• Capítulo cuarenta y ocho "Segundo día en Daejeon" •

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_____.
Al día siguiente me levanté un poco temprano o bueno alguien en específico no me dejo dormir por estar de meloso molestando. Entré al baño para ducharme, al salir me di cuenta que no había llevado mi ropa por lo que tuve que salir por ella aprovechando que Sehun no estaba en la habitación supongo que debe andar en la cocina o sala.
Estaba poniéndome la ropa interior cuando el antes mencionado entra por la puerta.

—Por lo menos avisa que vas a entrar, amor —dije cubriéndome con la toalla.
—¿Qué tiene de malo que entre así? Como quiera, ya lo he visto todo —dijo en tono inocente según él. Me dio risa ya que tiene razón.
—Buen punto —respondí quitando la toalla y dejando ver mi conjunto de encaje negro.

Continúe cambiándome mientras Sehun se recostaba en la cama de nuevo, el muy flojo solo se había puesto un pants negro ni siquiera traía puesta una camiseta o algo, dejando a la vista sus abs "que por cierto tiene muy trabajados"  desde ayer hemos tomado algo más de confianza entre ambos; y creo esta bien o al menos yo no lo veo como algo mal o indebido. Al final solo me puse un pants también flojo solo que en color gris y un top negro, mi cabello lo ate en un moño todo despeinado.

Me acosté en la cama boca abajo con mi celular en mano. Puse una almohada  para recargarme en ella, mientras navegaba por internet encontré una foto de una playa negra hermosa que me emocioné y grité asustando a Sehun en el acto.

—Bonita, me asustaste —se rió.
—Perdón, mi amor pero es que... ¡Ahh! Yo quiero ir ahí ¿Me llevas? ¿Si? —le mostré la foto de esa playa y rece para que fuéramos ahí.
—Es...negra. Ahora veo porque amas tanto ese color, ¿Dónde queda esa playa? —dejo a un lado su celular para acomodarse de costado recargado en su codo.
—En...déjame ver —busque más información. —Ay...está lejos —"más triste" pensé.
—¿Por qué? ¿Está muy lejos? —quito un mechón rebelde que se atravesó.
—De Seúl, si. La playa está en Hawaii...—agache la mirada.
—¿De verdad quieres ir? —pregunto.
—Si...se ve que es una playa muy hermosa y tranquila —seguí viendo más fotos de esa playa.
—Entonces, vayamos. Vamos a esa playa. —dijo. Me dio tanta emoción que me lancé sobre él llenándolo de besos.
—Eres el mejor, enserio. Pero esta vez no iremos solos, quiero que mis hermanos y tus amigos vayan también. —me quité.
—Me parece buena idea, linda. —toco mi nariz con su índice.

Volvimos a quedar en un silencio. El día se estaba pasando rápido y muy aburrido, tenía ganas como de salir o hacer algo fuera de estas 4 paredes.

Suspiré y deje mi celular y me acosté boca arriba esta vez. Volteé a ver a Sehun y éste estaba muy entretenido viendo alguna serie en la televisión, yo quería salir pero al parecer el no tiene planes.

—¿Aburrida? —pregunto sin verme. Pero pude notar un tono divertido en su voz.
—Como no tienes idea, no le entiendo a tu serie amor. Y no se qué más hacer para no aburrirme —tape mi cara con la almohada.
—¿Y piensas salir así vestida? Sino tendré que asustar a muchos, hermosa —quito la almohada que cubría mi cara.
—¿Saldremos? —asintió.
—Si, pero antes... —como ambos estábamos de costado frente a frente. Tomó mi pierna y la puso en su cintura.
—¿Qué rayos...? ¿Y eso como por qué? —me reí.
—Porque quería sentirte cerca —su respiración chocaba con la mía. Y de repente me estrecho entre sus brazos pasando su rostro por mi cuello. En ese abrazo pude sentir el cariño que me tiene, así como yo lo tengo por él, no se que haría sin este hombre en mi vida junto a mí. Suena muy cursi, lo sé; pero Sehun es una persona demasiado importante que entró en mi vida cuando menos lo espere. Me demuestra día a día lo mucho que le importó, me hace sentir como una persona totalmente diferente a la que era antes de conocerlo.
—Aiñ, que bonis —lo abracé de vuelta. —¿A dónde iremos?
—No te diré, solo ponte más hermosa de lo que eres ¿De acuerdo? —asentí.

