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El día siguiente no fue mejor. Tocaban clases y por ende eso significaba que tendría a Min Yoongi de compañero (a mi lado de nuevo) y por varias horas en un mismo espacio encerrado... Respirando el mismo aire...Lo sé...Incómodo.

Es por eso que decidí madrugar y hablar con el maestro McLaren para un cambio de compañero.

Sip. Tal vez estaba exagerando las cosas... Pero ahora mismo esa me parecía la idea del millón.

Así que al entrar por las puertas de la escuela lo primero que hice fue buscar la oficina del maestro McLaren.

-Buenos días...

-¿Qué quieres Jeon?- McLaren ni siquiera se tomo la molestia de apartar la vista de los exámenes que revisaba.

-Yo... Bueno, yo quería saber si se puede cambiar de compañero de pupitre...

McLaren detuvo su bolígrafo a mitad de una gran "X" y me dedico toda su atención.

-¿Acaso escuche bien? ¿Quieres cambiar de compañero?

Asentí.

-Sólo para rectificar... ¿Quieres que cambie a Min...?

-O a mí, no importa. Soy alto por lo que puedo ver desde atrás y...

-Solo hay dos formas de que te mueva y una de ellas es que tu compañero te este amenazando o de alguna forma haciendo daño de lo contrario no puedo. ¿Min Yoongi te ha golpeado?

Suspiré.

-No.

-¿Entonces?

-¿Cual es la otra forma de que me cambien?

-¿Ah?

-Dijo que hay dos. Una que me golpearan o hicieran daño... ¿Y la otra?

-Que tu compañero también quiera el cambio de pupitre.

Bufé irritado.

¿Como iba a convencer a Yoongi de venir a pedir el cambio?

-En serio quiero el cambio de pupitre...

-Si eso era todo lo que querías decirme puedes retirarte, nos vemos en la clase Jeon.

-¡Por favooor!

El maestro McLaren me dedicó una cara de pocos amigos y cuando iba a responderme la puerta de la oficina se abrió de golpe.

-Deja de rogarle, luces patético. Si lo que quieres es el cambio de pupitre deja de preocuparte por eso, yo también lo pediré.

McLaren intercambio miradas entre nosotros.

-Si mal no recuerdo hace unos días estaban en el salón tirándose indirectas y ahora quieren un cambio de pupitre?

-¿Lo hará o no?

-Muy bien...- McLaren levantó su bolígrafo y me apuntó-  Tú cambias con Jimin y tú- señaló a Yoongi- Cambias con Hoseok. Ahora largo de mi oficina.

-¡¡No!! ¡Jimin no! Odio a Jimin - chillé.

-Y yo odio a las personas que vienen a gritar a mi oficina a buena mañana. Así que... Lo diré por última vez... Largo.

Yoongi salió de la oficina como una bala.

Yo salí a regañadientes.

***

Cuando las clases comenzaron y me coloqué en mi nuevo asiento lo hice sin querer hacerlo realmente. 

Jimin me reclamó.

Hoseok me miró mal y chocó su hombro con el mío al pasar, pero decidí ignorarlos, a ambos.

Honestamente me estaba arrepintiendo de la elección arrebatada que le había pedido al profesor McLaren. Hasta parecía que él también se había enojado conmigo ya que volví a hacer su chico favorito para sus preguntas al aire.

-¡Jeon! ¿Cuál es la biomolécula más abundante en los seres vivos?

¿Bio...qué? ¿Cuándo habíamos recibido si quiera ese tema?

-No lo sé.

-Entonces...¿Cuál es la biomolécula que contiene la información genética de cada ser vivo?

Miré hacia otra dirección con cólera.

-No soy el único alumno aquí. ¿Porqué no le pregunta a otra persona que claramente si estudió y sabe acerca de las estúpidas biomoleculas? 

Silencio.

-Fuera de mi clase.

Cerré el libro de golpe y levanté la mochila lo mas rápido que pude.

Antes de salir del salón miré de reojo hacia el pupitre vacío en donde Yoongi tendría que a ver estado sentado. Por primera vez él no había entrado a una clase. Y por primera vez a mi me estaban sacando de una. Genial.

Por último mi mirada viajó hacía Taehyung y Namjoon. Ambos se miraban bien juntos... Lucían preocupados por mí... Como si quisieran hablar conmigo.

Sin embargo cuando me buscaron después de clases los evadí y me fui casi corriendo a la casa de Taehyung.

Había tomado una decisión.

***

El timbre retumbó por toda aquélla gran casa.

Sostuve con nerviosismo y con mucha fuerza el agarre de la maleta. Y a pesar de que creí que no me abriría, salió y  me estudió fríamente de pies a cabeza.

-Lo siento mucho mamá- mi visión comenzó a ponerse nublada.

Tenía ganas de llorar y no sabía exactamente el porqué. O tal vez si lo sabía pero no lo quería aceptar.

Volver con mis padres no era exactamente la mejor idea del mundo. Pero quería tiempo para pensar y estar en casa. Estar aquí me hacía sentir como si tuviera una gran barrera protectora que me ayuda a olvidarme de todo lo malo que pudiera pasar afuera.

Una gran barrera en la cual nadie podía entrar. Ni siquiera Min Yoongi.

classmate; yoonkookOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz