Ropa Interior |capítulo especial|

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Kibum llevaba aquella prenda puesta, se puso frente a su espejo de cuerpo completo y se impresionó de lo que vió:

Su trasero completamente expuesto y levantado por los tirantes, lo sentía hasta con más forma - claro, no es como si la parte favorita de su cuerpo no estuviera lo bastante bien ya-.

Pero eso no fue lo que le había dejado con la boca abierta, no señor.

La enorme erección que se cargaba con solo ver su reflejo lo tenía sin habla, es que se imaginaba la mirada de Jonghyun y todo en él se derretía.

Tendría que esperar, ya era casi media noche, no podía llamar a su novio para solucionar su "problemita".

Eso se ganaba por andar de curioso.

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Kibum estaba sentado en su lugar en el salón de clases mientras esperaba al moreno. Se sorprendió de no sentirse extraño, pero si sentía pequeños escalofríos en su vientre bajo.

¿Qué le diría Jonghyun?

Sino se movía demasiado, ni recordaba lo que llevaba debajo del pantalón del uniforme, se sentía travieso.

Sonrió con picardía, sus compañeros estaban en sus cosas, sin imaginar los pensamientos que cruzaban por su cabeza.

Cerró sus piernas por acto reflejo al ver entrar a su novio al aula, pero cuando le sonrió, sintió su cara enrojecer.

-Bummie, ¿qué tienes?.- le preguntó un Jonghyun preocupado. Pasó una de sus manos por la frente del rubio.- ¿te sientes mal?.- se sentó a un lado de Key, aún con su gesto de clara preocupación.

-¿Eh?.- niega rápido con la cabeza.- N-no... Estoy bien Jonggie, no te preocupes. -Trató de sonreír, pero no pudo evitar relamer su labio inferior. Estaba ansioso -.

-De acuerdo.- respondió no muy convencido.

Key se limitó a sonreír una vez más.

Al poco rato entró Minho al salón, con la misma cara de pocker de siempre, detrás de él llegó le profesor y sus clases comenzaron.
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Para la hora del almuerzo, Kibum sentía claramente una semi erección en sus pantalones, es que Jonghyun no dejaba de acariciar sus muslos por debajo de la mesa, en otro momento no le hubiera importado, pero en su situación actual, se sentía reventar.

-J-Jong... -Apenas si el nombrado alcanzó a escucharlo, había sido un susurro por demás leve-.

-¿Hmm?.- ambos comían en el salón, así podían estar ese momento a solas.- ¿Qué sucede? ¿Te sientes mal?

-Si...- Kibum tenía la mirada baja, se sentía avergonzado y no quería que Jonghyun se diera cuenta del color rosa en sus mejillas.- ¿puedes acompañarme al baño?

-Claro.- se levantó de inmediato.- ¿No preferirías ir a la enfermería?.- Key negó, se levantó igual que su novio y caminó detrás de él para que no notara las dificultades que tenía en su entre pierna-.

Sabía que a la hora del almuerzo, los alumnos iban a todos lados, menos al baño. Así que estarían bien.

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-¿Kibum?.-tocó un par de veces en la puerta del último cubículo.- ¿Estás bien? Llevas mucho tiempo ahí dentro, comienzo a preocuparme.

-Jonghyun...-se escuchó el sonido del seguro al ser retirado.- necesito tu ayuda...

El moreno no tuvo tiempo de nada, sintió unos labios sabor fresa sobre los suyos y unos brazos rodear su cuello, jalandolo al interior del baño y chocando con la puerta del mismo.

Júzguenlo Ustedes [2Min]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora