Sara; La melliza de Ron Weasley.

3. El cabello de Hermione (Editado)

Luego de llenarnos como nunca de dulces. Saque un libro de mi baúl, pero no había leído mucho cuando se oyó un golpe en la puerta del compartimiento, y entró un muchacho de cara redonda que parecía ligeramente familiar, tenia las mejillas gorditas como yo las tenía cuando era una bebé y justamente ahora parecían infladas como globitos. Se notaba muy afligido.

-Perdón -dijo con una vosecilla titubeante atrayendo mi atención por un instante -. ¿Por casualidad no habréis visto un sapo?

Cuando mi hermano mellizo y Harry negaron con la cabeza, gimió. Se voltio esperanzador hacia a mi, pero cuando hice el mismo gesto, su expresión cambio.

-¡La he perdido! ¡Oh Merlín! ¡Se me escapa todo el tiempo!

-Ya aparecerá -dijo Harry. Y volví a perderme en la lectura del único libro que tenia, papá me lo regalo, tenía un nombre extraño, y era de procedencia muggle, pero era mi favorito hasta ahora

-Sí -dijo el muchacho triste -. Bueno, si la ven por favor... - ni siquiera termino de hablar cuando se fue.

-No sé por qué está tan triste -comentó Ron con un aire descuidado -. Si yo hubiera traído un sapo lo habría perdido lo más rápidamente posible. - hizo una mueca - Aunque en realidad he traído a Scabbers, así que no puedo hablar.

La horrible rata seguía durmiendo, en las rodillas de mi mellizo.

-Podría estar muerta y no notarías la diferencia -dije con disgusto sin quitar la mirada del libro

-Ayer traté de volverla amarilla - me interrumpió Ron, como siempre, me limite a rodar los ojos, aveces ron podía ser un pequeño ingenuo - para hacerla más interesante, pero el hechizo no funcionó. Te lo voy a enseñar, mira...

Mire a Ron, que revolvió las cosas de su baúl,cuando choco con la jaula de mi gato, que era similar a scabbers, sólo sabía dormir y dormir, claro muy a menudo también igual que su dueña, yo.

Ron sacó su varita ya muy gastada, un poco mas que la mía. En algunas partes estaba astillada y, en la punta, brillaba algo blanco. Al parecer...

-Los pelos de unicornio casi se salen -dijo ron justo lo que pensaba- De todos modos...

Acababa de tomar la varita cuando la puerta del compartimiento se abrió otra vez. Había regresado el chico del sapo, pero llevaba a una niña con él. La muchacha ya llevaba la túnica de Hogwarts y el cabello más asombroso que alguna vez haya visto, todo esponjoso y tenía una rara combinación, era muy rizado pero si me fijaba alcanzaba a ver unas partes lisas. Definitivamente este cabello me cautivo.

-¿Alguien ha visto un sapo? Neville perdió uno -dijo. Tenía voz de mandona, su pelo color castaño se movía ligeramente cuando hablaba y sus diente eran bastante raros.

-Ya le hemos dicho que no -dijo Ron, pero la niña no lo escuchaba. Estaba mirando la varita que mi mellizo tenía en la mano.

-Oh, ¿estás haciendo magia? Entonces vamos a verlo - Se sentó a mi lado. Ron pareció desconcertado. y no reacciono enseguida