「F R I E N D S」

1.8K 300 21
                                    

  Wirt entró temblando al aula, con un ligero rubor en las mejillas y las piernas como gelatina.

—Estoy seguro de que algún día va a matarme—susurró, bajando la cabeza.

—Ah, pero una buena muerte ha de ser, ¿me equivoco?—un chico moreno y castaño soltó una sonrisa, aunque su expresión cambió repentinamente, y pasó a esconderse detrás de sus libros—. Yo, ah, lo siento. De verdad lo siento.

—Er... ¿hola?—Wirt tragó grueso, usualmente a esta hora su salón siempre estaba vacío, y siempre era él la única persona que llegaba media hora antes de que empezaran las clases—. Siento que no te había visto antes.

De verdad me asustaría que lo hayas hecho, mi nombre es Marco. Soy nuevo—el chico le tendió una sonrisa algo forzada.

—Oh, soy Wirt—caminó hasta sentarse en su pupitre, que justamente quedaba al lado del de Marco—. Un gusto conocerte.

—El gusto es mío—las palabras tenían un fuerte acento extranjero en su lengua, pero de todos modos se oían fluidas y practicadas—. Eo, si no te molesta que pregunte... ¿quién dices va a matarte?

—Digamos que es y no es mi novio—Wirt suspiró, desinflándose sobre la madera—. Yo... bueno, sigo teniendo un poco de miedo.

  Marco frunció el ceño.

—¿Por qué le tienes miedo?

  Y Wirt sabía que no debía hablar con extraños, este chico no llevaba en su salón más de tres horas, no debería ser alguien al que contarle las cosas tan fácilmente. Aún así, se sorprendió queriendo contarle acerca de Bryce. Queriendo escupirle la historia entera en ese mismo instante. Se moría de ganas por pedir ayuda, pero no podía. Su mamá lo mataría si se llegase a enterar que se besaba y de cuando en cuando chocaba penes con otro hombre, su hermano era muy menor y muy ingenuo como para siquiera pensar en ese tipo de cosas, y su padre lo había abandonado ya hace tiempo.

—Él no te está pegando, ¿o sí?—indagó el latino, frunciendo aún más el ceño—. Porque en las relaciones no...

—Él no me pega. No, Bryce no es así. Solo es... intimidante. Y aunque me gusta algo yo... no creo que estemos haciendo lo correcto.

  Si el moreno iba a agregar algo más, no lo hizo. Y se quedó pensando unos momentos antes de volver a mirarlo.

—Tus amigos, ¿ellos qué piensan de esto?—preguntó, mordiéndose el labio inferior—. Debe de haber alguien que...

—Digamos que la gente prefiere no acercarse mucho a mí—interrumpió Wirt, medio sonriendo y medio fingiendo—. Pero está bien, no necesito amigos después de todo.

  El latino parpadeó un par de veces antes de negar con la cabeza.

Bueno, acabas de ganarte uno.

  Antes de que pudiera responder, la puerta del aula se abrió y una cabellera castaña se asomó. Una chica de ojos azulados grandes y perforaciones falsas asintió levemente.

—Hey, ¡Dipper! Creo que lo encontré.

「BITTERSWEET TRAGEDY」●.:•BillDip•:.●Where stories live. Discover now