No caigo por ti// Completa

16

Cuando llego a mi casa mi mamá sale bastante preocupada de mi casa.

— ¿Qué pasa? — pregunto.

— Entra — okay, eso ya me asusta — hay un grave problema.

Ya dentro de mi humilde morada, ella voltea bastante alterada.

— ¿Cuál? — respondo.

— Tus tíos vienen de visita — la miro confundida — la familia de tu padre.

No he sabido de su familia, ni de él,  en ¿Cuánto tiempo? Ah si, nunca, solo conozco a una tía que es una buena persona y la amo. Ella es muy atenta o bueno lo era cuando venía. Ella fue la única que no se opuso al matrimonio de mis padres o eso fue lo que me contó mi mamá.

— ¿Y qué tiene? Quieres que les haga un altar o qué.

— No seas grosera.

— Mamá nunca les interesaste a esas personas y ahora vienen porque si —  reclamo.

— Tal vez cambiaron — me molesta que sea tan positiva.

— Ajá eso pasó, porque no te das cuenta que tal vez sólo son unos interesados.

— Summer — eleva la voz.

— Que mamá.

— Prometeme que te comportaras.

— Te prometo no estar aquí cuando lleguen.

— ¡Summer! — esta vez me grita — tú me vas a estar aquí y vas a ser la chica buena que aparentas ser o te las vas a ver conmigo. 

— Lo que tú digas — blanqueo los ojos.

— Ahora quiero que te arregles que vamos a ir al salón para que te veas bonita en la cena.

— ¿Cena?

— Si cena es dentro de unos dias, vamos a arreglarte esas cejas de mono y a depilarte hoy, mañana iremos de compras por un vestido ..  — sigue hablando. Me pierdo en depilarte.

— Summer me estas escuchando — chasquea los dedos.

— Ajá, me voy a bañar — corro apurada hasta mi habitación.

......

Estuvimos toda la bendita tarde en el salón realmente fue estresante en ese lugar. Lleno de chicas mimadas, pensando que ya tenían la vida resuelta. Fue básicamente aburrido.

— ¿Te divertiste? — me pregunta Margareth, más conocida como mi madre.

— Un montón — pongo cara de pocos amigos.

— Summer ya te lo he dicho no quiero que estés con esa cara, esto es algo.. bueno, poder ser la familia que siempre has querido.. — no la dejó terminar.

— Que yo siempre he querido mamá, no será la que tú siempre quisiste — ella no dice nada más y se larga, dejándome sola en la habitación.

Genial..