018.

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 Lexie's Ponit of View

—Molly, no creo que sea buena idea.—Dije algo insegura al mirar el indecente vestido que apenas me cubría.—No me gusta enseñar tanto.

—Solo será una noche. Conoceremos a muchísimos chicos y si tienes suerte podrás traer uno a casa. No seas aburrida,Lex. 

—Vayámonos antes de que me arrepienta.

Molly chilló emocionada y subió con cuidado al asiento del conductor del auto de papá, quien gustosamente había accedido a prestarnos con tal de que yo saliera de casa por unas horas. Sacó el auto de la cochera y tomó rumbo al centro de la ciudad. En menos de media hora llegamos a un lugar algo lleno como para ser lunes por la noche, después de unos cuantos coqueteos de Molly hacia el guardia de seguridad entramos al lugar lleno de veinteañeros bebiendo en la barra o hablando en el centro del lugar. Molly me arrastró hasta el centro de la pista con rapidez haciendo que casi cayera en medio de la pequeña pista pero un tipo pudo sujetarme antes de que eso llegara a ocurrir.

—¿Estás bien?.—Miré al sujeto que me habló una vez que estuve bien incorporada. Tenía una gran sonrisa blanca y cálidos ojos azules los cuales vagamente se me hacían familiares. Era alto y sus facciones eran algo finas y cuadradas dándole una apariencia muy atractiva.

—Si, gracias.

—Soy Trevor Knight.—Dijo sonriente extendiendo su mano derecha, acepté su gesto y le sonreí de vuelta.

—Soy Lexie Clark.

—¿Quieres beber algo? 

Molly llegó a nosotros con dos margaritas antes de que pudiese hablar. Me divertí con ese chico durante el tiempo que estuvimos en aquel lugar, al sentir una cierta incomodidad me dí la vuelta como una idiota solo para observar como Shawn tomaba la cadera de una rubia y ambos se dirigían al pasillo de los baños, no era lo suficientemente estúpida como para no saber que sería lo que pasaba. Me mordí el labio para evitar decir algo de lo que pudiese arrepentirme, me sujeté más a aquel hombre para reprimir el impulso de ir y encararlo. Molly bailaba a mi lado ajena a todo lo que pasaba debido a su estado de ebriedad un poco notorio el cual pareció desaparecer un poco al verme.

—¿Que sucede, Lex?.—Alejé a Molly de Trevor y me acerqué a ella para hablarle en el oído debido al sonido de la música.

—Shawn está aquí. Acabo de verlo entrar a uno de los baños con una mujer.

—Menos mal que no fue un hombre.—Dijo riendo mientras se tambaleaba un poco.—Déjalo amiga, ¿Quieres que vaya a arruinarle su diversión?.—Dijo con un sonrisita traviesa y malévola antes de dirigirse al baño.

Minutos después, Molly salió del baño riendo como una histérica mientras mantenía en alto lo que parecía ser una falda negra en sus manos para después gritar como le había cagado la noche a un hijo de perra y a una puta haciendo que todos comenzaran a hacerle bulla. Estaba dispuesta a darme la vuelta e irme pero unas manos en mi cintura me detuvieron impidiendo mi ida.

—Lexie.—Era aquella voz que tanto me había gustado escuchar pero ahora solo podía causarme repulsión, lo único que se me ocurrió hacer fue darle un fuerte golpe en la mejilla haciendo que tanto su mejilla como mi mano se tornasen rojas.

—Aleja tus asquerosas manos de mi cuerpo, maldito cerdo.—Le dije groseramente. Shawn retiró sus manos inmediatamente sin querer hacerlo y solo me miró con algo de tristeza. Esa mirada me habría hecho desmoronarme hace unas horas pero al darme cuenta de que tan poco le importé ya no podía sentir nada. Tomé del brazo a Molly, quien ya estaba a punto de pedir su onceava copa, y la saqué del lugar tan rápido como pude. Sabía que había sido lo suficientemente fuerte para rechazarlo pero no podría serlo por más tiempo. Abrí la puerta trasera del auto de papá y deje que Molly se recostara completamente en los asientos, cerré la puerta con cuidado de no lastimarla y caminé hacia la puerta del conductor pero me detuve al escuchar a Trevor hablarme.

—¿Ya se van?

—Ya es algo tarde y mañana tengo que ir a la facultad. 

—Bien, supongo que podríamos seguir hablando y me has parecido una chica muy linda.

—No estoy interesada en una relación por ahora.

—Podríamos ser solo amigos.—Sugirió sin darse por vencido. Sonreí y tomé su número para dejar mi teléfono anotado en éste. Él se despidió de mi con un beso en la mejilla y tomó rumbo nuevamente al establecimiento y en cuanto a Shawn, lo vi salir cabizbajo del lugar una vez que yo ya había puesto el auto en marcha.

Cuando llegamos a mi casa, quité mis zapatos altos favoritos de los pies de Molly y la ayudé a ponerse de pie quien inmediatamente se tambaleo algo mareada. Cerré el auto y con mucha dificultad entramos a casa, todo estaba apagado por lo que supe que papá estaría dormido así que tratando de ser lo más silenciosas posibles subimos las escaleras despacio y entramos a mi habitación en la cual Molly no dudo en lanzarse y acomodarse como bebé en el lado izquierdo de ésta. Le quité la chaqueta y su cinturón, desabroché sus vaqueros y me deje una manta encima. Ésta sonrió medio dormida antes de hablar en un tono algo confuso.

—Mendes no te merece, nena.—Ésta se cubrió con la cobija y se quedó dormida al instante. Me tomé mi tiempo para darme un baño, tomar un vaso de jugo con la esperanza de bajar un poco el alcohol en mi sangre y me fui a dormir. Conecté mi teléfono a la corriente haciendo que éste se encendiera, miré la hora y lo dejé en mi mesita de noche. No habían pasado ni siquiera diez minutos cuando entró un mensaje.

Shawn

En Linea 

Te extraño como no tienes idea.

¿Tanto como para tener sexo con una desconocida a días de terminar? 

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Pasaron tres semanas desdé nuestro rompimiento, Tres semanas donde tuve él no pudo mirarme a la cara en los pocos días que nos encontrábamos en el campus ya que él se acostumbró a llegar después de iniciar las clases para no tener que verme y no lo culpo por hacerlo. La noticia de nosotros no tardó en correrse como pólvora y con ello comenzaron los estúpidos rumores sobre infidelidades y maltratos por su parte pero no escuchaba ninguna solo me limitaba a mirar mal a todo aquel que hablara sobre el tema.

Liam y yo seguíamos hablando a pesar de que este fuese muy amigo de mi ahora ex novio. Cuando nos quedábamos sin nada que decir él trataba de hablarme sobre el estado mental de Shawn, quien se había vuelto más problemático que nunca pero no me importaba. Shawn no me importó en lo absoluto hasta hacía unos días gracias a cierta conversación que tuve con Molly.

—Lex, ¿Traes tampones en tu mochila?

—No.

—No me digas eso, amiga. ¿No te llega la regla por estos días?

—No me ha llegado.—Me quedé en blanco al escucharme decir esas palabras. 

—¡Que diablos!.—Escuché a Molly gritar desde la casilla del baño y salió después de unos segundos.—Lexie, dime que la última vez que lo hiciste... 

—No lo recuerdo.—¿Cómo pude olvidarme de algo tan importante?

No podía pensar en nada en todo el tiempo que pasó desde que Molly llamó a Derek para pedirle aquel pedazo de plástico hasta que llegó. Un insípido pedazo de plástico con una esponja decidiría que sería lo siguiente que pasaría en mi vida. Molly salió del baño por unos momentos y regresó con una bolsa de plástico de Walgreens en sus manos, me extendió dos cajas blancas con rosa y azul.

—Le dije que comprara dos para estar seguras, dime que salió cuando tengas el resultado.

Entré a una de las casillas y saqué de su empaque ambos tubos plásticos tratando de seguir las instrucciones de las cajas al pie de la letra. Esperé el tiempo necesario y miré ambas pruebas con el corazón latiendome con fuerza. Entonces bajé la miraba y vi los resultados.

  Positivo.

Dedicado a

ohmybenito
2MagCon8
SHAWNIEKING

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Posesión{Shawn Mendes Fan Fiction}*Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