Conversación familiar.

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Estaba viendo la foto de Auggie que encontré revisando entre mis cajas de zapatos. Auggie es tan pequeño, tan indefenso, tan lindo... Aún no puedo creer que mi mamá fue capaz de perderlo, sólo para alejar a Laura. ¿En serio lo hizo por eso? Es que a veces no la entiendo, es una persona muy extraña. Suspiré. Me levantó, y en eso veo a mi mamá en el marco de la puerta.

—Maia no te acuerdes de esas personas, ya no son nada para nosotros.

Mi madre me quita la foto y la tira al suelo de inmediato, puedo ver que cayó debajo de la cama, no es tan malo.

—Ellos fueron parte de nuestra vida —respondo mirándola de modo enojado.

—Sí, ellos fueron parte del pasado, ahora debemos vivir el presente juntas.

—Mamá, ¿No crees que...

—Maia, te aconsejo que te preocupes más por la relación que mantienes con Ross —me interrumpe. Comienza a caminar, creo que va a la cocina, yo simplemente la estoy siguiendo.

—Madre, yo te estoy hablando de una preocupación que tengo y tú metes a Ross en esto, es que en serio no lo entiendo.

Mientras habló, me siento en la mesa de la cocina, para poder estar con ella y seguir conversando.

—No te preocupes por tonterías —responde de modo frío mientras revisa el refrigerador, puedo ver su ceño fruncido —. Deberías preocuparte para ver cómo mantendrás a Ross junto a ti.

—¿Qué se supone que significa eso? —preguntó confundida.

Mi madre se sienta frente a mí, y se cruza de brazos con el ceño aún más fruncido.

—Ross ahora va a pasar mucho tiempo con Laura, recuerda que ellos viven juntos.

—¿Acaso crees que ellos se pueden enamorar? —preguntó un poco más calmada. El silencio de la habitación me hace reír a carcajadas. ¿En serio? ¿Ross y Laura, cómo una pareja? ¡Es el mejor chiste que he escuchado —. Madre, es imposible que eso suceda.

—Ellos se van a conocer más, cuando las personas pasan mucho tiempo juntas, pueden nacer sentimientos —me explica de modo serio.

—Eso es imposible, porque él me ama —respondo con mucha seguridad.

—Espero que estés segura de eso.

Mi madre se levanta y se va de la cocina. Yo me quedó sentada y no puedo evitar dudar, debido a las cosas que mi madre me dijo. ¿Acaso Ross y Laura pueden enamorarse? Lo veo poco probable, porque ellos son muy diferentes, son polos opuestos. Ross es un millonario engreído, y Laura es una chica muy ingenua. Entre engreídos nos entendemos. Creo que Ross y yo nos entendemos y de cierto modo, somos el uno para el otro. Además, hay amor por parte de los dos.

—...—

Todos estamos sentados en la mesa. Martina iba a hablar, pero en eso Ross pidió permiso para ir al baño, por lo que subió corriendo. Lo esperamos por unos minutos. Durante esos minutos, todos me miraban con mala cara, a excepción de Martina. Ross bajo, y Martina sonrió, pero no era una sonrisa normal, era una sonrisa seria.

—Los reuní aquí hoy, porque quiero hablarles de algo importante —dice Martina, comenzando con su discurso.

—¡¿Al fin nos devolveras todo el dinero?! —pregunta Rydel realmente entusiasmada.

—No es nada de eso —responde Martina. Rydel se cruza de brazos y hace un puchero, como si fuese una niña.

—¿De qué se trata? —pregunta Stormie, mirando a su madre fijamente.

—Quiero comunicarles que estoy muy decepcionada de todos ustedes. Porque desde que les quite el dinero, no han tenido avances. Nadie ha hecho algo de lo que me sienta orgullosa.

—Yo he estado trabajando con Ratliff —se defiende Rydel cruzándose de brazos.

¿Trabajando con Ratliff? ¿En serio Ratliff tiene un trabajo? Tenía entendido que ese restaurante es de Riker, aunque nunca lo he visto ahí. ¿Acaso Ratliff me ocultó lo de su propio Restaurante? No lo creo, es muy honesto.

—Y yo he estado aprendiendo cómo manejar una casa —se defiende Stormie.

—No es cierto, lo que has estado haciendo es acosar a Ratliff, él me lo ha contado todo —Martina reta a Rydel, ella se agacha un poco en el asiento —. Y ni hablar de los desastres que has hecho en la casa, Mark ha tenido que trabajar aún más, gracias a ti —Martina fulminó con la mirada a su hija —. Y para qué hablar de ti, Ross. Si lo único que has hecho es provocar a Calum.

—Abuela, sólo ve al grano. ¿Quieres? —pide Ross con el ceño realmente fruncido. Sé nota que todos están enojados. Lo peor de todo, es que no sé qué tengo que ver yo, si ni siquiera soy parte de esa familia.

—El punto aquí es que todos son unos irresponsables, son unos flojos y no saben hacer nada por sí mismos, deberían sentirse avergonzados de sí mismos —Martina hablaba con voz seria, voz de mando y voz fuerte.

—¿No podías ser más directa? —preguntó Stormie con tono serio.

—¿En serio tiene que estar ella aquí? —preguntó Ross señalándome.

—Ella tiene que estar aquí, porque es parte importante de lo que les quiero informar —Martina se levantó de su asiento, le dio una mirada a todos, y luego de asentir dijo: —Decidí que cambiaré mi testamento... Le dejaré todas mis cosas a Laura, porque ella es una chica que se esfuerza por obtener lo que quiere, es una muy buena persona.

Me quedé callada debido a la sorpresa. Todos se quedaron callados, y ahora todos me fulminaban aún más con sus miradas asesinas, esto era realmente incómodo, era espantoso, en serio, no sé cómo Martina había llegado a está decisión. Yo no soy parte de la familia, no tendría porque darme todo a mí, es claro que no aceptaré.

—Yo...

—¡Ella no lo merece! ¡Yo soy tú nieta! —Rydel me interrumpió.

—¡Y yo soy tú hija! ¡No tengo otro lugar dónde vivir! —se quejó Stormie.

—Yo ni siquiera diré nada. Sólo te advierto que cometes un error —dijo Ross frío.

Todos seguían protestando, gritaban, se levantaron. Era algo muy molesto, y lo peor de todo, es que peleaban por mí culpa. ¿Por qué las cosas siempre se tienen que complicar de alguna manera u otra?

—¡Silencio! —exige Martina, seria y con su típica voz de mando —. Es una decisión tomada, no les sirve de nada protestar.

Y después de decir aquello, se retira. Dejándome sola en la boca del huracán. De acuerdo... Ahora sí que me siento realmente nerviosa, y algo asustada. Todos me miran de un modo horrible, todos están furiosos.

Jill al fin se dio cuenta de que Ross y Laura van a pasar muchísimo tiempo juntos, y que pueden llegar a enamorarse. Maia es tan ciega que no quiere fijarse en ello. Y bueno... Martina decidió darle toda su herencia a Laura, ¿Acaso se volvió loca? Pobre Laura, ahora las cosas se pondrán mucho más difíciles para ella...

The True.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora