Capítulo 70

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Arem
——



No recuerdo cómo llegué a Darev.

Solo se que en un momento estuve consiente y escuché una voz lejana que me decía que diera vida y al abrir mis ojos estaban en un lugar hermoso.

Muchas criaturas mágicas estaba en Darev.

Habían unas criaturas que junto a mis hermanos habíamos creado, su nombre fue humanos.

Tenían pensamientos buenos, vivían en armonía con la naturaleza. Era lindo ver cómo convivían entre ellos, con las criaturas del bosque, dando amor y poblando Darev.

Pero lo lindo cambio cuando Nashe creo un humano malo, él le hizo daño a muchas humanas y mató a sus hermanos. Ensucio la mente pura de los demás humanos causando que se matarán entre ellos.

— Explica ahora mismo porque hiciste aquello. — Me mantuve en silencio y sentada en la silla de la mesa de nuestro templo de reuniones.

Una mesa círcular estaba frente a mi, y habían cinco sillas que pertenecia a nosotros los dioses, o bueno. Asi nos llaman los humanos.

De reojo mire al primero de nosotros, quien creo la tierra donde estamos nosotros.

Gej.

Él tenía su ceño fruncido en molestia, aunque su rostro era indescriptible. Parecía relajado y causaba miedo, era como una bestia.

Pero una bonita.

Su cabello largo y negro caía a los lados de su cara. Él era el único de los cinco que tenía el cabello negro, los demás lo teníamos del color blanco.

Eso nos diferenciaba y dejaba saber quién era el más poderoso de nosotros.

Me preguntaba si era tan fácil hacer trenzas en su cabello, había visto a las humanas hacer aquellos peinados y Siena me había ayudado a aprender con ayuda de Iral, quien había ido a convivir con ellos para hacerles el regalo del fuego para que supieran cocinar.

Mire a mi hermana frente a mi, Siena tenía un porte elegante y intimidante. Su rostro veía molesto a Nashe.

Iral que estaba a mi lado parecía más relajado pero no por eso menos molesto. Todos estábamos aquí por la matanza que los humanos estaban haciendo unos contra otros.

Mis pobres niños estaban muriendo por culpa de la maldad que mi hermano había creado. Me dolía mucho escucharlos pedir mi ayuda y no pode ayudarlos a todos.

Me causaba tanta... Impotencia.

— Los humanos están muriendo. Las humanas sufren y los pobres niños están siendo masacrados. Las criaturas del bosque están siendo afectadas. — Gej prosiguió. — ¿Por que creaste aquel humano?.

— Yo solo quería enseñarles como era la guerra. — Explica desde su lugar. — Quería que aprendieran a crear armas.

— Ellos ya sabían crear armas. — Siena habla golpeando la mesa con uno de sus dedos. — Tenían los cuchillos, las lanzas y los arcos. Con eso tenían más que suficiente.

— Con las nuevas armas podrían cazar mejor.

— Claro, ahora se cazan entre ellos. — Iral soltó sonriente.

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