Se dice que una vez fui un pez gordo [viaje rápido]

4.10

La caravana dejó a Gu Meizhi en el desierto para que se las arreglara sola. Ella luchó por sobrevivir durante dos días sin encontrar un oasis. En cambio, encontró dos espejismos. Uno era una exuberante vegetación verde y un lago claro y transparente bajo el sol. Finalmente encontró el oasis, corrió emocionado hacia él y terminó comiendo un bocado de arena.

En otra ocasión vio un edificio imponente en el aire, de un color como el jade blanco, un hermoso jardín y una enorme estatua de un espíritu guardián al frente, lo que hacía pensar a la gente que era una ciudad elegante suspendida en el aire. .

Gu Meizhi parecía en trance. Sintió que el edificio le parecía familiar y no sabía dónde estaba, pero pudo darse cuenta de que este era el segundo espejismo y abandonó su lucha.

Tenía la boca seca, como un pez al que le hubieran quitado el agua, casi muriendo de sed en este mar de oro.

Antes de morir, pensó mucho, lamentó haber seguido a sus padres a cavar tumbas en el extranjero. Extrañaba la ciudad moderna, el tráfico intenso, la alegría y la libertad de los tiempos modernos e incluso muchas cosas. Incluso comenzó a recordar el vaso de agua helada con gas que su exnovio cabrón le compró en el verano, y luego derramó lágrimas cuando accidentalmente pisó las arenas movedizas que tragaba, gritó de horror. Se dio cuenta de que en realidad todavía estaba. Apreciaba su vida, pero cuanto más luchaba, más rápido se hundía y se sentía muy reacia ...

En este momento, Yun Sang, que estaba lejos, de repente recordó algo. Sacó su mesa de arena casera y descubrió dónde estaba Gu Meizhi en ese momento. Pensó que el castigo estaba en su lugar, por lo que levantó la maldición del envejecimiento. Gu Meizhi y le pidió que El desierto ejerce poder divino.

Cuando la parte superior de la cabeza de Gu Meizhi quedó sumergida en arenas movedizas, pensó que estaba muerta, pero cuando abrió los ojos, una luz blanca brilló a través de ella y cambió a un entorno diferente. Este fue el lugar que la impresionó profundamente, el principal. tumba de Demes, que la llevó a viajar en el tiempo. Aunque no sabía por qué podía regresar a los tiempos modernos, Gu Meizhi estaba muy emocionada ahora y no quería ahondar en el motivo en absoluto.

Vio el familiar ataúd funerario e inmediatamente recordó algunos momentos aterradores en su mente, incluida la frialdad del sacerdote cuando lanzó la maldición y lo poderoso que era su poder para controlar el viento y la lluvia. Habían experimentado antes de entrar al mausoleo. Qué orgullosos y complacientes, todos cayeron dentro y murieron miserablemente.

Gu Meizhi estaba tan asustada que ni siquiera se atrevió a recoger los huesos y las reliquias de los miembros de su familia. Rápidamente se escapó a cuatro patas y tomó un montón de joyas antes de morir. Después de todo, los miembros de su familia estaban muertos. Todos los objetos de valor que tenía encima antes de viajar en el tiempo fueron despojados por la caravana. Es solo un pequeño grupo de objetos funerarios, no tan buenos como el oro que hay en la tumba principal. Solo tómalo. Es una mujer débil, pero todavía tiene que vivir en los tiempos modernos...

Justo cuando Gu Meizhi pensó que siempre podría escapar, inesperadamente se topó con un grupo de policías extranjeros y un grupo de personas vestidas como expertos y eruditos. Las dos partes se encontraron y se miraron. Lo que sucedió a continuación fue tan borroso que Gu Meizhi. Ya no podía recordarlo.

Un grupo de arqueólogos la procesó por dañar la tumba y robar reliquias culturales. Las joyas funerarias que llevaba en el bolsillo y el camino excavado fueron la mejor evidencia. También se descubrió que era una ladrona de tumbas en el extranjero y fue arrestada por la población local. El gobierno lo deportó a su país y pasará el resto de su vida en prisión.

Gu Meizhi casi se vuelve loco.

Quiere volver a los tiempos modernos, ¡pero no quiere pasar el resto de su vida en prisión! Gu Meizhi presentó una solicitud al personal de la prisión e intentó contactar a su exnovio para pagarle la fianza.