Me llamo Kris Meier, acabo de escribir la última letra de mi diario con muchas lágrimas en mis ojos, tendré que abrirlo de nuevo para que lo conozcas y aqui empiezo.
¡Te Odio Kris!-Dijo mi padre al saber que era gay, recuerdo su cara de furia. --Sie...
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Llegamos al colegio entre una larga platica en donde Jonny se hacia el interesante y yo me hacia el sabelotodo.
Le dí una última caricia al lobito antes de bajarme del carro--recuerda: pasaré a recogerte después de clases chiquito--asentí cerrando la puerta del carro y caminando hacia dentro del colegio despidiendo así a un chico que acababa de darme la mejor noche y mañana de toda mi vida, bueno, hasta donde recuerdo.
En medio de mis cavilaciones una sonrisa fugaz se me escapó porque eso de oír la palabra "chiquito", en mi vida ya se convertiría en una rutina, y no saben cuánto me agrada esa idea.
Pero a medio caminar Lily y Tiffany se abalanzaron sobre mi indiscretamente casi tirándome al suelo--te amamos, te amamos, te amamos--rodé los ojos mientras las 2 me mantenían fuertemente abrazado.
Se separaron, fruncí el ceño al ver a Lily--¡qué cambio! --recalqué viendo como su pelo mantenía el color rosa uniforme en varios rayitos por toda su cabellera--creí que... ¿estás bien? --bromeé, tocando con mi palma de la mano su frente para verificar mi hipótesis.
Puso los ojos en blanco--después de que me teñí el pelo por ti ¿esto es lo único que recibo?... Ya no te quiero... ¡¡terminamos!!--fingió llorar sobre el hombro de Tiffany; no podía decir que extrañaba lo infantil que se comportaba.
--Lily... Ya enserio, pensé que no vendrías por tus moretones--me encogí de hombros, se dio la vuelta en mi dirección al instante, enarcó las cejas burlonamente.
--cuales moretones--miré detalladamente su cara, pero sin poder notar ningún solo moretón.
--¿qué hiciste? --estaba algo sorprendido.
--no hay nada que el maquillaje no solucione--dijo engreídamente para después sacar de su bolsón un rubor y empezar a echarse dándome la espalda.
Hizo una mueca sin creerlo, ¡¡ella se maquillaba para poder venir a estudiar! Si de mi fuera me quedara meses acostado fingiendo dolor. --imagina yo la soporto cada día---Tiffany se colocó a la par mía con cara de indignación.
La miré negando con la cabeza--por favor Tiffany, tu eres igual--ella se encogió de hombros. Pero de una manera como sorprendida, Tiffany reaccionó contra mi zangoloteándome.
Creo que hasta me asusté por su loca forma de actuar--no me lo vas a creer... El chico de camisa amarilla te está viendo--quise mirar a un lado, pero Tiffany me detuvo con su mano--no voltees... Míralo disimuladamente--rodé los ojos soltándome del amarre de Tiffany.
--la última persona que escuchó esas palabras giró la cabeza como el exorcista y todos sabeos como terminó--bromee. ¿quién seguía diciendo "mira disimuladamente" es casi como firmar tu hoja de defunción.
Tiffany me dio un manotazo algo fuerte, me llevé la mano al lugar lanzándole una mirada asesina a Tiffany, luego busqué lentamente con mi vista al chico y lo vi, extrañamente lo vi, estaba recostado en su casillero con su vista puesta en mí, al verme sonrió para luego agachar la cabeza avergonzado.
