Transmigración en un cuerpo compartido con una maldición

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Los planes de kenjaku estaban en problemas, Choso declinó en el plan al igual que sus hermanos, su paradero no era fácil pero no importaba, esperaba que no abriera la boca, el efecto sorpresa desaparecería y no se podría sellar a satoru Gojo.  Kenjaku buscó más maldiciones de grado especial e incluso las obligo a crecer en poder y crear su lealtad a través de la manipulación de sangre. 

Kenjaku debía ser rápido con el plan, no había tiempo o talvés debería esperar y buscar calmadamente otra manera. Debía haber otra manera, pensó.

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En la escuela de hechiceía Yuuji se encontraba arrodillado con las manos alzadas, a su lado estaba Kugisaki.

- ¿Por qué se me castiga así también? Solo debería estar Yuuji por engatusarme.- Kugisaki exclamó a su profesor Yaga.

- Por que no lo detuviste.- Kugisaki solo se resignó.

- Lo siento Kugisaki, profesor Yaga deme el castigo de Kugisaki, ella no tiene la culpa.- Yuuji se sentía culpable por su compañera.

- No tienes derecho a hablar, no solo te pusiste en riesgo, también la misión y por si fuera poco te comiste un dedo de Sukuna.- Yaga exclamó enojado.

- No me lo comí, me lo dieron cuando estaba inconciente.- Yuuji exclamó.

- Correras 20 vueltas Itadori- Yuuji ya no dijo nada, aunque pensaba que el director Yaga era suave, 20 vueltas no eran nada.

Los días en la escuela  de hechicería estaban tranquilos, la mayoría pensaba eso, que bueno que Gojo no estaba.

O así se suponía que lo pasarían los profesores hasta que Gojo interrumpió.

- ¿Qué les estás haciendo a mis queridos estudiantes Yaga?- Gojo interrumpió. Yaga lo miró con molestia nada fingida.

-Yuuji aboga por nosotros, ve, ve dile a Gojo sensei.- Kugisaki le susurró a Yuuji.

- ¡Gojo sensei bienvenido de vuelta, ¿cómo le fue en su viaje?- Yuuji si escuhó la petición de Nobara pero primero saludó.

- !Oh que lindo es mi adorable Yuuji y el mejor estudiante! Nobara aunque me ofende tu petición, lo haré porque soy alguien muy benevolente.- Gojo acarició la cabeza de Yuuji al terminar de hablar. Yuuji sonrió de vuelta. Nobara estaba un poco apenada por ser descubierta.

- Itadori Yuuji y Kugisaki Nobara cometieron muchas faltas durante su misión, poniendo en peligro sus vidas.- explicó Yaga.

- No creo que sea tan grave si están aquí completos.- Gojo esclamó divertido.

- Itadori se comió un dedo de Sukuna, ¿qué dices a eso?- Yaga quería mencionar sobre las opiniones de los altos mandos pero lo haría en pivado con Gojo.

- Pues aún así, está aquí y sin lastimar a nadie, chicos ya bajen sus manos.- Yuuji agradeció y Kugisaki se relajó.- Pueden retirarse.

- Sí Gojo sensei, hablemos más tarde, quisiera pedirle algo. Vamos Kugisaki. - Yuuji se alejó luego de que Gojo asintió.

- Eres una mala influencia con esa actitud.- Yaga se lo reprochó.

- Mi actitud no tiene nada que ver, solo los resultados. Yuuji se ha vuelto más fuerte pero... hay algo más, ¿no es cierto?- Gojo intuía en base a la petición de Yuuji y sus nervios.

Yaga le explicó la situación sobre la misión y sobre un hechicero que decía ser el hermano de Yuuji. Gojo se sorprendió de lo último dicho, Yuuji no le había mensionada acerca de algún hermano y en sus informes no había nada de eso tampoco, pero asumió que sería un amigo como Todo con un cariño especial hacia el pelirosa. Que molesto y problemático pensó Gojo, ya tenía suficiente con Todo y su cercanía innecesaria a Yuuji. Gojo se dejó llevar, sacudió la cabeza,luego de la charla se dirigió con Yuuji buscando su energía maldita.