Ayúdame a olvidar

18. Baekhyun

Sehun me dejó en la entrada de la Universidad luego de que lo hice dar un par de vueltas de más, masajearme los pies en el banco de una plaza, comprarme golosinas y que me las de en la boca, entre otras obligaciones sin sentido que se me iban ocurriendo. Ya no me importaba llegar tarde, me estaba divirtiendo, pero me convenció cuando me acusó de ser irresponsable. Llegué para la segunda materia, que compartía con Chanyeol. Él estaba en el patio cuando bajé de la moto. Me vio y se dejó traslucir algún tipo de malestar en sus ojos. Pensé que estaba alucinando. Corrí a saludarlo una vez que Sehun se marchó, pero el entusiasmo no era mutuo. No me ignoró, sin embargo el ambiente estaba tenso, y así continuó por el resto del día.

Mientras caminábamos por el pasillo, todos clavaban la vista en mi collar. Los que me conocían por la noche estaban menos sorprendidos que los demás. Generalmente me vestía como si aún fuera un niño de mamá y la provocación sólo fuera una habilidad dentro de los videojuegos que jugaba y de lo que carecía en la vida real. Los profesores incluso parecían preocupados al ver el cambio.

Durante esa hora de clases empecé a sentir una puntada en el estómago. Era leve así que la ignoré, pensé que en cualquier momento pasaría. Pero cuando estaba en el pasillo yendo a la siguiente materia, el dolor se volvió más fuerte. Comencé a sentir el cuerpo caliente y un sudor frío. Me crucé con Soo y me preguntó si estaba bien, me veía pálido. Me acompañó al baño e intenté recomponerme. Me ventiló con un cuaderno luego de que me mojé la cara. El malestar cesó y fuimos a clases, pero no tardó en regresar. Las puntadas me hacían retorcer disimuladamente en mi asiento. Necesitaba que alguien me llevara a casa y solo podía pensar en Sehun.

Baekkie♥: No quería molestarte más por hoy,

pero no me siento bien.

»Podrías pasarme a buscar?

Honey: Salgo para allá.

Kyungsoo se quedó conmigo, sentado en la escalera de entrada, esperando a que Hun viniera por mí. Acariciaba mi espalda como si se tratara de un bebé. En ese estado de delirio febril me quedé pensando en lo buen padre que sería mi mejor amigo. Me preguntaba cómo sería Jongin, ya que siempre huía de mí y no había tenido oportunidad de conocerlo mejor. ¿Él también estaría preocupado de mi acercamiento a Sehun? ¿Sería eso lo que tenía a Chanyeol tan raro?

—¿Por qué trajiste la gargantilla? —preguntó Kyungsoo; se notaba que llevaba rato con esa duda en la punta de la lengua.

—El juego de los desafíos —musité.

—¿Siguen con eso? ¿Por qué no dejan de jugar y se ponen serios?

—Ayer me besó.

—¿Y lo correspondiste?

—No me dio tiempo... Luego me evitó. ¿Qué significa eso?

—No deberías estar preguntándome a mí. Mira, ahí viene.

Sehun frenó en la entrada y Kyungsoo me ayudó a llegar hasta él y subir a la moto.

—Ah, por cierto, Kai quiere que salgamos los cuatro alguna vez —soltó.

—¿Qué le respondiste? —pregunté, refiriéndome a la confesión.

—Creo que no será necesario que te diga —respondió fijando la vista más allá de nosotros.

Jongin venía caminando con una sonrisa delatora. Cuando estuvo a nuestro lado un "hola bebé, vine a buscarte" escapó de sus labios antes de que arremetieran contra los de mi amigo. Miré a Sehun, pero por la tranquilidad en su expresión deduje que ya estaba enterado. Empecé a brincar sentado mientras los felicitaba por haber dado el paso, cuando una punzada en el estómago me hizo retorcer.