El Último Viaje

Capítulo 2: Un amor del pasado.

Tenían un día de haber llegado, para evitar las peleas, Frank salió a desayunar a una cafetería que conocía, la dueña del local no era otra más que Madison, la novia de su juventud, la cual había dejado al irse de aquel lugar.

Madison era una mujer hermosa, ojos grandes azul cielo, rubia de pelo largo, cuando lo volvió a ver le sonrió.

—No sabía que estabas de visita—se dirigió a Frank.

—No sabía que trabajabas aquí—le contesto él.

—De echo soy la dueña—Madison le sonrió como antes.

Ambos se quedaron charlando por un buen tiempo, ella le contó lo sucedido después de que él se alejara de allí, él hizo lo mismo, pero evito contarle lo de su divorcio, era un tema personal y no quería divulgarlo.

Katherine se encontraba en casa de sus suegros, no quiso salir, no conocía el lugar para salir con confianza, y evitar a Frank. Le preparó el desayuno a su pequeña, pues no dejo que Frank la llevara con él.

— ¿Por qué no fuiste con Frank?—Sara la notó un poco distraída.

—Quería quedarme aquí, por si necesitabas algo—Katherine fingió ante Sara.

Pero ella sabía que algo no andaba bien, pues pudo notar algo nostálgica a Katherine.

Madison invito a Frank a salir solo como amigos, pero la realidad era que ella seguía enamorada de él, sabía que era un hombre casado, y aunque Sara no lo supiera, el hermano de Frank sabía que él estaba por divorciarse y se lo había contado.

—Entonces te veo en la tarde—le confirmo Frank.

—Aquí te espero—ella estaba sonriente.

A él le parecía atractiva, después de todo salieron juntos, y no quería pasar tiempo con Katherine.

Cuando regreso a su casa fue directamente a ver a su mamá, ella le sonrió y le pidió que llevara a Katherine a conocer el lugar donde vivió su infancia, él le sonrió pero no estaba seguro de hacerlo.

— ¡Papi ya llegaste!—Cony corrió con su padre.

— ¿En dónde estabas mi amor? ¿Por qué no te vi cuando llegue?—.

—Estaba con el abuelo, nos enseñó a mami y a mí tus fotos—mencionó la niña.

Por la noche Frank se arregló, salió a su camioneta, Katherine salió detrás de él y le pregunto.

— ¡¿A dónde vas?!—.

— ¡Que te importa!—a Frank le molestó que le preguntara.

—Tu mamá se puede dar cuenta que algo pasa Frank—le advirtió ella.

—Se dará cuenta en cuanto se recupere—le respondió él.

Frank se subió a su camioneta y se fue, Katherine intento disimular sus lágrimas pero no pudo, comenzaba a pensar que había sido una mala idea haberlo forzado a llevarla con él, cuando sabía que él la odiaba.

Madison lo esperaba en su cafetería, el local se encontraba oscuro, tenía velas que la iluminaban, cuando Frank llegó pudo darse cuenta que posiblemente no saldrían como ella le había dicho. Ella vestía un vestido de flores, que le remarcaban su figura.

—Pensé que no vendrías—se dirigió a Frank al verlo entrar.

—No iba a dejarte plantada—le sonrió él.

Madison se acercó a él, acarició su rostro con sus manos, lo miró detalladamente, y él la tomo de la cintura, ella rodeo su cuello con sus brazos —Todavía te amo—dijo mientras le daba un beso en la boca, Frank le correspondió, pronto comenzó un encuentro pasional.

Entre las caricias y besos, Madison se comenzó a desvestir, estaba por desabrocharle el pantalón a Frank cuando este le pidió que se detuviera.

— ¿Qué pasa? ¿No te gusto? ¿No me deseas?—Madison confundida.

—No, no es eso. Mady, no estoy bien ahora, yo... no quiero lastimarte—Frank la miró con cierta duda.

— ¿Es por tu divorcio? Todavía la quieres ¿no es así? A tu esposa—pregunto ella.

— ¿Cómo sabes de mi divorcio?—Frank se sorprendió al escucharla.

—Joy me lo contó—le confirmó ella.

—Joy y su bocota. No es por eso, no me interesa ella, sino mi hija, no sé cómo lo va a tomar, Cony quiere mucho a su mamá y... lo único que me importa es que mi madre se recupere, así podré mandar a Katherine de vuelta a Nueva York—le confesó él.

—Como, ¿ella vino contigo?—Madison se sorprendió.

—Insistió, quería ver a mamá, además no es momento de contarle todo, ella le tiene cariño a Katherine, esperaré a que se recupere para contarle todo—Frank estaba más tranquilo.

—Te entiendo—Madison le dio su apoyo y pego su cabeza junto a la de él, después lo abrazó con ternura.

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