi padre mientras hacemos algo que no es puro ante sus ojos---
Dice y vuelve a meter mi pene a su boca y un tercer dedo en mi trasero.

---Aaaahhh, Diablos Felix--- Suelto en un gemido vastante fuerte y todo mi semen llena su boca y joder él se lo traga y luego empieza a toser y me siento malditamente avergonzado por que lo he ahogado y para ser sincero no vi venir eso.

---L-lo siento--- digo avergonzado pero él coloca su cuerpo en medio de mis pierna y su boca se apodera de la mía, puedo sentir el sabor de mi semen en ella y luego el sabor  metálico de mi sangre cuando sus dientes muerden mis labios.

---¿Por qué lo sientes? Eso fue malditamente caliente--- dice haciendo un moviendo de pelvis el cual me hace ver las estrellas al momento que su pene roza con el mío el cual ya se encuentra flácido por el reciente orgasmo.

Sus labios bajan hasta mi cuello, cierro mis ojos sumergido en la exitacion sintiendo como mi respiración está agitada al igual que mi corazón. El cabello de Felix  hace cosquillas en mi mandibula y al momento de abrir mis ojos veo como las luces han cambiado al color rojo el mismo tono de sus ojos y me sobresalto al darme cuenta que no estamos en mi habitación.

---Te dije que te llevaría al infierno, cariño--- Me susurra al oído y una sonrisa se dibuja en su rostro.

Observó a mi alrededor mientras el tortura mi cuerpo con sus labios.
Hay candelabros por todas partes, las paredes son de piedra, del techo cuelga una lámpara y puedo destituir que esta hecha de diamantes rojos.

Puedo observar un estante lleno de libros pero hay uno que llama mi atención, uno enorme que flota en el aire y está cerrado con una cerradura bastante extraña, la cama sobre la que estoy está cubierta por sábanas completamente blancas y de la cabecera cuelgan una cadenas de oro con grilletes.

---¿Quieres estrenarlas?--- Pregunta cuando se da cuenta que las he observado con el ceño fruncido durante un par de minutos ---Todo en esta habitación fue cambiado para  ti, Jinnie.

---¿Para mí?--- preguntó confundido.

---Ni siquiera yo he dormido sobre estas sábanas--- Siento como su aliento choca con el mío ¿En que momento se acercó tanto? Pensé que cuando dijo que me llevaría al infierno se refería a las sensaciones que me haría sentir pero nunca imagine que literalmente me llevaría al infierno más sin embargo aquí estoy, desnudo en su habitación apunto de ser follado por el mismísimo diablo.

Jinlix: Cuando El Diablo Se EnamoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora