Dulce Chantaje

Capítulo 10: Final

Una semana después

Hoy le había dicho el último adiós a mi padre. Después de una larga y dura semana de interrogatorios y autopsias, podía decir que ya estaba descansando en paz. Al menos su asesino no estaba vivo para celebrar su muerte, estaba tres metros bajos tierra también, y no podía decir que eso no me agradaba.

Después de que Dominic acabara con los tres hombres que habían asesinado a mi padre, fuimos directamente hasta su penthouses. Aunque no estuvimos mucho tiempo allí, la policía llegó inmediatamente después, solo para decirme que habían encontrado muerto a mi padre. Al parecer los vecinos habían alertado a la policía cuando se escucho el disparo, solo que yo ya me había ido.

Me interrogaron durante dos días mientras hacían la autopsia al cuerpo de mi padre. Al final no encontraron nada en mi, y determinaron que mi padre había sido asesinado por un ajuste de cuentas. Tampoco relacionaron su muerte con la de los tres hombres que encontraron en aquella casa, así que todos estábamos a salvo.

No me sentía mal por el hecho de que Dominic y sus hombres habían acabado con tres hombres porque sabía que él nunca haría algo así a un inocente. Él había estado siendo un gran apoyo para mi durante estos días, sobre todo en el funeral de mi padre. Si era sincera, lo necesitaba.

—¿Está bien con que te quedes aquí? —preguntó Angie cuando entramos a la sala de estar de la casa de Dominic— Puedo llevarte a tu casa si quieres.

—No te preocupes —murmuré— estoy bien.

Ella me dio una abrazo, otro más. Había estado haciéndolo desde que se enteró de la muerte de mi padre, incluso había interrumpido aquí cuando la llamé para decirle donde estaba. Se había comportado como la mejor amiga que alguien podía tener, también había llamado a su padre abogado para que me ayudara. Al final no fue necesario, gracias a Dios.

—Te quiero —dijo cuando me soltó— si necesitas algo, solo llámame.

Asentí y me despedí de ella, Richard llego sin que nadie lo llamara y la acompañó hasta el vestíbulo, donde se perdieron de mi vista. No tenía idea de como el chico hacía para aparecer sin que nadie lo llamara, justo cuando se necesitaba, pero no me estaba quejando. Él me ayudo cuando estaba en peligro, así que siempre iba estar agradecida por eso.

Me senté en el sofá de la sala de estar y me quedé mirando a la nada. No sabía cuanto tiempo iba a estar aquí, ni siquiera sabía porque le había pedido a Angie que me trajera aquí en vez de llevarme a mi propia casa. Pero está última semana este lugar se había convertido en un hogar para mi, y junto con Dom, en él me sentía segura.

No sabía si teníamos una relación o no, a pesar del hecho de que compartíamos cama todas las noches él nunca me tocó, al menos no de forma sexual. Eso me impresiono, había estado esperando que lo hiciera que se aprovechara del hecho de que estaba de luto por mi padre. Pero no lo hizo.

Me quité los zapatos mientras lo esperaba. Él me había dejado en el funeral con Angie, me había dicho que tenía asuntos que resolver y que volvería pronto. No le pregunté que asuntos, porque eso no era de mi incumbencia, en cambio le di un asentimiento y vine directamente hasta aquí.

Mientras esperaba a Dominic, fui hasta la cocina y me prepare un emparedado. Lo devoré en casi dos minutos, dándome cuenta lo muy hambrienta que había estado todo este tiempo.

Escuché pasos afuera, así que me moví rápidamente hasta la sala principal. Y allí estaba él, hermoso como siempre.

En estos días me había dado cuenta de que Dom tenía una extraña mirada cada vez que sus ojos se posaban en mi, y era demasiado realista como para pensar que era amor.