Capítulo 14

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PETER

Habían pasado varios años del día en que supimos que nuestra gordita era una nena, que Lali iba a traer al mundo a nuestra Allegra. Con sus siete años de edad era una nena muy inteligente, extrovertida y amorosa. Inmediatamente se convirtió en la nena de mamá, hacia todo lo que su mamá hacia, si ella se vestía de rojo ella igual, entre otras cosas. Juntas compartían la pasión por el baile, ella la había acompañado desde bebé a Lali a la academia y siempre le enamoro ese mundo, cuando Alle le dijo a su mamá que quería bailar fue muy emocionante para ella e inevitablemente recordó a su mamá y ella de chiquitas. Cuando cumplió los tres años mi amor me dio la noticia que estaba embarazada nuevamente, los meses pasaron y Santino llegó al mundo, era un personalidad totalmente diferente a la de mi Alle, el era más tranquilo y tímido mientras que su hermana hacia mil cosas que hacían llamar la atención de todos. Santino era yo de chico, ambos jugábamos en el patio de casa al Rugby y lo llevaba a Alumni, pero tambien compartia la pasion por el baile. Alle y el eran muy unidos, Santino seguía a todo momento a su hermana mayor, y Alle hacia perfecto su papel. Eran muy compañeros, con Lali amábamos la relación de amistad que tenían.
Al año de Allegra nos casamos en Cariló, ese lugar era muy importante para nosotros y nos pareció un lindo lugar donde consumar nuestro matrimonio. Lleno de palabras de amor vivimos ese día, la fiesta la hicimos en la playa. Había sido una noche hermosa. La luna de miel se nos complicó ya que nuestra gordita era muy bebé, así que decidimos posponerla. Y a los tres años nos fuimos a Francia e Italia, y cuando volvimos Santi ya estaba creciendo. Habíamos pasado años increíbles, con algunos altibajos de por medio pero nada que fuera grave. Era increíble vernos a los dos y ver todo lo que construimos, el amor seguía ahí, ambos nos mirábamos como a los 17 años, con los ojitos y la sonrisa. Cada día que pasaba se me inflaba el pecho de amor por mi familia, ambos logramos esquivar cualquier piedra que nos pusieron en el camino y seguíamos recorriendo nuestro camino juntitos.
La academia fue tomando otro curso y cada vez crecían más con las chicas, famosos iban a tomar clases con ella y hace un tiempo Lali fue coach de una de las parejas del reality que conducía Marcelo Tinelli donde fue campeona, dónde le llevo gran parte de su tiempo donde tuvo que dejar por ese año la academia, sin descuidar a su familia, siempre estuvo al pie del cañón. Era excelente en papel de artista, novia, madre... era increíble en todas sus facetas. Mientras que la empresa quedó bajo mi responsabilidad cuando papá se fue y me dejó al mando de todo, nosotros también crecimos un montón y tuvimos que expandirnos cada vez lo que fue muy satisfactorio para todos nosotros. A mi lado tenía a Gastón que después de un tiempo viajo a Argentina junto con su novia y su hijo Romeo a quedarse a vivir acá.
Eugenia junto con Nicolás tenían a Rufina, quien se había convertido en la mejor amiga de Alle junto con Agustina la hija de Candela y Andrés. Tanto nosotros como ellos habíamos cumplido todos nuestros objetivos, y aún quedaban más por cumplir, del que estoy seguro que iba a hacerlos realidad al lado de Lali.

LALI

Cuando desperté tenía a Peter al ladito mio aferrado a mi, me moví sin despertarlo y fui a buscar a los chicos para hacerle el desayuno.

- Mamá -me decía Santino con toda la cara llena de harina, era el calco de su papá. Con los ojitos verdes, el lunar y el pelito todo despeinado- ¿podemos hacerle una carta a papá? -me sonrió con la sonrisa de Peter. Me acordé cuando dijo papá por primera vez, lloró toda una semana mi amor.

- Si, ma. ¿Podemos? - me decía Alle- ¿con muchos corazones rosas y flores, no ma? -me preguntó. Ella era mi compañera, me hacía acordar mucho a mi cuando era chica. Le sonreí.

- Claro que podemos hacerle una carta a papá voy a buscar papeles y crayones, guarda con el horno por favor no lo toquen que está muy cliente -dije bajando a Santino de la silla. Cuando volví habían hecho una guerra tremenda entre los dos, estaban cubiertos de harina, cuando los vi me reí al ver que intentaban esconder el desastre.- Bueno veo que mucho caso no me hicieron.

Trust On MeWhere stories live. Discover now