"Mi percepción del tiempo, el reloj y una taza de café" [Taoris]

Capitulo 10: Varias sorpresas y...

5:00 de la mañana, última semana de octubre.

Había quien lo trataba bien y quien lo lastimaba, la delicadeza debía ser reciproca en algunas ocasiones pero la mayoría de las veces abundaba la violencia acompañada de extraños fetiches, los cuales, le dejaban cicatrices que aprendió a ignorar con el pasar del tiempo. Todo por obtener cariño de una única persona, su padre...

"Cada vez que hagas esto te querré un poco más" comentó cuando Kris comenzó a acostarse con los y las herederas de las grandes instituciones, incluso con los líderes de las mismas. Se rumoreaba que tener a aquel hermoso muchacho por compañero era como haber vivido en el paraíso un momento y, sin importar que tanto le dijeran o le regalaran, él se negaba a entablar una relación ¿Por qué? Porque ese acto que realizaba no podría llamarse amor de ninguna manera posible.

Todo lo hacía por el beneficio que representaba para la empresa de su padre, el cual, después de cada sesión, lo abrazaba como si realmente viera en Kris un hijo. Por esas migas de cariño el chico era capaz de tener muchos encuentros más... hasta que cayó en cuenta de su verdadera situación y de lo horrible que era.

Aún recordaba ese día, ese que regresaba a su memoria en forma de pesadilla.

Pero... en esta ocasión su sueño no trató del momento fatídico, al contrario, era todo cómo antes de que su madre descubriera los malos asuntos en los que su padre lo estaba envolviendo. Traía puesto un traje color gris bastante elegante que contrastaba perfectamente la camisa roja que llevaba también. Su padre hizo especial énfasis en que presentara con lo mejor de sí mismo para ese "cliente" y cómo le pidieron, de igual modo, llegó un poco antes de la hora usual notando mientras caminaba por el pasillo que su cita ya estaba en la habitación

Tomó aire en un intento por silenciar a su alborotado corazón curioso por saber quien lo recibiría al cruzar la puerta tras insertar una llave que siempre llevaba consigo; el seguro saltó y finalmente pudo entrar descubriendo en la cama un bulto cubierto por las cobijas satinadas. Que descaro, usualmente le esperaban despiertos. Respiró profundamente asumiendo su forzado papel de amante tras caminar en dirección a su nueva momentánea pareja, al llegar se sentó en la orilla de la misma y deslizó sus dedos por el contorno de la figura, se percató, gracias a su tacto, que era un hombre joven. Suspiró, al transcurrir el momento descubrirían quien sería el dominante pero, para eso necesitaba, verle.

De manera delicada agarró la orilla de las cobija para al fin descubrir a quien se escondía tras ellas. Su estómago y su corazón dieron un vuelco al notar que todo el halo de misterio se debía a Tao, que con ojos somnolientos contempló a su pareja. Kris no sabía cómo reaccionar ante tal información, se sentía extrañamente alegre pero... ¿Por qué? Una sonrisa se dibujó en su rostro, sin embargo, se esfumó al poco tiempo tras percatarse de que, en los labios del rubio, lo que se presentaba era una mueca acompañada de desdén, de prejuicio y asco.

-¿Qué... qué ocurre?- cuestionó Wu Yi Fan con rubor en sus mejillas.

Tao se enderezó hasta quedar finalmente sentado aún acusándole con la mirada para luego sonreír de manera histérica.

-Lo que ocurre es que te dignaste pensar que me acostaría contigo cuando es claro que no lo haré...- escupió levantando la barbilla. -Noté como sonreíste, pero ni siquiera lo vuelvas a contemplar como una opción. Nunca ocurría, nadie te amará...- Sentenció. Un joven Wu asustado, retrocedió hacia la puerta en un intento por salir del cuarto, sintiendo a sus espaldas, como la única persona a la que había ansiado agradarle comenzaba a soltar amenazantes palabras que le ardían como veneno de serpiente. Sacudió el pomo con violencia pero no cedía en lo absoluto. -¿Crees que alguien va a querer estar contigo después de que te han usado tantas veces?