Te destruiré

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"Cuando seas mío."

No él no sería de nuevo de Louis, él no volvería con Louis.

Los días habían pasado y no había vuelto a ver al castaño y daba gracias a Dios por eso. Ahora tenía que estar concentrado en el caso de Regina Mistral, una mujer que fue violada.

-Aqui tienes tu café.. digo su café.- la rubia nerviosa entró dejando la taza en el escritorio.

-Investiga a Lorenz Sandoval, al parecer el fue cómplice junto con Rafael.- ordenó. -Y recoge ese cabello.- Ara asintió y salió de la oficina.

Harry bebió de su café y alejándose del escritorio suspiró. ¿Por qué después de mucho él tenía que volver? Esperaba que no se quedará en la ciudad o de lo contrario él se iría.

-Ara, investigas eso después, necesito que me des información de Louis Tomlinson, si está en la ciudad o no.-

-Como órdenes.- la rubia tenía miedo de preguntar porque de ese tipo pero le daba miedo la reacción de Harry que prefería no hacerlo.

Él iría a verlo si es que aún está en la ciudad, éste lugar es suyo y ni Louis o alguien más va a llegar a derrumbar lo que él construyó.

Louis no tenía nada que hacer ahí, el tornero finalizó con un empate y la final sería hasta dentro de dos meses, así que el castaño debía irse si o si.

-Aqui tiene lo que me pidió.-

[...]

¿Cómo olvidar el primer amor? No se puede y menos si es correspondido.

Le llevo mucho tiempo encontrar a Harry, se pasó años creando lo que es para enfrentar a Anne y ahora que lo tenía debía hacer lo que una vez juro.

Recuperar a Harry.

-Lou.- llamó el chico.- Está listo el desayuno.- Louis no escuchaba, estaba tan perdido en su mundo, sintió unas manos tocarle la espalda.-Ya preparé el desayuno.-

-Gracias Peter.- Louis sonrió. Estaba viendo el parque que se encontraba a las afueras de su departamento, recordaba los momentos que pasó con Harry.

-¿Qué ocurre cariño?- preguntó el castaño arreglando su gafas.- Haz estado muy raro desde el día del torneo.-

-Nada... Lo he pensado un poco y creo que quiero quedarme aquí.- Peter acarició su mejilla y asintió.

-Esta bien, creo que vendré a visitarte.-

-¿No te quedarás?-

-No Lou, tu tienes vida aquí... Mi vida está en Doncaster.-

-Eres estupendo.- el castaño no espero más y besó los labios de Lou.

Podrías ver a Peter como un tipo arrogante y presumido cuando en realidad es miel sobre hojuelas.

El timbre sonó haciéndolos separarse. Peter dejó a Louis en la cocina para ir a la puerta.

-Oh... ¿Qué hace aquí?- preguntó amablemente Peter.

-Crei que era el departamento de Tomlinson, disculpa.-

-No espera.- detuvo el chico al ver como el otro individuo empezaba a caminar.- Si es su departamento, pasa. Le diré que estás aquí.- el chico dejo pasar al rizado.

-¿Quien era Peter?- Louis sintió un balde de agua fría cayendo sobre él.-¿Qué hace aquí señor Styles?-

-Vine a charlas algunas cosas con usted pero veo que están ocupados.- dijo Harry al notar la mesa con el desayuno puesto.-

-No se preocupe, si quiere puede tomar mi desayuno. Iré hacer unas compras y podrán charlar agusto.- Peter tomó su abrigó y llaves, saliendo.

-Creí que no querrías verme.- comento Louis.

-He venido porque vengo a pedirte, no vengo a exigirte que te vayas de la ciudad.- Harry miraba con frialdad a Louis.- Quiero que te vayas de mi ciudad, estaba mejor sin ti.-

-No puedes pedirme eso. Ésta también es mi ciudad.-

-No me importa, hace mucho que no vives aquí así que te exigo lárgate de inmediato con ese debilucho.-

-Peter no te ha hecho nada para que lo insultes.-

-No me importa, largo de mi ciudad, largo de mi vida.-

El castaño no respondió ante los reclamos de Harry ¿De verdad lo odiaba tanto?

Sin pensarlo dos veces, fue directo a los labios del rizado. Harry, aunque su subconsciente le gritaba que no correspondiera, lo hizo.

-Vete Louis... Sal de mi vida...- pidió Harry.

-No puedo, ya te perdí una vez no pienso hacerlo dos veces.-

Ambos guardaron silencio, uno que era necesario.

-No pienso dejar lo que siempre me perteneció.-

-Entonces espero que sepas a lo que te enfrentas.- Harry alejo a Louis.- Porque te destruiré para que te vayas.-  finalizó azotando la puerta.

Cuando seas mioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora