Retrocedí Y El Género Cambió

13

Capítulo 13 - Subasta (1)

Luna Winfred.

Una vez fue la estrella ascendente de la familia Winfred, un faro brillante de talento dentro de la familia gracias a su mente brillante desde la infancia.

Sin duda, hubo un tiempo en que Luna fue considerada una heredera potencial del patrimonio familiar.

Pero al final, todo se vino abajo'.

¿La razón? La retirada voluntaria de Luna Winfred, como es comúnmente conocido por el público.

Pero la realidad es otra.

Para calificar oficialmente como sucesor, es necesario el apoyo de los ancianos.

Sin embargo, los ancianos de la familia preferían a un varón para heredar el patrimonio, no a una mujer como Luna.

No sólo los ancianos, sino también el poderoso duque Winfred compartían la misma opinión.

Gracias a eso, no es una mujer común y corriente'.

La relación entre Luna y Kyle era lo peor de lo peor.

No es una exageración decir que el maltrato de Kyle dentro de la mansión llegó a su punto más bajo gracias a ella.

Si sólo era un desahogo de su frustración o si había motivos ocultos detrás, no lo sabía, y francamente, no me interesaba.

Independientemente de las razones, una vez una perra loca, siempre una perra loca.

Por supuesto, desde el momento en que Kyle empezó a tener conversaciones de noviazgo con Isabel, el tormento de Luna hacia Kyle disminuyó significativamente. Pero eso no significa que sus acciones pasadas fueran olvidadas.

"Ha pasado tiempo, ¿verdad? El ambiente ha cambiado mucho desde entonces".

Miré a Luna con una mirada apagada.

¿Por qué ha venido aquí?

Ya que hacía tiempo que no venía a la mansión, debería haber ido a una ceremonia de bienvenida o algo así. ¿Por qué aparecer en el campo de entrenamiento vacío?

Además, esa mirada astuta en su rostro... como si hubiera venido a buscarme...

"Escuché las noticias. ¿Vas a romper el compromiso pronto?"

Ah, la anulación.

Vino aquí sólo para quejarse de eso, ¿eh?

Como era de esperar, es una mujer desagradable.

"Imagina cantar canciones de boda con tanta ilusión sólo para acabar así. Me preocupaba que te hubieras vuelto loca."

Qué tontería.

Respondí con calma, tragándome las ganas de maldecir.

"A la mierda tus preocupaciones".

"...¿Qué?"

Ah, maldita sea.

Accidentalmente solté lo que pretendía guardarme para mí.

Ya que no voy a tener que verla una vez que salga de la mansión de todos modos, ¿había alguna razón para que yo bajara mi actitud?

Sintiendo que era el momento adecuado, dejé salir todo lo que había reprimido hasta ahora.

"¿No puedes irte? Ver tu cara después de tanto tiempo me da náuseas".

"¿Estás loco?"

"Ugh."

"..."

No es una broma; realmente sentí náuseas.