Huyendo De Mi Destino (Zayn Malik)

3

Cada día que pasa, menos me lo puedo sacar de la cabeza, lo veo cuando entra a sus clases, lo veo cuando sale, a veces nos topamos en los pasillos, él trata de saludarme pero de verdad me da miedo ser amiga suya así que simplemente lo ignoro. No se qué me sucede, soy amiga de Eric, soy amiga de John, incluso almuerzo con ellos y no pasa nada, nunca he pensado en ellos como en algo más que amigos, pero con Khaliq… es otra historia.

-¡Hey, Hess! ¿Soñando despierta de nuevo?- y claro. Llega mi impertinente amiga a interrumpir mis pensamientos…

-No Lilly, no sueño, pensaba en mis padres. –Mentí- Los echo mucho de menos –Por lo menos eso no era mentira.

-Anjá… sí, claro. Dime algo, ¿Qué vas a hacer hoy a la noche?

-Esteee… nada, hasta ahora.

-Bien, vamos al cine y luego a comer una pizza.

-¿Tú y yo solas?

-No, van los chicos también. Ah y unas amigas de ellos, y un amigo mío....

-¿Y yo Sola? No gracias, paso.

-No seas boba, Bryan, mi amigo, va a llevar un amigo suyo, para que no te sientas solita- Y ahí está de nuevo esa sonrisa perversa de Lilly que siempre y cuando no tenga nada que ver conmigo, me encanta.

-Vale, total no me quiero quedar haciendo nada aquí sola. –Pensando en cierto chico que no me deja vivir, añadí para mis adentros.

-19:30

-Hecho, nos juntamos a la salida.

Estaba muy emocionada acerca del paseo, sería algo nuevo para mi, salir en grupo, con amigos, hombres incluidos, chicos mejor dicho, estaba segura que podría dejar de pensar en Khaliq por lo menos unas horas.

Subí a mi habitación a terminar unas clases y  buscar qué ponerme para ir al cine. Si mi madre viera la ropa que llevo aquí se muere… pero no creo que piense que ando con túnicas y velos por estos lados, ¿verdad?

De camino a mi habitación me encontré a Eric que andaba buscándome, lo notaba apenado.

-Hess, ya sabes los planes para esta noche ¿verdad?

-Pues sí. –Comenté animada- Estoy muy emocionada.

-Te quiero aclarar algo - empezó mientras se acercaba a mi y me tomaba la mano entre las suyas- la chica que va conmigo al cine, ella es sólo una amiga. Espero que no te sientas mal. –Concluyó dándome un beso en los dedos y me miró con unos ojos de inocencia que si no lo conociera lo suficiente hasta le creería que la chica era solo una amiga.

Al principio no entendí nada, pero al cabo de un minuto supe por dónde venía.

-No te preocupes, Eric. Todos vamos emparejados. ¡Hasta yo! Bueno aunque  no se con quién. Es un amigo del amigo de Lilly.

-Que confiada eres, bella… Mira que ponerte en manos de Lilly.

Sonreí. De verdad que a Lilly le faltaba un tornillo pero parece que a mi me faltaban dos.

-En fin, ya está hecho. Ahora no le puedo decir que no voy y por otra parte no me quiero perder la salida.

-¡Buena suerte! –Dijo Eric mientras se alejaba- Espero que no te haya buscado al Grinch.

-Ja ja, total que ni es mi cita. Es solo para no andar ahí de sobrada…

Me di cuenta que en realidad lo que esperaba Eric era que no fuera. Como si me fuera a meter en su vida. Por favor…

***

Mi vida en la universidad era todo lo que había esperado que fuera, con un bono de una guapísima chica pelo negro que me hacía suspirar cada vez que la miraba o pensaba en ella... Incluso en las horas de dormir estaba pensando en ella... no se qué me estaba pasando. Sabía que no podía ilusionarme con ninguna mujer, sabía lo que me esperaba al regresar a casa: mí ya planificada boda.

Nunca habría aceptado casarme de esta manera si tuviera elección, pero por amor a mi padre lo haría, ya le había dado mi palabra y hay cosas de las que no se puede escapar bajo ningún concepto. Estaba resignado, solo que desde que llegué a América eso se me estaba haciendo cada vez mas impensable, y no por ser rebelde, en absoluto, toda la culpa la tenia ella; Hessa.

¿Cómo pude ser tan tonto de fijarme en alguien? Conocía mi destino, sabía lo que me esperaba, ¿por qué no puedo dejarla de lado y seguir con mi vida?

La vi hablando con el pesado de Eric en el pasillo y me entraron unos celos incontrolables cuando vi que le tomó las manos y le estaba dando besos… Descarado. Lo había visto hacía dos noches con una morena, muy linda por cierto, hablando y haciéndose amurracos en pleno campus.  Las cosas que debía uno aguantar. Lo peor era que Hessa parecía no darse por enterada.

-¡Khaliq! – Saludó de pronto mi único amigo hasta el momento, Bryan- ¿Qué haces? Te veo algo preocupado.

-No, Bryan, gracias por preguntar, es solo que últimamente tengo más cosas en la mente que de costumbre.

-Ah, pues te tengo la solución para eso, al menos por esta noche.

- A ver –dije sin mucho interés.

- Te he visto observar a la amiga de Lilly detenidamente en más de una ocasión, ¿cómo se llama? Ah si, Hessa.

 En cuanto escuché su nombre toda mi atención estuvo dedicada a Bryan.

-¿Y, algún problema con eso? –pregunté intrigado.

-No, al contrario, creo que te alegraré la noche, extranjerito.

Sonreí cuando escuché el sobrenombre que me había puesto Bryan, era el único que sabia cosas de mi, por ejemplo, que venía de un país lejano, aunque no le dije de cuál exactamente.

-Deja la intriga Bryan, vamos ya, dispara.

-Esta noche salgo con Lilly, sus amigos y unas amigas de ellos… y Hessa.

-¿A qué hora y dónde nos reunimos?

-¡Vaya! Pero por lo menos deja que te diga el plan.

-Ahórratelo. Iré de todos modos.

-Está bien casanova, no comas ansias, nos vemos en el receso de la tarde y acordamos la hora.

-Hecho.

Error… me dijo la computadora de mi cerebro... estaba cometiendo un grandísimo error… de nuevo. Nada bueno podía resultar de esa salida. Mejor dicho, nada correcto podía resultar de esa salida, porque bueno estaba seguro que sí sería. Sólo sería una noche, una salidita con amigos, y de ser posible un rato con ella a solas…

Debía elegir bien qué usar esa noche. Ya me había dado cuenta de que ella siempre vestía muy bien. Me sorprendí mucho cuando supe que era árabe, no lo parece para nada. Viste de manera casual y al mismo tiempo distraída, es como si lo hiciera a propósito para parecer que no le importa lo que use, pero se nota que tiene mucho cuidado al vestir... Y me vuelvo loco cada vez que veo ese andar suyo, el suave balanceo de sus caderas al caminar y cómo baila su pelo al compás de sus pisadas… ¡me enloquece! Tiene un cuerpo de infarto.

Aunque es delgada se nota que no se mata de hambre y tiene unas curvas… uf. Sus ojos negros como la noche y adornados con pestañas larguísimas. Sus piernas, esas no terminan nunca. Su trasero… mejor ni lo describo. Estoy loco por poner mis manos ahí, aunque estoy seguro que me ganaría tremenda cachetada, aunque la recibiría con gusto…

Me obligué a cambiar el rumbo de mis pensamientos, nada de ganarme bofetadas esta noche.

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Lilly. la de la foto...