Y ya, en un abrir y cerrar de ojos estaba frente al gimnasio de Paul, vestida de chica fitness y con una cámara pequeña grabando todo.
Sólo daría una presentación ahí, unas cuantas personas y sería grabada para mi canal.
-Bienvenida a mi mundo.
-Hola Paul...
-Ven, debes preparar la presentación. Está casi listo todo.
Recibí un texto de Jordana que decía que la presentación estaba en mi correo y que tenía un tiempo de 40 segundos por dispositiva así que podría hablar lo suficiente sin exagerar.
Le agradecí con un mensaje de vuelta y seguí a Paul hasta donde yo creía daría la presentación.
No era novedad, ya había hecho algunas en Canadá, en mi ciudad. Pero cuando Paul señaló mi escenario mi sangre se heló.
Esto no sería una presentación pequeña... ¡Aquí caben unas 500 personas!
-Pensé que la presentación sería con algunos de tus clientes...
-Se corrió la voz un poco... Tuve que cambiar la sala a la de conferencias.
-Tu gym es enorme...
Nunca había hablado para tanta gente, no sabía si podía hacerlo. Pavor, miedo, vértigo... Todo al mismo tiempo inundó mi sistema.
Respiré profundo y solo pensaba en todas las personas que podría ayudar si todo esto sale bien.
-Tienes media hora para preparar tus cosas.
Asentí con la cabeza y conecté mi celular para pasar la presentación a las pantallas de la sala. Había un proyector detrás de mí lo que me ayudaría a enseñar mis fotos y explicar como había surgido todo esto por querer ayudar a una casa de niños sin hogar en mi ciudad.
Poco a poco la sala se iba llenando y mis nervios comenzaban a subir mas y más.
-Iniciamos en 5 minutos Ivi, mucha suerte.
Sonrei nerviosa a Paul y tronaba mis dedos cada medio segundo.
Suspiré y cuando las luces de la sala bajaron entré para presentarme.
Los nervios subieron un poco, pero dejé de ver el público y comencé a relajarme mucho más.
Hasta que llegué a casi el final, mi madre me daba ánimos mientras sostenía la cámara grabando mi presentación.
Las últimas diapositivas eran fotos mías de antes, cuando tenía mis kilos de más y la prueba Viviente de que se podían bajar siguiendo mi plan que estaba en un libro era yo, parada ahí frente a ellos.
-Esta era yo el año pasado...
Comencé a escuchar cuchicheos entre los presentes y sonreí nerviosa.
-Dificil de creer lo sé, que sea la misma que ven ahora porque...
Y miré al frente y noté algo que no había sido mi foco de atención antes...
Oh, no. Mi golpe de realidad justo frente a mi.
