Writing styles/ Estilos de escritura

Farce - 2 historias

Elecciones de Elera y Lyra

Érase una vez en la tierra de Evergreen, en medio de bosques mágicos y criaturas místicas, vivían dos gemelas idénticas, Elara y Lyra. Estas hermanas compartían un vínculo que trascendía el ámbito físico, una conexión que parecía resonar más allá de los susurros del viento. Sin embargo, lo que diferenciaba a estos gemelos en el mundo aparentemente homogéneo de Evergreen era su peculiar amor por vestirse igual.

Vestidas con vestidos verdes a juego y cabellos intrincadamente trenzados, Elara y Lyra partieron una mañana soleada para llevar su travieso juego de intercambiar identidades a un nivel completamente nuevo. Los aldeanos en la bulliciosa plaza del mercado los saludaron calurosamente, muy conscientes de las travesuras juguetonas de los gemelos.

Mientras deambulaban por los vibrantes puestos, la atención de Elara quedó atrapada por una baratija brillante, que la alejó de su hermana. Sintiendo la oportunidad perfecta para seguir el juego, Lyra entró sin problemas en el lugar de Elara. El dueño del puesto se giró, esperando ver a Elara, sólo para encontrarse con la sonrisa traviesa de Lyra.

Se produjo el caos cuando Lyra, haciéndose pasar por Elara, entablaba conversaciones extravagantes y bromeaba con los desconcertados habitantes del pueblo. Las risas resonaron en el mercado y los gemelos se deleitaron con la alegría de su pequeña farsa.

Sin embargo, a medida que avanzaba el día y crecía la confusión, un sentimiento de culpa carcomía los corazones de los gemelos. Sabían que era hora de revelar la verdad. Reuniendo a los curiosos aldeanos en la plaza del pueblo, Elara y Lyra permanecieron una al lado de la otra, con las manos entrelazadas en solidaridad.

"Queríamos mostrar que dentro del mar de similitudes, cada uno de nosotros brilla con su luz única", sonó la voz de Elara, con la sinceridad brillando en sus ojos. "Las apariencias engañan, pero nuestras diferencias iluminan la belleza de la diversidad."

Lyra asintió con la cabeza, su voz mezclándose perfectamente con la de su hermana. "En un mundo de conformidad, queríamos agregar un toque de fantasía para recordarles a todos que la individualidad es nuestro tesoro más preciado".

Los aldeanos escucharon absortos, profundamente conmovidos por las sentidas palabras de los gemelos. Y justo cuando pensaban que la historia había llegado a un dulce final, les esperaba una sorpresa.

Cuando el sol se hundió en el horizonte, arrojando un brillo dorado sobre Evergreen, un aura brillante envolvió a Elara y Lyra. Los vestidos verdes de las gemelas se transformaron en tonos vibrantes, cada uno de los cuales refleja sus personalidades únicas. El vestido de Elara brillaba con los colores del amanecer, mientras que el vestido de Lyra deslumbraba con los tonos del cielo crepuscular.

Los aldeanos quedaron boquiabiertos de asombro ante la exhibición mágica, al darse cuenta de que incluso en medio de la uniformidad, la belleza de la individualidad brilla más. Y mientras los gemelos giraban en la luz tenue, sus risas se mezclaban armoniosamente con los susurros del viento, Evergreen se empapó de la encantadora lección de Elara y Lyra: que la verdadera magia reside en aceptar las diferencias que nos hacen extraordinarios.

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Mascotas excéntricas y encuentros extraterrestres

En un acogedor barrio lleno de casas extravagantes y exuberantes jardines, vivía un gato excéntrico llamado Whiskers y un perro igualmente excéntrico llamado Rover. Whiskers era un gato siamés elegante y sofisticado con predilección por el atún fino y la música clásica. Rover, por otro lado, era un Golden Retriever bullicioso y leal al que nada le encantaba más que perseguir su cola y jugar a buscar.

Una tarde agradable, mientras el sol dorado se hundía en el horizonte, Bigotes y Rover se encontraron enfrascados en un acalorado debate sobre el alunizaje. Bigotes, elegantemente posado en el alféizar de la ventana, afirmaba que el alunizaje era un engaño perpetuado por los humanos para ganar superioridad sobre otras especies. Rover, moviendo furiosamente la cola, argumentó que el alunizaje fue real y que los humanos eran capaces de lograr logros increíbles.Su discusión se hizo más intensa a medida que el cielo nocturno se oscurecía, con Bigotes citando teorías de conspiración de oscuros foros felinos y Rover respondiendo con hechos científicos que había extraído de documentales de televisión nocturnos. Los dos improbables compañeros discutieron de un lado a otro, sus voces se elevaron en una cacofonía cómica que resonó en el tranquilo vecindario.

Justo cuando parecía que su discusión nunca terminaría, un brillante destello de luz iluminó el cielo, haciendo que Bigotes saltara sorprendido y Rover ladrara emocionado. Para su sorpresa, una pequeña nave espacial aterrizó con gracia en el patio trasero y su escotilla se abrió para revelar un grupo de pequeños extraterrestres con piel verde brillante y ojos de gran tamaño.Los extraterrestres salieron flotando de la nave espacial y se acercaron a Whiskers y Rover, quienes miraron con los ojos muy abiertos a los visitantes inesperados. El alienígena principal habló con voz melodiosa, explicando que habían venido a la Tierra para resolver de una vez por todas el antiguo debate sobre el alunizaje. Se ofrecieron a llevar a Whiskers y Rover en un viaje a la luna para ver la verdad por sí mismos.

Bigotes y Rover intercambiaron una mirada desconcertada antes de asentir con entusiasmo, despertado su curiosidad. Con un movimiento de la mano del extraterrestre, fueron arrastrados al espacio, lanzándose hacia el brillante orbe de la luna. Mientras aterrizaban suavemente en la superficie de la luna, Bigotes y Rover contemplaron con asombro la Tierra suspendida en la vasta extensión del espacio, una pequeña joya azul contra el cielo negro aterciopelado.Los extraterrestres revelaron que el alunizaje fue real, para disgusto de Whiskers y deleite de Rover. Con un brillo travieso en sus ojos, los extraterrestres se ofrecieron a llevar a Whiskers y Rover a un recorrido por los impresionantes paisajes de la luna antes de regresarlos sanos y salvos a su patio trasero.

Mientras Bigotes y Rover regresaban a su entorno familiar, intercambiaron una mirada de complicidad y su discusión finalmente terminó. A veces, las aventuras más inesperadas pueden conducir a las revelaciones más sorprendentes. Y así, en el silencio de la noche, el gato y el perro se durmieron bajo el vigilante resplandor de la luna, su amistad más fuerte que nunca.Lo que no sabían era que los extraterrestres habían dejado un pequeño recuerdo: una roca lunar con la inscripción: "En la unidad está la verdad". La historia de Whiskers y Rover sobre el alunizaje se transmitiría de generación en generación, un recordatorio caprichoso de que incluso los compañeros más improbables podrían encontrar puntos en común en la vasta extensión del universo.

P.S.Mark Foster "Chip In" habla inglés, alemán y chewa.