Vuelve el amor

Capitulo 4

Estaba conforme, a pesar de estar casados tenían una relación de amistad más que nada, aunque ya había atrapado a Sasuke viéndolo fijamente.

Era como si el azabache le quisiera decir algo y no pudiera, sabía que no era penoso y decía las cosas luego de pensarlas.

Quiza lo que hacía falta era que se tomarán un poco más de tiempo para poder tratarlo como lo que era, su esposo, no se acostumbraba a eso todavía, pero lo que si es que cada día iba a recoger a Sasuke del trabajo y por las tardes lo veía ocupado con su universidad.

— ¿Harás algo por la tarde? — cuestionó su "nueva asistente", Hinata.

— Iré por Sasuke y lo llevaré a comer ¿Porqué?

— ¿Dónde nos veremos? No podemos salir juntos, debe ser aquí en el trabajo — presionó su pecho contra el escritorio, provocando que el rubio la mirara fijamente.

— No lo sé — frotó su cabeza un poco — Tal vez mañana, puedo decirle que tendré trabajo hasta tarde — desvío la mirada lo más rápido que pudo.

— ¿De verdad crees que no nos descubrirá?

— Lo hago, no es idiota, pero mantiene su distancia, tampoco hay que ser tan obvios.

— Está bien, pero trata de ganarte su afecto, es lo que necesitas para que no sospeche — recomendó.

— Tú quedate tranquila, sé cómo manejar las cosas ttebayo — dijo con una sonrisa confiada — No creo que vaya a pasar algo.

Cómo siempre fue en búsqueda del Uchiha, lo vio sentado en una banca, se acercó a él, sin cruzar palabra ambos caminaron hacia el auto.

— ¿Cómo te fue? — preguntó Naruto.

— Estuve algo ocupado porque me mandaron a cuidar a los niños de primer año — murmuró mientras buscaba algo entre sus cosas — Me regalaron esto — le mostró un pequeño dibujo de un tomate.

— Está lindo ttebayo ¿A dónde quieres ir a comer?

— A dónde sea, no tengo mucha hambre — levantó los hombros.

— Yo tampoco tengo muchas ganas ttebayo — respondió quedito — ¿Quieres ir a casa? — cuestionó bastante ansioso de su respuesta, eso le daría tiempo para ir con Hinata y podría...

— Quiero hacerlo — cortó de inmediato los pensamientos de Naruto.

— ¿Qué dijiste? lo siento, estaba pensando en algo.

— Te decía que como ya tenemos tres meses casados y hemos salido más tiempo creo que es momento de hacerlo.

— ¿Cómo? ¿Por eso no quieres ir a comer?

— No es eso, si quiero comer pero podemos comer en casa y por la noche, hacerlo, es lo que haría una pareja ¿No?

— Sasuke, te entiendo pero... — lo miró sin saber que decir en realidad — Es que necesito — soltó un suspiro — Está bien — admitió con una sonrisa — Si eso es lo que quieres — dijo saliendo del auto, esperando a que el doncel imhiciera lo mismo para entrar a la casa.

— No creas que te estoy obligando, puedes rechazarlo y lo entenderé — hizo contacto visual directo — Solo dime sí o no.

— No te preocupes — lo miró con una gran sonrisa — Podemos hacerlo.

El azabache dudó un poco pero fue directo al piso de arriba.

— Supongo que vas a prepararte mentalmente — mencionó dejando las llaves en la mesa de junto.