Eterna sumision.

capitulo 16 - una nueva amiga

Estaba sola en casa otro dia mas aburrida mientras Kevin trabajaba, la monotonia estaba acabando con ella pero intentaba siempre buscar cosas nuevas para hacer.
Tenia ganas de salir, sentir el aire y jugar con la nieve pero sabia que podria perderse facilmente si salia sola a la calle.
Pero estaba aburrida, queria hacer algo con su dia que no fuese esperar a Kevin.
Se levanto del sofa de piel que tenian en el salon y fue a la habitacion a buscar algo de ropa de abrigo.
Se puso unos jeans sobre unos leggins gorditos que le protegerian del frio, una camiseta de tirantes termica y sobre ella un jersey de color crema que quedaba genial sobre esas converse tambien de color crema que Kevin le habia regalado. Por suerte a pesar de estar casada con el aun era libre de poder decidir en que tienda comprar la ropa pero ojala fuese lo suficiente libre como para decidir tambien que ropa comprar.
El tenia un gusto increible tenia que admitirlo pero a veces se cansaba de que siempre fuese el que eliguiera su ropa.
Se puso un gorro de lana de color blanco con el cabello suelto y una bufanda a juego, eso no era como su isla ahi no habia un clima tropical y su cuerpo lo sentia cada vez que salia.
Fue al escritorio del despacho de su marido alli en la casa, a veces trabajaba ahi y ella lo agradecia bastante aunque no siempre corria con esa suerte.
Abrio la agenda de piel que habia en el primer cajon del escritorio y busco en ella algun indicio que indicara la direcion del trabajo de Kevin, era cierto que nisiquiera la direcion se sabia pero tambien era verdad que todo estaba en un idioma que desconocia.
En la primera pagina por suerte estaban los datos de la empresa en una targeta y el nombre y apellidos de Kevin de los cuales ahora Juliett compartia tambien apellido. Ella habia aceptado casarse con el en Estados Unidos y todo lo que ello conllevaba, incluyendo que ahora era ciudadana norteamericana, por suerte aunmantenia su doble nacionalidad y podia vivir en Canarias cuando quisiese.
Cogio la tarjeta guardandosela en el bolsillo trasero del pantalon y fue a la entrada de la casa cogiendo su abrigo de color blanco que le abrigada bastante al ser el interior de pelitos.

Las calles de Queen le hacian sentirse como en un cuento de navidad de los que ponen en la television cuando se acercan las fechas, todo estaba nevado y de color blanco.
La zona donde vivia estaba llena de casas de dos plantas enormes parecidas a la que ella tenia con Kevin, no sabia a donde estaba caminando pero tenia un buen movil y una direcion, introduciria en el gps la direcion y con suerte no tardaria demasiado en llegar.
Miro la pantalla del movil y se mordio el labio, estaba a mas de una hora de camino.
Levanto la mano cuando vio un tasci pasar y se subio al asiento de atras mirando al conductor, enseguida entendio la mirada del hombre y saco de su bolsillo de atras la targeta con la direcion de su marido dandosela al chico que asintio enseguida.

Ninguno de los dos hablo durante lo que duro el trayecto, ella miraba por la ventana asombrada al ver aquellas calles por las que nunca habia ido pero que sin dudar le encantaria ir.
El chico aparco delante de un edificio de ventanales de cristal que brillaban aunque no eran transparentes.
Parecia que las paredes escteriores del edificio eran de espejos enormes que reflejaban todo lo que habia fuera.
El chico senialo el tascimetro y Juliett saco de su bolsillo un billete de veinte dolares bajando del coche antes de que el chico pudiese darle la vuelta, pero no le importaba. Entro al edificio mirando todo a su alrededor, la elegancia de la sala le recordaba a su casa, muebles negros, paredes blancas pero toques de color por todos lados.
Kevin siempre decia que habia que seguir la regla de los tres colores, un color que predomine otro que le siga y el toque de color que de vida a la sala.
Se acerco a recepcion donde una chica de cabello pelirrojo natural se le quedo mirando con los ojos muy abiertos, recordaba haberla visto en la boda pero no recordaba su nombre.
La miro sonriendo y se acerco a ella tratando de hablar de modo que la entendiese.

