Champagne problems | Taylor Swift

some clarity on the matter

>>PRESENTE<<

[DOS SEMANAS DESPUÉS]

OMNISCIENTE

«Lo único que necesito es que desaparezcas de mi vida, Alison.»

Sus palabras se repetían una y otra vez en la mente de Taylor.

—¿Cómo te has sentido estos días, Taylor? ¿Qué tal lo llevas?— Taylor volvió su atención a su terapeuta.

—Me siento como si alguien hubiera clavado su mano en mi pecho y me hubiera arrancado el corazón, para luego tirarlo al piso y aplastarlo, y finalmente colocarlo en su lugar otra vez, pero fuera de eso estoy excelente— respondió sarcásticamente.

—Sé que puede ser difícil para ti llevar todas estas emociones tan complicadas, pero estoy aquí para ayudarte—.

—¿Puedes ayudarme a recuperar a Bee? No lo creo, ella no me quiere ver ni en sus pesadillas, me odia y si es que la entiendo, yo también me odio— Taylor cerró los ojos con fuerza, le dolía admitirlo.

—Necesita tiempo al igual que tú, para ella también han sido semanas complicadas, dale espacio. Y sabes que estas emociones que estás experimentando no cambiaran el pasado, intenta convertirlas en herramientas que te ayuden a...—.

—Bee regreso a Londres y lo hizo con Dua— la interrumpió.

—¿Y cómo te sientes al respecto?— suspiró, entendiendo lo que Taylor intentaba hacer, no quería presionarla demasiado.

—Me siento una mierda, a veces siento que odio a Dua, pero luego me doy cuenta de que ella no tiene la culpa de nada de lo que me está pasando. Porque cada vez que recuerdo algo, cada vez que recuerdo lo que le he hecho a Bee, me doy cuenta de que no tengo ningún derecho siquiera a intentar recuperarla—.

—¿Quieres hablar de ello?— preguntó con cautela.

—Todos son desagradables, en su mayoría son de mí, siendo una completa idiota con Bee— su voz comenzó a temblar de nuevo.

—¿Algo en particular que te resulte importante?— inquirió.

—Hay uno, no tengo idea de si es real o solo una ilusión, cada vez que intento volver a el, mi mente queda en blanco— Taylor agachó la mirada, mientras jugaba con el borde de su abrigo.

—Cuéntame más sobre ello—.

—Bueno, estoy en medio de una especie de habitación y Bee está a mi lado y luego ocurre algo, no sé qué es y ella simplemente sale corriendo, yo intento ir detrás de ella, pero no logro mover mi cuerpo y tengo... tengo un anillo en mi mano—.

—¿Por qué crees que este recuerdo en específico volvió a ti?—.

—No lo sé, el sentimiento es el mismo que cuando la vi por última vez. Vuelve a mí todo el tiempo, supongo que debe ser eso— Taylor no dejaba de acariciar la cicatriz en su frente.

Cicatriz que poco a poco comenzaba a ser cubierta por su cabello, el cual finalmente llegaba a la altura de sus hombros.

—¿Hay algo más que quieras contarme?—.

—No me siento cómoda hablando de esto— Taylor desvió la mirada.

—Taylor, este es un espacio en donde te puedes sentir segura, sin miedo a ser juzgada— la observó con comprensión.

—Hace unas semanas dije que la antigua Taylor me caía mal, pues mentí, no me cae mal, la odio y sé que eso no tiene sentido porque yo soy ella, y puedo decir lo que sea, pero al final sigue siendo la misma persona, soy yo quien carga con las consecuencias de mis propias decisiones y me odio, esa es la verdad. A veces desearía no recordar nada, y otras veces habría preferido morir en ese accidente— admitió.