Between love and hate [Kellic]

✿d i e z✿

✿K e l l i n✿

—¡Ow, déjame tomarte una foto, bebé!

—¡No!

Comencé a correr por toda la sala, tratando de huir de mi madre, quien al verme con traje se puso como loca y quiso tomarme foto tras foto. Aparte ella estaba bastante emocionada de que por fin fuera a ir al baile con alguien que no fueran mis amigos. Le emociona y conmueve el hecho de que yo, su “bebé”, esté creciendo.

Por fin he regresado a la casa de mi madre. La extrañé mucho, y no sólo a ella, a todos en ésta casa en general. También extrañaba mi habitación y la mini dulcería, y al parecer, Victor extrañaba su caja de cartón, ésa que está debajo de mi cama.

—¡Lo tengo, señora! —Erika me tomó de la cintura e impidió que siguiera corriendo. Intenté zafarme, pero no pude, ella es más fuerte—. ¡Rápido, tome la foto!

—¡Esto es traición, Erika! —le reclamé mientras me cruzaba de brazos, tratando de fingir enojo.

—Ay, hijo. ¿Qué tiene de malo qué quiera tomarte fotos? Tu amas la fotografía —mi madre me picó la mejilla y comenzó a tomarme foto tras foto—. ¡Mira, mi bebé! Qué hermoso. En serio, no sé qué te molesta.

—Tú subes las fotos a Facebook, y luego mis tías las comentan con cosas como… “¡Qué lindo está tu hijo, Mary! Ya está grande, aún recuerdo cuando era un bebé caga pañales, jiji. Ay, dile que se corte el cabello. Besos”, y lo peor es que me etiquetas y mis pocos amigos ven eso, y luego se burlan de mí —negué con la cabeza mientras mi madre y Erika se reían como locas. ¿Acaso es chistoso? No. Claro, cómo ellas no han pasado por algo así, se burlan—. Te dejaré tomarme fotos con dos condiciones… uno, cuando Vic venga, detente. Y, dos, no las subas a las redes sociales.

Mi madre asintió, entonces le pasó la cámara a Erika y ella nos empezó a tomar fotos juntos. No puedo culpar a mi mamá, soy su único hijo y sé que quiere miles de recuerdos conmigo. A veces me siento mal por el simple hecho de que cuando me case o me vaya a vivir con mi pareja, ella se quedará a vivir sola. Me gustaría que volviera a encontrar el amor.

Ahora, sigo sin creer que Vic y yo en serio vamos a entrar por la puerta del gimnasio, juntos, como si fuéramos pareja. Lo peor es que el muy idiota es popular, y eso significa que vamos a estar en la boca de muchísimas personas. Eso es lo que no me gusta de estar con él, es decir, no quiero chismes acerca de mí o cosas por el estilo. Prefiero seguir así, siendo un gay rarito con pocos amigos, yupi.

En eso me llegó un mensaje de Vic.

«Fuentes de agua negra🌚: No me gusta mi apodo»

«Tú: Ah, qué sad»

«Fuentes de agua negra🌚: Tengo uno mejor»

“Fuentes de agua negra🌚  ha cambiado su apodo a Fuentes la tiene negra”

Me sonrojé y no pude comenzar a reírme. Mi madre y Erika me miraron raro, pero luego les dije que era Vic y me dejaron hablar con él. Ellas se fueron a la cocina, y yo me quedé en la sala mandándome mensajes con él. Me gusta hablar con el negro, es divertido.

«Tú: JSJAJG, ¡Casi me ahogo, idiota!»

«Fuentes la tiene negra: Ay, es una simple bromita :3. Oye, bebé, sal porque estoy afuera, esperándote. Ven a mis brazos y dime que me amas»

«Tú: Qué cursi. A veces pienso que eres más gay que yo»

«Tú: Bueno, ya voy»