El repartidor

#5 Bienvenido a este mundo feliz II

#5 Bienvenido a este mundo feliz II

Durante las siguientes dos horas, Jack siguió investigando la historia de este mundo para encontrar dónde comenzaban y terminaban las divergencias. Para encontrar qué otras diferencias importantes había con su mundo natal. Desde los países, pasando por los héroes y villanos notables, pasando por la historia del heroísmo y la villanía, y para terminar, regresó a Gotham. Investigó el clima actual de la ciudad, sus facciones criminales y su galería de héroes y villanos, en su mayoría villanos porque, mierda, se sorprendió al descubrir cuántos malditos criminales que eran considerados villanos tenía esta ciudad. Al menos comparado con sus protectores, los héroes.

Mientras tanto, a lo largo de su investigación, sin embargo, hubo algo que lo inquietó mucho.

'¡Jadeo, jadeo audible! Aquí no tienen pícaros. Si tienen supervivientes, eh, supongo que serán capas porque algunos supervivientes no tienen poderes pero siguen siendo héroes que actúan y visten el papel. De todos modos, si tienen capas con una disposición pícara, es probable que también los etiqueten como villanos. ¡Necesito cambiar esto!'

¡Se negó a ser agrupado en la misma bolsa que un villano! ¡Era una puta cuestión de principios! ¡Principio!

¡Especialmente considerando que la mayoría de ellos no eran mejores que mooks comunes y sin poder!

"Hola," Una voz rebosante de alegría se dirigió a él desde atrás, interrumpiendo su pequeña perorata mental. "No pude evitar notar lo absorto que estabas con tu investigación".

Jack se dio la vuelta y se encontró cara a cara con una mujer sonriente en silla de ruedas.

En su opinión, ella era sorprendente. Largos mechones de cabello rojo caían en cascada a ambos lados de sus hombros, con vibrantes ojos verdes escondidos detrás de lentes cuadrados sostenidos por una linda y pequeña nariz y una cara angulosa llena de pecas: estaba emitiendo grandes vibraciones de "apariencia linda de chica de al lado". .

Parecía tener entre 10 y 20 años, y con ambos sentados (ella en su silla de ruedas), Jack notó que tenía casi la misma altura que él. De hecho, ella era incluso un poco más alta que él. Y medía 1m77 (5'10") de altura.

Al estar tan cerca, tomó su nombre, escrito en una placa en su suéter verde, que la identificaba como "Barbara - Personal de la biblioteca" .

"¿Hay algo en lo que pueda ayudarte?" Preguntó Barbara, dándole una sonrisa genuina.

"Tiene una bonita sonrisa". Él decidió. "Una sonrisa bonita y contagiosa."

"Sí, de hecho", respondió Jack, correspondiendo dicha sonrisa. Fue dificil no hacerlo. Especialmente teniendo en cuenta que ella fue la primera persona que le sonrió y se ofreció a ayudarlo sin que nadie se lo pidiera. "Tengo una pregunta." Dijo antes de enmendar rápidamente: "No, tengo varias preguntas que necesitan respuesta. Y no diré que no si decide compartir su opinión sobre algunas cosas".

"Mmmh." Ella tarareó, mirando por encima de su hombro para mirar la pantalla, "Gotham, ¿eh? ¿Nueva en la ciudad?"

" Sí ", confirmó, abriendo la página. "Me acabo de mudar a la ciudad y hasta ahora, más de media docena de personas me han dejado boquiabierto cuando pedí direcciones para llegar a este lugar. ¿Las personas que no sean amables ancianos y chicas hermosas y serviciales normalmente son tan severas?" Jack felicitó, exagerando los elogios.

"Ahhh..." Sus labios se torcieron ante el cumplido. "Eso se debe a la sensación subyacente de tensión flotando en el aire. Las cosas se están... calentando en las calles, por decir lo menos. Con las tensiones hirviendo y gestándose bajo la superficie, las cosas pueden pasar de 0 a cien en segundos. Sólo hace falta un tiro perdido para que alguien provoque un grito en la calle. Ya hemos tenido algunos casos de tiroteos callejeros entre pandillas y policías. Y la gente es consciente de eso, se da cuenta de que las cosas están tensas y pueden vengarse. "Es más peligroso. Como consecuencia, la gente está más cautelosa y alerta. Ahora no es exactamente el mejor momento para salir y deambular por las calles por la noche". Hizo una pausa y rápidamente corrigió. "O incluso durante el día".