CAPITULO 10 FIESTA 2

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Fluke salió de la ducha y tomo una toalla grande para envolverse en ella, se secó y pensó en que se pondría mientras entraba a la recamara, no se sentiría cómodo si se volvía a poner lo mismo, asi que asalto su escaso guardarropa, aunque ahora un poco mas grande gracias a sus últimas compras.
Se puso un pantalón de pinzas color azul marino, y una camisa color vino, se remango las mangas, fuera hacia mucho calor, se peinó de nuevo haciéndose una media cola, se calzo y bajo a la primer planta. Se topó de nuevo con la chica que le ayudaba a sus tías con la limpieza de la casa.
-Yiwa- la llamo viendo que llevaba una bandeja con bebidas.
Esta se giro antes de tomar el pomo de la puerta y al verlo le sonrió.
-Fluke, ¿en qué te puedo ayudar?
-Sabes si tenemos kermato (jugo de tomate, almeja, cebolla y ajo) y agua mineral?
-Claro que si, yo no traigo- señalo su bandeja- pero fuera si.
-¿Y en la cocina?- cuestiono con una mueca de disculpa.
-También.
-Excelente, gracias- le dijo el castaño, se giró y se alejó.
En la cocina estaba un chico sirviendo una bandeja con botanas, lo saludo y lo esquivo yendo directo al refrigerador, busco las bebidas, pero ahí no habia nada, solo el mandado usual, en cuanto cerró la puerta y se volteo para buscar las cosas, entro una chica que llevaba el mismo uniforme de los meseros.
-Hola- la saludo- estoy buscando kermato y agua mineral.
-Hola, ahí- señalo la rubia una gran hielera que estaba al lado de la encimera.
-No la habia visto, gracias.
-De nada- le sonrió y se dispuso a hacer lo suyo.
El castaño encontró lo que buscaba, fue por hielos y limones al frigorífico, también tomo un gran tarro de cristal, y con algo de sal se hizo una de sus bebidas favoritas desde que vivía ahí.
Ponía de cuatro a cinco cubos de hielo, exprimía un limón, sal al gusto, vaciaba la mitad de kermato del tarro, el resto de agua mineral, y removía con un popote, le encantaba. Dio un buen trago, dejo que los sabores explotaran en su boca, trago y soltó un suspiro de satisfacción.
-Bien Fluke, hora de regresar a la fiesta- se dijo en voz baja.
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-Ya veo- asintió la anciana- asi que solo observaras y no tendrás ningún contacto- dijo complacida.
-¿Ningún contacto?- preguntaron todos al unísono.
-¿De verdad quieres conocerlo hoy?- pregunto Del incrédula.
Kao y Earth dividieron su mirada entre el Alfa y la bruja.
-¿Para que crees que he venido?- le pregunto el con mirada resuelta- para conocerlo, y antes de que digan algo- los miro a los tres- no es negociable, hasta ahora he dejado que me mangoneen a su antojo, pero ya no- aseguro con mirada fulminante.
-Pero Ohm…- empezó Kao.
-Nada- lo detuvo- obviamente no vamos a hacer nada imprudente- dijo en tono frio- parece que se les olvida quien es el Alfa aquí- los miro con suficiencia, ya cansado de todo y todos.
-No es que se nos olvide- le dijo Del acercándose un paso a el- solo que Dean y tu han esperado tanto tiempo por esto, además de que siempre están en desacuerdo, mas ahora con esta situación.
Ohm inhalo y exhalo, siempre la misma cantaleta, pero el tenía la culpa por dejarse llevar por toda la situación, ya estaba harto. Era hora de tomar cartas sobre el asunto.
-Esta bien- dijo el rubio con la voz algo chillona y mas alta de lo normal- vamos a nuestra mesa- tomo a su marido de la mano y lo jalo esperando que los otros dos los siguieran.
-Del- Ohm llamo a la mayor- agradezco tu preocupación, sabes que lo digo corazón- la miro serio- pero es hora de que dejen el asunto en mis manos, si llego a necesitar consejo o ayuda con algo, se los hare saber.
-Entendido Alfa- asintió igual de seria que el.
-Bien, vamos-  también asintió y le dio el pase a la anciana.
Llegaron hasta donde estaban tomando asiento Kao y Earth.
-¿Desean que les sirva algo?- les pregunto un joven con una pequeña libreta en mano.
-Yo quiero una sangrita- le dijo la mayor tomando asiento.
-Nosotros queremos limonada con granada, por favor.
-¿Y usted comisario?- el pecoso lo miro con la pluma lista.
-A mi tráeme un kermato preparado por favor- le pidio.
-¿Algo mas?- cuestiono mirándolos a los cuatro.
-Podrías traernos unos nachos- pidio despreocupada Del.
-Enseguida regreso- les dijo con una sonrisa y se alejó.
-Entonces ¿que procede?- Kao miro a su amigo.
-Deja que termine de llegar y luego me interrogas- le dijo mirando a su alrededor.
*¿También lo hueles?- cuestiono emocionado Dean.
*Obviamente- le respondio Ohm con un resoplido por medio del Link.
*Vamos a buscarlo- pidio empezando a removerse por dentro.
*Deja de moverte- le advirtió Ohm- no quiero estar de mal humor cuando lo conozcamos.
*Esta bien- dijo deteniéndose de golpe- me quedare silencioso y quieto- aseguro el peludo. Lo último que quería Dean era que Ohm encontrara un pretexto para rechazar a su Mate, y eso no lo permitiría.
Los tres lo miraron sin poder creerlo.
-No me miren de esa manera- les dirigió una mirada intensa- me tienen muy poca fe- achico los ojos- eso ira en la bitácora- los fulmino.
Y no pudieron evitarlo, los tres rieron mientras su Alfa los veía con seriedad. El Alfa llevaba una bitácora de las cosas mas importantes. 
Ahí entendieron que era cierto que habían sido aprensivos con su Alfa, y que el les habia tenido mucha paciencia, algo que nunca habia pasado. Esto fue posible gracias a la situación en la que se encontraba Ohm, estaba tan ocupado dándole vueltas al asunto de su pareja destinada, que bajo la guardia.
Mientras les llegaban sus bebidas y botanas se pusieron a charla, pero evitaron el tema que los tenia ahí, no querían presionar mas al pelinegro. 
-Ahí esta- susurro Ohm quedándose muy quieto y poniéndose tenso de repente.
Sus acompañantes no pudieron evitar girarse para mirar al mencionado.
Fluke Natouch en ese momento le daba las gracias a un mesero y se disponía a bajar las escaleras externar, cuando sus zapatos tocaron el césped bien cortado, miro a su alrededor y sonrió, y en ese momento su corazón se detuvo.
El Alfa no podia creer lo que veía, pero lo que sentía lo superaba. Estaba escuchando a Del hablar sobre un antepasado que habia llegado desde Tailandia, cuando ese delicioso olor se intensifico de tal manera que lo mareo, pero nada comparado a cuando lo vio.
Un joven blanco como la nieve, unos grandes y expresivos ojos color avellana, desprendía el aroma mas embriagador que habia conocido. El castaño que le robo la atención, era su Mate, era la única respuesta a que lo mirara embelesado.
¿Y que le pasaba a su corazón?, de repente estaba latiendo desbocado, como si se le quisiera salir del pecho. Lo vio detenerse, buscar a alguien con la mirada y de repente sucedió de nuevo, eso bombazo de adrenalina y mareo, el chico sonrió, la sonrisa mas hermosa que nunca habia visto antes.
Dean hablaba y se agitaba tan rápido que no era capaz de entenderle, sus oídos le chillaban, estaba como drogado.
Sus tres acompañantes lo miraban con una sonrisa, si, su Alfa estaba embelesado con su futura Luna, primero caía un hablador que un cojo, se miraron cómplices.
-¿Te gusta lo que ves?-pegunto divertida Del.
Esto lo saco de sus pensamientos y con ello perder de vista al castaño de caminar sexy, espera, ¿de verdad acaba de pensar que un joven tenía caminar sexy? Sintió como sus pómulos se calentaban, la Diosa Luna estaba jugando sucio.
-No digas tonterías- respondio malhumorado.
-Si abu, el no esta nada feliz- intervino divertido el Beta.
-Esto es serio- le siseo- ya tengo suficiente con Dean, no se imaginan el ruido que esta haciendo en este momento- los miro a los tres.
-Perdón- se disculpó haciendo una mueca incomoda. Lo último que su Alfa necesitaba era ese tipo de bromas, solo se habia dejado llevar por el tono juguetón de su abuela.
-Ohm- lo llamo el rubio intuyendo que las cosas se podrían salir de control- todos estamos nerviosos- le sonrió- obviamente nadie mas que tu, pero lo que digo es que, la situación nos supera un poco.
Ohm soltó un suspiro tembloroso sin apartar la mirada del Omega.
-A lo que quiero llegar-siguió Earth- es a que nadie de nosotros- los miro a todos- nos gustaría que el primer encuentro saliera mal.
-¿Qué parte de que me dejaran esto a mi no entendieron?- cuestiono el Alfa mas molesto.
-Alfa- la anciana le puso una arrugada mano encima de su muñeca, Ohm bajo la mirada y ahí lo vio, tenía el mantel engurruñado entre sus dos manos que estaban en puño, y sus venas sobresalían bastante, soltó un bufido y soltó el agarre- sabemos que no es fácil, por eso debemos de tranquilizarnos.
-Lo siento- acertó a decir Ohm- solo me tomo desprevenido- se aclaró la garganta no sin sentirse arrebolado, lo que lo medio consolaba era que ellos eran de confianza absoluta.
Se concentró en calmarse manteniendo la mirada hacia abajo, solo necesitaba un par de minutos. Hacía tiempo que le habia cerrado el link a su parte animal, este estaba demasiado eufórico para entender lo que decía, y eso era lo último que necesitaba en ese momento.
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-¿Cómo sigues?- cuestiono Piper en cuanto su sobrino se sentó frente a ella.
-Mucho mejor, gracias- respondio- perdón- miro a las tres tías- espero no haber causado ninguna vergüenza.
-Nada de eso, te rescatamos justo a tiempo- bromeo Phoebe guiñándole un ojo.
-Gracias- se rio un poco mas relajado.
Mientras platicaba entre ellos, también lo hacían con algunas personas que se acercaban a saludar, pero Fluke notaba inquietas a sus tías, miraban mucho a su izquierda, sin contar que el se sentía observado, pero no tenía que darle importancia ya que era una fiesta en su honor, era obvio que era observado.
La mayoría de los invitados ya habían comido, incluido el, y habia estado pidiendo kermatos preparados, no probaría alcohol en mucho tiempo. Se la estaba pasando bien a pesar de su renuencia, como le habían dicho sus tías, todos eran muy agradables.
Hacia rato que Manuel se les habia unido, obviamente se sentó al lado de Piper, poco después de que el llego fue a saludarles una chica que se presentó como Martjha.
-Un gusto conocerte Fluke- le sonrió extendiéndole la mano para estrechar la suya- seremos compañeros de trabajo, soy la profesora del grupo tercero B, somos las abejitas y tu estarás a cargo de tercero A que son los ositos- decía muy vivaz y sin perder la sonrisa- espero que seamos buenos amigos.
El castaño parpadeo sintiéndose algo avasallado.
-Cla…claro- le sonrió tímidamente. Las personas tan vivaces y platicadoras lo hacían cohibirse, no estaba acostumbrado, pero la chica parecía sincera.
-Nancy ven- le llamo a una chica que venia acercandose- ven a conocer a Fluke- y asi otra chica burbujeante se unió a ellos.
Esta era la secretaria del comisario, hablaron con ellas unos minutos y regresaron a su mesa.
-Ya regreso- les dijo Prue y se levantó de la silla para acercarse a unos invitados que estaban en una de las mesas mas apartadas, estaba sentados tres hombres jóvenes y una mujer mayor. Uno de ellos tenía una mirada muy pesada y penetrante, lo estaba mirando a el, sin parpadear y sin apartar sus ojos de su presencia, un escalofrió le recorrió la espina dorsal, decidió girarse para seguir con lo suyo.
-¿Ya conociste al comandante?- le cuestiono su jefe señalando la mesa a la que habia ido su tía.
-No- respondio solo mirando de reojo a donde Manuel señalaba, ya que se estaba sintiendo extraño.
- A pesar de ser joven, es muy bueno en su trabajo- dijo con un tono de orgullo de un padre hablando de su hijo- mantiene el lugar tranquilo, es raro que tengamos disturbios grandes.
-Me alegro- respondio Fluke sin saber que mas decir.
-Hablando del diablo, viene para acá, con Prue- dijo el director con una enorme sonrisa.
El castaño abrió muchos los ojos y se tensó, sin saber que estaba haciendo, se levantó de un tirón casi tirando la silla al piso.
-Ya regreso- les dijo avergonzado al ver como lo miraban, sintiendo como se calentaba su cara- disculpen- y se giró sin mirar nada mas que la puerta de la casa, se alejó a paso presuroso.
-¿A dónde va Fluke?- pregunto Prue desconcertada al llegar a la mesa junto con el Alfa.
-No sé, dijo que ya volvía- dijo apenada Piper, ya que su ex galán era el que habia dado el pitazo.
-Ya veo- asintió mirando por donde se habia ido su sobrino- tome asiento comisario- le pidio con una mueca.
-Hola a todos- les saludo como si su corazón no se hubiera estrujado y su lobo hubiera aullado de dolor.
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Cerro la puerta de un golpe y se quedó recargado en ella, inhalo y exhalo. 
-¿Qué demonios acaba de pasar?- se preguntó en voz baja aun en estado de shock.
¿Por qué saliste huyendo?, se preguntó a si mismo mentalmente, sintiéndose mortificado, se separó de la puerta y se dirigio al patio trasero, necesitaba unos minutos a solas, y con una fiesta en pie, la única manera de lograrlo era escabullirse.
Se sentó en una de las bancas con el corazón aun latiéndole rápidamente. ¿Por qué huyo?, no conocía de nada a ese hombre, si, era el Comisario, y tenía una mirada muy potente, pero nada mas, no tenía nada que ver con el, se dijo desesperado soltando un suspiro.
Se miro las manos, estas le temblaban, ¿por qué?, no entendía por qué se sentía de esa manera, se sentía extraño. No estaba acostumbrado a tratar con tantas personas, era eso, solo se sentía fuera de lugar y le estaba causando ansiedad, se estrujo las manos, hacía mucho que no se sentía de esa manera.
Empezó a sufrir de ansiedad poco después de que sus padres fallecieran, y conforme pasaron las semanas, esta se hizo gradualmente mas intensa, por lo que no le quedo mas que ir con un especialista, el cual le receto medicamento.
Cuando llego a Anahuac siguió tomándolo, pero la calurosa bienvenida y el cambio de ambiente le hicieron tomar decisión de dejar las pastillas, ya no lo creyó necesario, pero se habia equivocado.
Se levantó y se sacudió la mala vibra. Phoebe le habia dicho que mente positiva atraía cosas positivas, y se habia sacudido graciosamente, y ahora el estaba haciendo los mismo, se rio sin poder evitarlo. Se sentía genial hacerlo.
Se dirigió a su cuarto, ahí tenía la caja del medicamento. Fue al cajón del escritorio donde lo habia guardado, tomo una pastilla, se sirvió un vaso de agua de la jarra de cristal que tenía en uno de los buros a los costados de la cama y lo tomo.
Sabía que no hacia efecto de inmediato, era cuestión de semanas a mas tardar dos meses, pero también sabía que no debería de habérselo dejado de tomar, se regañó.
Ya mas tranquilo decidió bajar a la fiesta, ya era la segunda vez que se desaparecía, aunque no le hacía gracia volver a toparse con esa mirada que parecía perforarlo, pero no es que pudiera evitarlo, con suerte podría evitarlo el resto de la fiesta, se consoló.
Salió de su recamara, antes de bajar las escaleras imito de nuevo a su pelirosa tía y lo hizo con una enorme sonrisa en los labios, fue buena decisión haber ido ahí.
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Diosa Luna, no podia apartar la vista del castaño, ¿por qué era tan deslumbrante?, no era justo, algo de trampa estaba haciendo esa Diosa caprichosa, no era normal que el viera atractivo a un macho, por muy tierno, con piel de porcelana, bellos ojos y esa sonrisa perfecta… si, la Diosa Luna se estaba burlando de el, se dijo apartando la vista y regresando a la charla que tenían sus amigos.
-Me gustaría que también rentáramos un inflable- decía Earth con los ojos brillosos.
-Que tuviera chapoteadero para los mas pequeños- intervino Del.
-Exacto- le dijo emocionado el rubio.
-¿No creen que es demasiado?- les dijo Kao aun si poderse creer que su abuela fuera esa risueña “abuelita” - la cabaña ya tiene un chapoteadero, al lado de la alberca- recalco con la cejas levantadas.
-Pero una cama elástica y un brinca brinca con chapoteadero no están de mas- insistió el Omega.
Ohm los oía pero no los escuchaba, el estaba debatiendo con su lado animal, estaba hastiado de que Dean no se callara pero no es que pudiera hacer mucho, estaba unidos hasta la muerte, y esperaba en algún momento se llevaran bien, como mínimo, mejor que en ese momento.
-Comisario- una voz femenina lo saco de sus cavilaciones- gracias por darse el tiempo de venir.
-Gracias a usted por la invitación- respondio levantándose de su lugar para saludarla de mano.
-¿Puedo sentarme?- le pregunto.
-Claro que si, por favor- le separo una sillas vacías para que tomara asiento.
