My Little Cat |YoonMin|

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A la mañana siguiente dos personas dormidas profundamente se encontraban en la cama de una plaza y media que estaba en medio de la habitación.

El pequeño chico con rasgos mininos mantenía enredadas sus piernas entre las del mayor, al igual que su colita, la cual estaba al rededor de la rodilla de su hyung.

El mayor tenía uno de sus brazos en la esbelta cintura del menor, mientras su mano sobrante se enlazaba en las hebras castañas del chico junto a el. Los brazos del mencionado chico de menor edad abrazaban fuertemente la espalda del contrario, con temor a que éste se fuese.

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YoonGi

Un molesto ruido retumbaba dentro de mi cabeza, junto a algo que se removía entre mis brazos inquietamente y unos pequeños sonidos dulces se escapaban de ese "algo".

Gruñi ante el horrible ruido persistente que hacía eco dentro de mis oídos y estire con fatiga mi brazo izquierdo hacia la pequeña mesa de noche junto a mi cama. Era claramente la alarma. Apagué ésta y me devolví para abrazar nuevamente la pequeña persona con quien dormía esa mañana. Hundí mi nariz entre sus cabellos inhalando el aroma a caramelo que tenía éstos. Me quede hipnotizado con ese aroma durante un largo rato inhalando y exhalando con ansias para que ese dichoso aroma embriagase mi fosas nasales.

...ung ...yung... ¡Hyung!

Escuche esa suave y melosa voz junto a algo que me sacudía levemente. Fue cuando me di cuenta que JiMin se encontraba sobre mi regazo.

—Hyung ya despierte. ¡Tiene trabajo por completar!— musitó el chico que se encontraba sobre las piernas del mayor, mientras aún agitaba al contrario.

—Ya voy, ya voy. Tan solo vuelve a dormir, es muy temprano—. Tomó al castaño por la cintura el cuál estaba posicionado sobre sus piernas, provocando que cayera a su lado para volver a abrazarlo con todas sus extremidades.

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El pequeño chico con rasgos mininos se encontraba un poco incomodo por el simple hecho de que su "Amo" lo estuviese abrazando de tal forma como si él fuese una almohada. Pero por otro lado, podía inhalar el aroma varonil que desprendía el mayor, frotando su nariz contra toda la extensión de su cuello y de vez en cuando frotar su cabeza contra el pecho del contrario.

Mientras aún olfateaba el perfume natural del mayor, persiguió la fragancia con su nariz hasta llegar a la mandibula y mejilla de YoonGi, por un momento se detuvo observando cada pequeña facción del rostro de su Hyung, pasando por sus ojos, nariz, mejillas y por ultimo sus labios, esos detalldos labios que lo llamaban tanto. Se acerco de a poco a estos, rozandolos con los dos esponjosos y gruesos suyos, sintiendo la suavidad de aquellos finos y rosados belfos. Quería llegar a apreciar más la suavidad que poseían estos, pero no debía hacerlo, JiMin pensaba que a su preciado Hyung no le gustaría para nada, y no quería volver a causarle problemas luego de la pesadilla de anoche y su pequeño intento de querer despertarlo.
Se escondió en el cuello de YoonGi sintiendo su corazón correr una maratón, sentía que éste saldría de su pecho disparado, con la vergüenza y nervios hasta las nubes. Buscando tranquilizarse con el perfume del mayor, lo cuál no obtuvo resultado, desde ya por que el aroma del contrario le hacía estremecer y tan solo buscar más del susodicho.

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Transcurrido un rato desde que JiMin intento hacer que YoonGi se levante de su cómodo colchón, el dichoso chico mayor se despertó nuevamente si esa persona a la cual abrazaba como si de una almohada se tratase. Gruño al sentir que éste no se encontraba, y por el frío del suelo contra sus pies.

Camino hasta la cocina pensando que el chico que buscaba estaría allí, sin tener resultado. Busco en el baño, donde la puerta se encontraba entre abierta y dentro de éste se escuchaba una dulce voz aguda tarareando algo. Pero lo que le extraño es que el sonido de la ducha o el agua salpicando contra el suelo no se oía.
Y sin previo aviso se adentro en el baño.

-Oye JiMin-ah...

Se arrepintió de no haber tocado la puerta en ese momento, los colores subieron hasta pintar por completo sus mejillas de un tono carmesí fuerte.
El motivo de esto, JiMin se encontraba desvistiéndose y metiemdo unas cosas en la pequeña lavadora que se encontraba dentro del casi estrecho baño.
El antes mencionado chico, se volteo no casi instantáneamente, dejando al descubierto su delgada espalda repleta de marcas y cicatrices. Se quedo inmóvil al mirar cada una de esas marcas que manchaban su espalda, quería borrar cada una de ellas, cada una de esas horribles cicatrices, para luego poder hacer pagar a quien le causo todo aquel dolor, pero... No sabia como.

El chico castaño al ver al pelinegro se asustó y avergonzó al instante, intentando cubrirse con la camiseta que YoonGi le habia prestado para que se vista cuando apenas llegó.

-¡Y-YoonGi Hyung! M-me asusto- hablo JiMin murmurando casi inaudible lo ultimo.

—Lo siento. Solo quería comprobar si estabas aquí. Y, quiero hablar contigo luego ¿si?— el contrario tan solo asintió y se dispuso a terminar lo que estaba haciendo hace unos momentos, para luego tomar un baño caliente y pedirle a su Hyung si podría secar su cabello como la ultima vez. Le hizo recordar que una vez un hombre le dijo y le enseño en si que cuando tuviese un "Amo" debería decirle que lo mime mucho y cuales eran cada una de las facetas de un híbrido, por que JiMin era consciente de lo que era, y de lo que le habían hecho.

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Disculpen el capítulo corto, no he tenido muchos ánimos ni tiempo de escribir, y la poca inspiración no ayuda, y menos Wattpad que se le da por corregir los guiones de dialogo, el formato de texto y alguna que otra palabra.

Me tiene podrida <3

Muchas gracias por el poco apoyo que le dan, pensé que siquiera una persona iría a leer esto.
Nos leemos.

•Moon🌙