-Hola, estoy buscando a mi marido Kevin.
La chica parecia no entender lo que Juliett decia.
-Kevin?
Juliett asintio sonriendo.
-Quiero ver a Kevin.
La chica pelirroja que tenia una placa en el pecho con el nombre de Gabrielle en su pecho saco un colgante de plastico con la palabra VIP en el centro y se la colgo a Juliett del pecho sonriendo.
-U-ultima planta, arriba - hablo en un triste y mal espaniol pero Juliett lo agradecio -arriba.
Asintio sonriendo y camino hacia los ascensores bajo la mirada de todos con los que se cruzaba, no sabia si sentirse incomoda pero era una sensacion bastante rara estar en el punto de mira de toda una empresa.
Cuando el ascensor llego a donde estaba ella subio y marco la ultima planta, el ascensor era totalmente de cristal incluyendo el suelo asi que se pego a la pared para tratar de calmas la sensacion de miedo que tenia al pensar que podria caer. Cuando el ascensor llego a la planta veinteseis Juliett estaba totalmente pegada a la pared mientras se agarraba con fuerza a su abrigo. Una chica rubia de ojos marrones se quedo mirandola cuando las puertas se abrieron y rio un poco por lo bajo a la vez que levantaba una mano ofreciendosela a Juliett que bajo del ascensor sin pensarselo dos veces.
-A que loco se le ocurre crear una maquina de tortura asi?
La chica se rio y la miro.
-a quien mas que a tu marido Juliett? Es famoso por su gusto por los cristales y ventanales, solo tienes que ver el edificio.
Juliett la miro abriendo los ojos sorprendida.
-Tu...hablas mi idioma? por dios menos mal ya pensaba que jamas volveria a oir el espanion sin el acento tan raro que a veces pone Kevin.
Se rio por lo bajo y la chica le cogio la chaqueta.
-te la guardare, si hablo tu idioma soy Maria de Madrid, la secretaria de Kevin y su mejor amiga desde que teniamos once anios, me gustaria haber asistido a vuestra boda pero estaba fuera del pais - le sonrio - felicidades.

Sonrio al oirla sintiendo un gran alivio y casi deseaba seguir hablando con Maria mucho mas rato pero las ansias de ver a Kevin le podia.
MIro varias veces a la puerta grande que habia tras el escritorio de Maria y la miro a ella esperando que le diera alguna palabra de aprovacion pero la chica solo asintio con la cabeza sonriendo.
Se acerco a la puerta dudando si debia llamar o no asi que solo abrio la puerta muy despacio dejando una rendija para poder verle y oirle lo necesario pero justo cuando se acerco a poner la oreja contra la puerta la oir Kevin abrio de golpe sorprendiendose de encontrarla ahi.
Por su parte Juliett no pudo aguantar el equilibrio y callo sobre el pecho de su marido que la agarro rapidamente.
-Que estas haciendo aqui? estas bien? -la alejo de el para verla y suspiro - como has llegado hasta aqui solo?
Juliett pensaba que le estaba reganiando hasta que pudo ver una leve sonrisa en su rostro, parecia contento pero no entendia por que.
-Me aburro muchisimo en casa no se que hacer y estoy de vacaciones en la escuela Kevin, enserio que me aburro muchisimo - suspiro mirandole a los ojos poniendo carita de gato con botas - muchisimo.
No podia evitarlo verla asi hacia que ojitos azules sacara su lado mas tierno, se morio el labio sonriendo y la miro.
-Vamonos a comer, hoy ya acabe mi trabajo y vamos a ir a hacer las compras de navidad el arbol los adornos y los regalos - sonrie y miro a Maria - Maria podria pedirte un favor?
La chica asintio sin dudarlo y cogio su agenda.
-No no es nada de trabajo, bueno si pero no debes tomar nota, me gustaria que por las tardes te tomaras libre durante dos semanas para pasarlas con Juliett, te las seguire pagando pero eres la unica que conoce su idioma y si eso hace que se sienta mejor tienes mi permiso para no trabajar por la tarde durante dos semanas.
Juliett y Maria le miraban asombrados sin saber que decir, eso era demasiado...generoso y demasiado raro viniendo de Kevin pero oye no iba a desobedecer al jefe, mucho menos cuando era algo para que ella se distrajese.
-Cuando debo empezar senior?
-Ahora mismo, coge tu abrigo que nos vamos los tres de compras - se rio.