Sehun.
Mi novia se levantó para irse supongo que a cambiar. No sabía muy bien adónde la llevaría pero haber que se me ocurre, tal vez podamos ir a una plaza que haya por aquí cerca y comprar algunas cosas o ir al cine. El lugar donde está la cabaña o bueno cabañas, no está muy lejos de la sociedad por así decirlo.

Me cambié por un pantalón café claro junto a una playera blanca de manga larga para así no llevar suéter y por último mis tenis negros converse. Cepillé mi cabello hacia atrás para enseguida ponerme una gorra gris.

—Bonita, ¿Ya estás lista? —toque la puerta del baño donde ella estaba.
—Voy, solo me falta una cosa más y salgo —grito desde adentro para que la escuchará.
—Esta bien, te espero —me fui a la sala por algo de jugo pues tenía sed.

Cuando dejé el vaso sobre la mesa, ____ justo venía saliendo del cuarto ya vestida. Traía puesto un pantalón negro con un cierre en dorado, una blusa blanca que tenía escrito "PARIS 1968"  y no podían faltar sus tenis negros converse también.

—¿Acaso me copiaste? —bromeé con ella. Pues traíamos la misma ropa solo que mi playera era totalmente blanca.
—Tu me copiaste a mí, bueno a excepción del pantalón —me vio de pies a cabeza. —fuera de eso...es como si trajeramos ropa de pareja —se rió. Eso me dio una buena idea. —¿Por qué no...?
—¿Compramos ropa de pareja? —dijimos los dos al mismo tiempo.
—No es mala idea eh, ¿Entonces iremos a la plaza? —prosiguió ella.
—Si, y de paso iremos al cine. ¿Vamos? —estire mi mano hacia ella.

La tomó y salimos de la cabaña. Como no sabíamos las calles de Daejeon, tuvimos que preguntar a unos habitantes de ahí que con su grata ayuda logramos llegar.

—Pensé que no llegaríamos —dijo mi novia una vez que estábamos en la entrada a la plaza.
—Pero ya vez que pidiendo ayuda, todo se puede —bese su mejilla. —Anda, entremos.

Volvimos a tomarnos de la mano para que todos los hombres que se le quedaban viendo a mi novia supieran que ella es mía y solo mía. Así como también esas mujeres que hacen lo mismo conmigo, solo soy de ella. Entramos a varias tiendas de ropa para pareja, habíamos quedado que si compraríamos aunque fuera unos pocos conjuntos; enseguida entramos al cine y saliendo compramos alguna que otra comida sencilla. Pasamos un hermoso día en pareja, es más creo que hasta parecemos mejores amigos en vez de novios; regresamos a la cabaña pasadas las 8:30 de la noche demasiado agotados.

—Estoy muy cansada amor —exclamo ___ dejándose caer en la cama aún con las bolsas en sus manos.
—Yo también —se las quité y las puse a un lado del armario.
—Durmamos ya, tengo sueño —dijo como niña pequeña sentándose y estirando sus brazos.
Los pase por mi nuca. —Bien, durmamos ya señorita floja —dije en broma.

No lo dije dos veces cuando inmediatamente se fue a cambiar para dormir más cómoda, poniéndose la misma ropa que traía en la mañana. Justo lo mismo que hice yo, nos acostamos y estiré mi brazo para que se recostara. Quedándonos dormidos en menos de 10 min pues en verdad estábamos cansadisimos. Ya mañana será otro día.

Nuevo capítulo 😂 ya volvieron mis ideas hahaha ahora si les actualizaré más seguido lo prometo ❤ 

" BLOOD" (Sehun y tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora