7. AVANZANDO

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Lisa

Abrí los ojos y miré a mi alrededor, amplíé mis ojos mirando rápidamente mi reloj para ver la hora, suspiré aliviada, me había quedado dormida pero por fortuna llegaba a mi próxima clase. Descanse mi cabeza en el tronco, estas últimas semanas no había podido dormir y realmente no quería, porque pasaba la mayor parte de esas horas soñando con Jennie, sí, con esa chica que no salía de mi mente y es que se hacía más recurrente y eso solo implicaba problemas, no para ella claramente, para mí que cada día me consumía más.

Dejé mis pensamientos de lado cuando vi a una persona con cara de pocos amigos venir hacia mi, era Sunn, la amiga de Jennie que me había golpeado el primer día.

—¡Lalisa! — dijo furiosa

Me levanté y de inmediato sentí su puño en mi cara. ¿Otra vez? Maldición. Caí con fuerza al pasto. Otro golpe fue propinado en mi ojo y tenía a esa idiota sobre mí. Me dio dos golpes más y se levantó.

Estaba totalmente aturdida, sentí el sabor de la sangre y mi nariz escurriendo.

—Esto es para que dejes en paz a Jennie– dijo mirándome de pie.

—Sunn, déjala — dijo una chica a su lado.

—Park Sunn a la dirección — la llamó una voz de mujer— lleva a Lalisa a la enfermería — perdí un poco la noción, alguien me ayudó a reponerse, comencé a toser por la sangre, colgaron mi mochila en mi hombro y me ayudó.

Ahora estaba en la dirección con un hielo en mi ojo y la directora regañando a la idiota que me golpeó.

—Quedas suspendida, Park, salgan de mi oficina— me levanté, la directora salió primero y salí sin siquiera mirar a esa idiota

—Roseanne— la directora saludó a Rosé al salir, me asombre — alumna Jennie, ¿qué están haciendo aquí? — Jennie llegó a lado de la rubia y bajé la mirada inmediatamente.

—Vine por mi hermana, ¿qué hizo?

La mujer río molesta.

—Lo que debe saber es que no la he expulsado, tendrá tres semanas de suspensión por esto —me señaló—. Seguía con la mirada abajo, estaba segura de que Jennie me examinaba y me avergoncé.

—Lisa...— mi amiga se acercó a mí—. ¿Estás bien? ¿Duele mucho? — me preguntó, yo negué, mentía obviamente.

—Es momento de ir a clase, Sunn tu castigo comienza hoy, recoge lo que necesites y pídele a alguien que te ayude estos días— la directora volvió a su oficina

—Vamos Lisa— Rosé me jalo para irnos

—Vaya, yo soy tu hermana y te preocupas por ella— gritó la idiota de Sunn

Me tranquilizaba un poco que Rosé estuviera cerca, era agradable y ser su amiga había sido lo mejor de mi rutina estos días, pero después del incidente de Jennie, se sentía apenada y agradecida, apenada por la actitud de su hermana, la cual me tenía estresada, con esto ya estaba colmando mucho más mi paciencia, sus reclamos y sus intentos de defender a sus amigas, eso sin contar las miradas de odio que me da en clases.

Me dejé caer en la maldita mesa de la cafetería, con el ojo hinchado y el labio roto. Estaba más que furiosa por esto, yo ni siquiera había hecho algo y de la nada me había ganado unos golpes. Si tan solo me hubiera defendido otra cosa sería, probablemente Sunn estaría peor y no me sentiría tan humillada.

Pero no podía, debía mantener mi perfil bajo, sobre todo para seguir siendo observada como yo, Lisa, la menos agresiva de las Manobal, la más civilizada, pero dolía como el infierno mi cara, suspiré y saqué mi teléfono celular para ver mi rostro con la cámara del teléfono, ¡Jesús! Estaba hecha un asco, de verdad esto cobraría factura a mi cara, dejaría marcas por días.

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⏰ Last updated: Mar 01 ⏰

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