Capítulo 5

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-Disculpe, señor, creo que puedo estar malinterpretando un poco lo que acaba de decir—podía notar el nerviosismo en el tono de Jonathan. Si lo conociera, podría decir que está a punto de llorar. (sería muy divertido, no te mentiré. Pero primero creo que lloraré yo) Tranquilo, yo tampoco estoy saltando en una pata de la felicidad de estar más tiempo contigo. Si hay algún libro de quejas, estoy dispuesta a escribir un testamento para cambiar de compañero— ¿Me está derivando a guardaespaldas de almas?

¿"Guardaespaldas" de almas? ¿Cuántos puestos de trabajo existían en este lugar? Con razón están cortos de personal, tienen más puestos que un ministerio.

-Claro—contestó con simpleza y una amplia sonrisa. A mi lado, Fleur trataba de contener la risa (fallando estrepitosamente) y Xander se apretujaba los dedos de las manos de los nervios mientras movía su pierna sin parar.

-Pero señor, con todo el respeto, soy parte del escuadrón de búsqueda desde que llegué aquí ... yo... yo nunca... —comenzó a balbucear y trabarse. Creo que estaba teniendo una hiperventilación, ¿es algo así como bajar de puesto? ¿Eso le estaban haciendo? Sería el peor día de su... ¿muerte?

-Creo que es una buena oportunidad para dejar que tus aprendices comiencen a tener cierta independencia, ¿no lo crees?. Además, en todos estos años de servicio no has tomado ningún día de descanso—ante la expresión confundida de Jonathan, supuse que él no sabía que el día libre era algo disponible en el más allá, no lo culpo. Pensándolo bien, ¿con qué excusa pedirías un día libre? Dudo que se enfermen en el más allá o decir que te tienes que llevar a tu perro a la veterinaria ¿O es posible? ¿Los animales también tienen un más allá? Debería preguntarle cuando salgamos de aquí... aunque tampoco sé si eso es una buena idea. Creo que esta experimentando una pesadilla— Confío en tus habilidades para ayudar lo antes posible a la señorita Harrison a reencarnar.

-Pero señor... —tartamudeó— Tampoco se debería tomar la decisión tan a las apuradas. Deberíamos ver si los chicos están de acuerdo con...

-Yo no tengo problemas—contestó de inmediato Fleur ganándose una mirada de reprimenda por parte de su jefe. Al menos no era su única enemiga en la sala. ¿Tendrán un sueldo? Porque si Jonathan sigue siendo su jefe lo más probable es que se lo baje en venganza— Y Xander también— cuando el nombrado estaba por objetar en contra, ella apretó con fuerza su rodilla para que mantuviera la boca cerrada. Podía imaginar el grito ahogado que quería soltar.

-Realmente, señor, no desearía alejarme del área de búsqueda. No tengo ningún problema con el trabajo—suspiré aliviada al ver que su jefe lo estaba meditando nuevamente. Obviamente era una locura. ¿Podría pedir que Jimin sea mi escolta? Sería divertido. Tenía sentido del humor. Y no me miraba como alguien que quisiera abandonarme en una caja bajo la lluvia.

-Bueno, si lo pones de esa forma... cada tanto le diré a la oficina de casos que te mantenga en lista por si estamos cortos de personal.

Por el rostro de horror de Jonathan, suponía que eso no había sido el gran cambio. Clavó sus ojos verdes sobre mí, como si yo fuera una malformación del universo, siendo la cosa más horrible que se había cruzado frente a él. Debe estar pensando que soy la mensajera de todas sus desgracias. No lo culpo, tengo la misma sensación con él y su personalidad tan incandescente.

-Mucha suerte en su búsqueda, señorita Harrison. Cualquier inconveniente, mi oficina siempre está a disposición.

Sonreí débilmente para aguantar mis ganas de gritar y llorar.


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Holaa

La trama esta comenzando de a poco, ¿qué piensan?

Nos vemos! 

Un vínculo eternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora