does he know? ; camren.

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POV Austin

Me fui hacia otra mesa creyendo que Camila iría a besarme pero no, ella se acercó a Lauren y luego se fue de largo. Como sea, ya vi a mi chica de ojos verdes, ahora debo ir al estudio.

POV Camila

Tengo el dinero para pagarle a Lauren y nunca más tener que hablarle, pero ella no lo quiere, se cree tan perfecta con su cabello perfecto, sus ojos perfectos, sus perfectos dientes, sus perfectos modales, sus perfectos libros y su perfecta vida, se cree mucho y no sabe nada, si quisiera consumir drogas lo haría pero no quiero un problema más en mi vida, tan idiota no soy.

— ¿Porque usaste mis extensiones? —Ericka entró a la sala de maquillaje gritando.

—Porque quise —la vi a través del espejo, pero seguí con lo mío.

— ¿Qué te crees ah? —me agarró del brazo y me hizo quedar en frente suyo.

—Yo llegué antes así que las tomé —me zafé— Ya relájate, las dejo desp... —interrumpió.

— ¡No Camila! Me tienes harta —gritó como psicótica y me sacudió de ambos hombros.

— ¡Déjame! —dije con incomodidad.

—Esto es lo que te mereces —me tiró una bofetada y sentí que mi cara se volteó por completo— ¡Eres una mierda Camila! —me tomó del cuello de mi blusa y me tiró al suelo.

— ¡Suéltame! —le grité sin poder defenderme.

— ¡Esto es lo que mereces! —Se lanzó sobre mí y sentía todo su peso en mi abdomen— ¿Te crees que puedes hacer lo que te dé la gana no? —empezó a tirar de mi cabello y esto hizo que me empeorará el dolor de cabeza, quise defenderme con las manos o las piernas pero ella me tenía neutralizada.

— ¡Me duele déjame! —grité.

— ¿Ah sí? ¡No me importa! —continuaba tirando de mi cabello y con algo de esfuerzo logre separarla de mí.

—Déjame, es enserio... —dije agotada sin poder abrir bien los ojos ni vocalizar las palabras— Ya, déjame —respiraba rápidamente tomándome la cabeza.

—Suplícame —me jaló del brazo para pararme y me puso contra la pared.

— ¡Déjame! me estás haciendo daño —apreté mis manos en su cintura para alejarla pero ella hizo lo mismo en mi cuello.

— ¿Y crees que me importa?

—Por favor suéltame —dije con el aire cortado.

— ¿Qué? ¿Cómo? No escuche —disminuyó su fuerza en mi cuello.

—Que me sueltes —dije en voz baja con los ojos cerrados.

— ¿Qué más?

—Por favor... —susurré.

— ¿Ah? No oigo —quitó las manos de mi cuello y se apuntó la oreja negando con la cabeza.

— ¡Por favor! —mi espalda se deslizó por la pared y caí como un peso muerto.

— ¡Suplica más! —me cogió de nuevo de mi blusa con la intención de pararme.

— ¿Qué te pasa estás loca o qué? ¡Déjala!

Lauren rápidamente y apartó a Ericka poniéndose delante de mí.