Dicen que cuando uno es pequeño entra en la etapa de los "Porque". El pequeño individuo siempre pregunta lo que ya sea ha contestado, queriendo saber más.
-Harry... Ayúdame.-
El castaño trataba de subir las escaleras con el rizado encima de él. No habría problema en subirlo sino se pusiera de necio con querer irse con él. Y es que Harry no quería estar en su, quería ir con Louis.
-Suelta el barandal.- pidió el chico.
-Quiero ir con Louis.-
-Estás conmigo, vamos a tu habitación.-
-Nooo yo quiero... ir a la casa de Louis.-
-No.- el castaño tiraba del cuerpo de Harry.
-¿Por qué?-
-Porque necesitas dormir.-
-¿Por qué?-
-Porque mañana tienes trabajo.
-¿Y por qué tengo que ir a trabajar?-
-Porque necesitas dinero.-
-¿Y por-
-¡Harry basta!- gritó exasperado. El rizado hizo un puchero.
-Louehhh ya no me quiere.-
Louis no sabía si reír o consolar al rizado, cuando estaba sobrio era imponente, alguien duro y ahora, en esa faceta era alguien indefenso.
-Ya tranquilo.-
-¡Louehhh no me quiere!-
-Harry tranquilo... Harry.- Louis abrazó al ojiverde para que se calmará y éste aprovecho para tomar el trasero del castaño.- Eres un tonto.- de separó de él.- Vamos, necesitas dormir.-
-¡ADMITE QUE DESEAS TENER MI POLLA EN TU CULO!- gritó.- ¡ADMITELO!-
Harry era muy bipolar en su estado de ebriedad. Louis no sabía que hacer, nunca ha tratado con ebrios.
-Si Harry, camina.- el rizado se soltó del barandal y subió con ayuda de Louis.
-Yo te follarían mejor que ese cara de culo con lentes.-
-Hey, Peter no te ha hecho nada.-
-El simple hecho de estar cerca de ti me hace mucho daño.- sonrió.- Admite eso también Lou, admite que yo te follarían mejor que ese cara de culo con grano.- Harry se acercó muy cerca a los labios del ojiazul, apunto de besarlos.
-Harry...- la voz delgada de una chica hizo que Louis la mirara.-Oh Dios mío.- Ara se acercó rápidamente hacia Harry para tomarlo del brazo.
-Sueltame.- se quitó Harry.
-Sólo trato de ayudar.- habló tímidamente.
-Tengo a mi Louis y no necesito tu ayuda.- se aferró al cuerpo de Louis.- Lárgate.-
-Harry.-
-¡Largo!- gritó el rizado. La chica asintió y salió de ahí.- Ahora que tengo a Louis ya no follaremos.- rió.
Louis, hasta el momento no mencionó palabra alguna. Dejó que el rizado siguiera insultando a la chica cuando ésta ya se había marchado.
Al llegar a la habitación de Harry, lo acostó y retiro la prendas con las que le pensó que el rizado estaría incómodo.
-No se si lo recuerdes pero yo dormía desnudo.- sonrió el rizado.
-No te desnudare.-
-Oh vamos, te estoy dando la oportunidad de que te aproveches de mi.-
-Que oportunidad.- rió Louis.
Pasó sus manos por la camiseta de Harry y la sacó de su cuerpo, lo mismo hizo con su bóxer.
No mires, no mires, no mires.- Eso se decía a si mismo para no mirar lo que Harry tenía entre sus piernas.
-Sé que quieres mirarlo.- el rizado tomó la mano de Louis y la posicionó en su miembro.
Louis mantenía sus ojos cerrados, no estaba bien aprovecharse de un ebrio y más cuando es Harry.
-Al diablo.-
El ojiazul mando a la mierda todo subiendo al abdomen de Harry y besando sus labios.
Con desesperación, Harry sacó la chaqueta de Louis junto con su camisa. Desabrochó el pantalón y en cada beso lo fue bajando.
-Necesito tenerte Louis.-
-Ya me tienes Harry.- sus labios se unían con más intensidad cuando las palabras trataban de separarlos.
-Necesito tenerte para poder dejarte.- Louis paro sus besos.- Necesito follarte para dejar esta calentura.-
Y como balde de agua fría, Louis sintió su cuerpo enfriarse.
El rizado quería saciar su placer, quería tener sólo su cuerpo.
-Porque tu cuerpo es un pecado, tu cuerpo es el fruto que debo tocar para poder liberarme de esta obsesión.-
