entrelazados

capitulo 31

Mientras caminamos hacia el auto donde esta James y subimos Dean se despide de mi ya que se había volado del trabajo, cuando estamos a punto de llegar el teléfono de James comienza a sonar y él contesta rápidamente.

—¿Quién? —Silencio—, ¿Cómo mierda conseguiste mi número? —Amelia y yo nos miramos—, no me interesa salir contigo nunca más en mi vida ¿Para qué me vuelvas a robar? —y Amelia y yo supimos quién es—, sí, conocí a alguien más —dijo mirando al retrovisor a Amelia—, y es millones de veces mejor que tu —y yo tuve que morderme los labios para aguantar la risa—, ¿No me crees? Que mal por ti porque es así —silencio—, bueno no me creas, es tu jodido problema no mío —silencio nuevamente—, ¿Y a mí acaso me interesa que tus padres no tengan dinero? —silencio y después comienza a reír—, Meredith, tus lagrimas ya no tienen ningún efecto sobre mí ¿Por qué te esfuerzas? —Silencio y después alejó su teléfono de su oído—, tu hermana me colgó —dijo con algo de humor.

—Con todo lo que le dijiste hasta yo te hubiera colgado —se burló Amelia con una sonrisa.

—Al parecer tu hermana está desesperada por dinero ¿Así de grave es? —preguntó James.

—Perderán la casa, así de grave —le respondí apoyándome al hombro de Amelia.

James silbó sorprendido.

—Sólo esperemos que tu hermana no haga ninguna estupidez.

—Eso está un poco difícil, lo único malo es que ya no me tiene a mí para culparme de sus problemas, lo más probable es que culpe a mi padre ahora.

—Tu hermana es demasiado descarada —dijo Amelia saliendo del auto, ni siquiera había notado en que momento llegamos, pero me sorprende aún más ver el auto de Dean parqueado afuera.

Camino hacia el interior de la casa ya que Amelia y James se habían quedado hablando afuera, las chicas que siempre están aquí me asesinan con la mirada cuando entro pero prefiero no prestarles atención, subo a la habitación y cuando estoy a punto de abrir la puerta Dean la empuja para impedirme abrirla.

—¿Qué pasa? —pregunté algo confundida.

—Espera un minuto —dijo rápidamente.

Pongo los ojos en blanco y espero a que abra, cuando lo hace tiene una sonrisa de oreja a oreja, entro a la habitación y Dean me señala la pared para que mire la cabecera de nuestra cama, estoy a punto de llorar cuando veo lo que hizo, es un enorme cuadro que cubre casi toda la pared con varios portarretratos despegándose de una foto central junto con la palabra "together" tallada en madera, la foto central es una foto de Dean y yo sentados en la sala, y los cuadros que salen de este tienen mis fotos de bebé junto con fotos de bebé de Dean quien rápidamente reconozco por su color de ojos y su cabello, y encima de todas estas fotos en lo más alto hay un portarretrato vacío.

—Cuando fuimos a tu casa noté que no había ninguna foto tuya de bebé en las paredes, todas eran de tu hermana —me agarró de la cintura y pegó mi cuerpo al suyo—. Tú te mereces más que un portarretrato cariño, te mereces toda la pared.

Me giro rápidamente y le doy un abrazo fuerte acompañado de muchos besos en su mejilla y sus labios.

—¿Y el portarretrato vacío? —pregunté señalándolo.

—Es para colocar la primera foto de nuestra princesa —dijo emocionado.

Lo jale hasta la cama sin soltar sus labios pero él se separa de mí de un momento a otro para mirarme.

—¿Cuánto tendré que esperar para saber si estas embarazada? —preguntó haciendo un puchero.

—Creo que son más o menos 15 o 20 días —le respondí acariciando su mejilla.

—¡¿Por qué tanto?! —preguntó contra mi pecho.

—Ten paciencia amor —lo animé abrazándolo con fuerza.

Él me devuelve el abrazo pero cuando nuestras piernas se unen un suave gemido de dolor sale de mi boca, toque mi pantalón y aún esta mojado, Dean se separa de mí y me quita el pantalón dejando al descubierto mi muslo enrojecido, se levanta rápidamente y alcanza una pomada fría que está en el baño, lo aplica suavemente sobre la quemadura y su forma de aplicarla tan delicada que me esta provocando algo de sueño.

—Si quieres dormir duerme, hoy fue un día largo para ti —dijo sin dejar de masajear.

—Gracias cariño —le respondí mientras bostezaba.

Y rápidamente quede dormida dejándome llevar por sus caricias.

Cuando abro los ojos todo esta completamente oscuro y el brazo de Dean me rodea con fuerza, mi estómago comienza a gruñir exigiéndome comida así que decido levantarme para buscar algo de comer, cuando llego a la cocina Meiling esta terminando de limpiar todo, en el momento en que me ve me da una cálida sonrisa y rápidamente me sirve algo de lasaña.

—¿Cómo le fue con su madre, señorita? —preguntó con una sonrisa.

—Mal... terriblemente mal —dije antes de empezar a comer.

—¿Por qué? ¿Qué pasó? —preguntó sentándose frente a mí.

Y así le expliqué todo lo que había pasado en estos días incluyendo lo de hoy.

—No joven, definitivamente ellos son todo menos una familia —concluyó mientras recoge mi plato.

—Lo sé y es frustrante que mi propia familia actué así conmigo, según mi madre es porque fui un dolor de cabeza pero... no lo sé... siento que hay algo más.

—¿Cree que sea por culpa de su hermana?

—Por supuesto que es culpa de Meredith.

—¿Y si no es así?

—Entonces en definitiva estaré mas confundida de lo que ya estoy.

Cuando termino de comer me despido de ella y rápidamente subo a la habitación, llego y abro la puerta pero visualizo a Dean hablando por teléfono.

—Si madre no te la había presentado porque... —silencio—, si la conocerás antes de casarnos mamá, cálmate —silencio nuevamente—, si yo la llevaré —rueda los ojos y yo lo miro con una sonrisa—, ¡Oh no! nada de mostrarle tu colección de fotos de James Dean —eso explica sus nombres—, Emily no necesita enamorarse de James Dean, me tiene a mi, mama —me guiñó el ojo—, claro que soy mas hermoso que James Dean —volvió a rodar los ojos—, bueno que Emily diga mañana entonces —me atrajo hacia él dándome un fuerte abrazo—, bueno mama cuídate mucho, descansa, llegaremos pasado mañana —y colgó.

—Así que ¿James Dean? —pregunté burlona.

—Vive frustrada porque nunca pudo conocerlo —dijo antes de darme un beso—, ¿Dónde estabas? —preguntó limpiando algo de salsa que tenía en la boca.

—Estaba comiendo algo, moría de hambre.

—Me parece perfecto, tienes que alimentarte bien y a mi bebe.

—Nuestro bebe —lo corregí.

—Emily te amo, lo sabes cierto —dijo agarrando mi rostro —. Así que prepárate para lo más fuerte que vivirá nuestra relación hasta ahora... conocerás a mi madre.

—¿Acaso es malo? —pregunté confundida.

—Sólo debes tenerle paciencia, ha soñado con que sus hijos se casen y le den nietos desde que James y yo nacimos, además siempre quiso tener una niña pero no pudieron tener más hijos así que... puede ser algo intensa, aparte no tiene mucho filtro al momento de hablar.

—No te preocupes, sabré manejarla —traté de tranquilizarlo.

—Si te vuelve loca o se pone molesta por favor avísame —me pidió mirándome a los ojos.

Solo afirmo con la cabeza y al final de la noche hicimos nuestro quinto intento para que yo pueda quedar embarazada.

A la mañana siguiente mientras almorzamos James se ve aún más nervioso que Dean, su madre le exigió que le presente a Amelia aun cuando él insistió en que apenas se están conociendo, Dean no deja de decirme que tenga paciencia con su madre y que solo fuera yo misma, me esta colocando algo nerviosa ahora.