-Gracias- asintió Prue- ¿cómo se la están pasando?
-Muy bien, en este momento hablamos de la fiesta de Mia- respondio emocionado Earth.
-De antemano están invitados- intervino Del palmeando cariñosamente la blanca mano del esposo de su nieto.
-Gracias- le sonrió la peli morada- por cierto Del, ¿podrás venir el lunes a desayunar?, hace mucho que no nos juntamos- le sonrió a su amiga.
-El lunes estaré aquí a primera hora- le aseguro enérgicamente la canosa.
-Excelente, le diré a las muchachas- asintió Prue- Comisario ¿podre hablar contigo un momento?- le pregunto al Alfa.
-Claro- asintió.
-Si quieres hablar de Fluke- hablo de nuevo la mujer mayor- no necesitan irse, ellos ya lo saben- le dijo señalando al joven matrimonio.
Ohm frunció mucho las cejas al escuchar eso, asi que ellas también sabían, ya que no creía que Prue les guardara esa información a sus hermanas. 
-¿De verdad?- cuestiono mirándolos con esos ojos oscuros y penetrantes.
-Asi es- asintió Kao con una pequeña sonrisa de disculpa.
-Bien- también asintió- asi que libremente puedo preguntar- se giro a mirar a hombre lobo- ¿Qué espera para abordar a mi sobrino?- le pregunto.
Diablos ¿acaso todo el pueblo lo sabía? 
-No he creído que sea oportuno- respondio después de carraspear, no se habia esperado que fuera tan directa.
-Pues creo que este sería un buen momento.
-¿Ahora?- dijo Ohm tensándose de inmediato.
-Alfa- le llamo en un tono mas serio que antes- esta fiesta- miro alrededor y señalo a la gente disfrutando y charlando- se organizó solo para ustedes- le dijo confirmando que ya todo estaba planeado.
-¿A que se refiere?- la miro frunciendo el ceño, quería estar equivocado.
-No era necesario una fiesta de presentación- empezó Prue notando que algo no aldaba muy bien- esto se organizó para que ustedes tuvieran la oportunidad de conocerse sin que se viera forzado.
-Conocer a tu mate te quemo los cables- le dijo burlona la canosa.
-Todos hemos tenido la cabeza volada en los últimos días- dijo Earth notando la incomodidad del Alfa.
-Esta bien- respondio en un susurro la mayor de las Natouch- asi que como ya he dicho- hizo una pausa- vamos a presentarte a Fluke- invito al pelinegro.
-¿Ahora?- repitió Ohm mirando al chico de su desvelos y de nuevo a la tía de este.
-¿Qué parte de que la fiesta es solo por ustedes no entiendes?- le pregunto también mirando a su sobrino -¿Por qué lo dudas?- lo miro con el ceño fruncido.
Se hizo un silencio incómodo. La peli azul noto como todas las miradas se dirigían al Alfa, y no auguraban nada bueno.
-¿Alfa?- lo lamo de nuevo inclinándose un poco hacia adelante.
-Antes de cualquier cosa- le dijo este mirándola directamente- le quiero hacer una pregunta- también se inclinó hacia enfrente.
-Claro que sí, adelante- asintió sin amedentrarse.
-Como veo, todos ya sabían quien es mi persona destinada, y mucho antes de yo, ¿por qué no me lo dijeron?- la miro también con seriedad.
-Es cierto que mis hermanas y yo lo sabemos desde hace tiempo, y también Del ya que hablamos algunas veces del tema- afirmo la mujer- y el por qué no te lo dijimos, es porque no estaba escrito asi.
Ohm no podia creerlo, ¿esa era su excusa?, sintió como algo molesto le empezaba a burbujear.
-¿No estaba escrito?- cuestiono entre incrédulo y molesto.
-No estaba escrito- repitió escuetamente.
El Alfa bufo audiblemente.
-Ohm- le llamo Del- no es momento para esta conversación.
-¿Asi como no fue momento de decirme lo de mi Mate?- la fulmino.
-Esperen- pidio la Natouch- es obvio que me están ocultando algo.
-No te ocultamos nada- dijo de inmediato la canosa.
Prue frunció mas su ceño y la miro, ese tono apresurado con el que le habia contestado su amiga se lo confirmaba, y no debía de ser nada bueno.
-¿Por qué tendríamos que hacerlo?- insistió Del encogiéndose de hombros con un trémula sonrisa.
Sabía que estaba tratando de tapar el sol con un dedo, pero ya era demasiado tarde para sincerarse.

CACHORROWhere stories live. Discover now