Ámame - Lee Donghae

Capitulo 9

Dejando las cosas claras...

-¿Por qué no lo habías dicho antes?-Le preguntó Ah Ri a su hermana mientras esta aun sollozaba.
-Porque es mi culpa que lo haga. Al principio no era así, pero como no puedo darle hijos...- dijo Min-Hwa interrumpiéndose al final, no era capaz de terminar sus palabras.

Ah Ri la abrazó como consuelo, sabía que el Capitán Choi había hecho lo correcto en decirle aunque no entendía el hecho de que el hombre se negaba para servirle como testigo si ella llevaba este tema al rey. Ah Ri no entendía aquella razón, pero sabía que su palabra como princesa real pesaba por encima de la de aquel hombre y los golpes en su hermana estaban tan notorios que no podría negarlo. Choi Siwon le pidió a Ah Ri que le dijera a Min-Hwa que fue el quien le contó la verdad y tal como él le pidió ella lo hizo, algo más había en este asunto, pero Ah Ri en ese momento tenía otra prioridad.

-Iremos frente al rey Min-Hwa
-No Ah Ri. Junsoo es mi esposo, debo obedecerlo. Además fue nuestro padre quien lo dejó como mi esposo, vio sus virtudes por encima de sus defectos.
-No digas esas cosas Min-Hwa, tu no. ¿Cómo puedes decir tal cosa? Te maltrata porque no le das un hijo. Yo no puedo quedarme como si nada.
-Tú te casaste con el hombre que te violó...
-No Min-Hwa, no compares... Estoy cada vez más segura que Donghae no me hizo daño. Durante estos años no me ha dañado y no se lo permitiría, no me quedaría callada como tu estás haciendo... - En ese momento Ah Ri se puso de pie, abrió la puerta del salón hablándole a una de las sirvientas- Manda a una de las damas al palacio real, pido la presencia de su majestad inmediatamente...
-----------------------------------------------------------------

Habían pasado dos semanas desde aquella conversación y Ah Ri no se equivocaba. Park Junsoo fue arrestado por la acusación que presentó ante el rey y para sorpresa de todos, la reina se presentó como testigo acusando al príncipe consorte de haber sido acosada por él en el pasado. Esto enfureció al rey JongWoon y decretó que moriría en la orca por atreverse a tal acto contra la princesa y el acoso contra la reina. Junsoo fue ejecutado hacía dos días atrás Min-Hwa se había sumido en la tristeza por este hecho. No lo amaba, pero pensaba que el hecho de que su esposo se hubiese comportado así con ella era por su incapacidad de tener hijos porque como toda la corte, ella sabía que él tenía un hijo ilegítimo, así que la culpa de no poder concebir le marcaba y le dolía cada día. Soñaba con un hijo, pero ahora viuda y seca, ese sueño se acabaría.

Ah Ri se encontraba bordando mientras Danbi tomaba una clase de danza frente a ella cuando algunas damas y eunucos llegaron hacia ellas con el semblante preocupado.
-Princesa- dijo Mi-Hi tomando aire para poder hablar- Es el príncipe consorte.
-¿Qué ha sucedido?- preguntó Ah Ri, sintió que su pecho se comprimía al ver en el rostro de su dama la preocupación.
-El príncipe consorte ha regresado. Pero viene entrando a los terrenos del palacio herido.

En cuanto su dama dijo esto, Ah Ri se encaminó hacía el portón. Fue entonces cuando lo vio bajar del caballo. Tenía una venda que sobresalía entre sus ropas que le cubrían el pecho y el brazo izquierdo, pero ahí estaba él y el corazón de Ah Ri saltó jubiloso buscando una mirada de aquellos ojos tristes.
--------------------------------------------------------------

Donghae
Sentí la quemazón del arma, atravesarme, no completamente pero si en gran parte por lo menos más de la mitad de mi cuerpo, el dolor fue indescriptible. Me di vuelta y con esa acción caí del caballo junto con el hombre que me había atacado. Los soldados se defendían y a mí me tocó hacer lo mismo. Golpee al hombre ignorando el dolor en mi brazo mientras lo golpeaba, pero al final pude liberarme de su ataque. Ayudé a otro soldado que era de los que prestaban mi guardia personal durante el viaje y fue entonces cuando me di cuenta que la situación había sido controlada con éxito.

Al parecer los hombres fueron informados que junto a mí se trasportaba una parte del dinero de los impuestos de la aldea. Me puse de pie dispuesto a subir al caballo pero en ese momento sentí como perdía las fuerzas y perdí el conocimiento.