Mi Genio Favorito ~Criminal Minds~ (Spencer Reid)

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______ P.D.V

-¿Segura que lo conoces? -Preguntó mi madre.

-Tranquila mamá, está bien -Dije mientras sostenía su mano fuertemente, para después soltarla.

-Estaremos afuera -Dijo mientras sostenía una mirada en mi llena de felicidad para después mirar a Aaron y, por fin, salir.

-¿Cómo te sientes? -Preguntó después de la salida de mis padres.

-Bueno, no pensé que fueras tú el que me encontraría -Al terminar, Aaron tomó asiento donde hace unas horas había estado Spencer.

-¿Cómo te sientes? -Repitió, solo me limité a dar un gran suspiro.

-No sabes cuantas personas me han preguntado eso hoy -Y miré mis uñas. Por alguna extraña razón no podía mirar a Aaron a los ojos, no en ese momento.

-Y ¿qué has respondido? -Sentía su mirada fija en mi.

-"Lo estaré" o "tranquilos", hasta "todo bien, gracias" -Dije con una sonrisa apagada, mientras todo dentro de mi estaba tratando de reunir fuerza para mirarlo a los ojos sin soltar ni una sola lagrima.

-Y ¿es cierto? -Preguntó por fin.

No, claro que no era cierto. Estaba mal, todo estaba mal, y Aaron me conocía lo suficiente como para saber como me sentía solo con mirarme y, además, su trabajo no me venía en conveniencia, digo, ¿cómo engañar a un perfilador?

Tardé unos minutos tratando de idear la respuesta perfecta y tardé un poco más dándome cuenta de que nunca la habría.

-¿Cómo podría serlo? -Y lo miré por fin, ésta vez sin miedo de que me viera llorar, no tenía miedo de mostrar lo que en verdad era, no con él -Me siento rota, con asco, todo se siente igual a como se sintió hace años. He estado todo el día tratando de convencerme de que estoy bien... -Un enorme nudo en la garganta me impidió seguir hablando, mis lagrimas nunca habían sido tan abundantes, sentía pena por mi.

Rápidamente tapé mi cara con mis manos.

-Tranquila, estoy aquí... -Y se puso de pie para darme un abrazo que, en mi opinión, había sido el mejor desde que había vuelto.

Hotchner P.D.V

No podía hacerlo, no en ese momento. ________ estaba mal, mucho más que la vez anterior, la Jefa Strauss no sabía lo que estaba pidiéndome.

-Escucha ________ -Y me solté de su abrazo -Sé que no es el momento, pero el buró me pidió que te entregara esto -Saqué la carta de dentro de mi saco que anteriormente Strauss me había entregado.

-¿Qué es esto? -Preguntó con voz temblorosa para después tomarla lentamente. Sus ojos reflejaban completamente como se sentía, no había luz en ellos, y eso no lo había visto desde hace años, cuando la conocí.

-Una carta de la Jefa Strauss, quiere que te unas al equipo -Dije al cabo de unos segundos -Les dije que no era el momento, pero insistieron y...

-Ni siquiera soy perfiladora -Interrumpió después de mirar cada detalle del sobre.

-Te investigaron, saben que fuiste a algunas clases de David y Reid y, bueno, eres ex agente de la CIA -________ no quitaba los ojos de aquel sobre blanco -No debes aceptar si no quieres, lo sabes.

El silencio era todo lo que había en la habitación en ese momento.

-¿Por... -Y dio un gran suspiro -¿Por eso estás aquí?

No, no estaba ahí por órdenes del buró, claro que al pedirme que entregará la carta debía ir justo ese día pero no es que no planeara visitarla, no le haría eso, nunca le haría eso.

-¿Qué? No, claro que no -Sus ojos comenzaron a tornarse rojos, estaba a punto de llorar de nuevo.

-Para ser un perfilador, no sabes mentir -Dijo, para después romper la carta en dos y darse la vuelta quedando de espaldas a mi -Vete.

-Escucha ______...

-¡Vete! -Gritó, provocando que sus padres entraran alarmados.

-¿Qué está pasando? -Preguntó el Señor Edminster.

No quería tener una discusión con sus padres, ni siquiera sabían quien era, ni como había conocido a su hija, no tenían idea de nada.

-Nada, yo... lamento molestarlos -Dije, para después salir.

¿Qué había hecho?

•Tres días después•

_________ P.D.V

-¿Entonces puedo irme? -Pregunté con una sonrisa adornando mi rostro.

-Bueno, según tus últimos estudios todo está en orden, así que si, te daremos de alta en unos minutos -Y me sonrió, para después salir por la puerta.

-Fantástico, odio los hospitales.

-Y ¿por qué me visitas? -Pregunté al momento en el que una pequeña risa se me escapaba.

-Bueno, eso es lo que hacen los mejores amigos -Y me sonrió -Hubiera venido antes, pero tus padres...

-Lo sé, tranquilo -Y tomé su mano.

-Aún no entiendo por qué me odian -Y se echó a reír, segundos después lo imité.

-Bueno, el haberle roto una pierna a mi hermana tal vez tenga que ver -Y reímos más fuerte.

Segundos después el silencio reinó en aquel cuarto.

-La extraño -Le dije.

-Nada de eso fue tu culpa, lo sabes, ¿no? -Y tomó asiento sobre la cama, justo a un lado de mi, para después pasarme su brazo derecho por el hombro.

-Lo sé, solo me pregunto qué hubiera pasado de haber abierto la puerta minutos antes -Mi voz se volvió ronca rápidamente.

-Deja de preguntártelo -Y me dio un beso en el costado de la frente, para después ponerse de pie rápidamente -Te diré algo, cuando salgamos de este horrible lugar te llevaré por una pizza, ¿qué dices?

-Bueno, he comido gelatina durante tres días, así que suena perfecto y, ¿qué tal una noche de películas después de comer? -Éste aumentó su sonrisa unos cuantos milímetros más.

-Trato hecho.

-Bien señorita Edminster, sólo tiene que firmar aquí y podrá irse -Dijo la enfermera que, segundos antes, había entrado sin siquiera tocar.

Tomé el bolígrafo y firmé rápidamente, me sonrió al instante y después salió del cuarto.

-Somos libres -Dijo Mike, yo sólo me limité a sonreír y tomar la ropa que descansaba en una pequeña mesa a mi derecha, para después dirigirme al cuarto de baño.

Comencé a cambiar mi ropa rápida y cuidadosamente ya que aún dolían mi heridas, mientras mi mente repetía las mismas palabras, "no dejes que nada arruine el día de hoy, no tiene que ser así"