Me enamore de él mejor amigo de mi hermano

Capítulo 39

Carta:

Hola Erik, supongo que cuando leas esto ya te habrás dado cuenta que no estoy y que me fui muy lejos. Te quiero decir que no me busques, no me llames, ni nada, solo te pido que seas feliz al lado de la persona que amas y que en verdad quieras. Yo voy hacer muy honesta, jamás te voy a dejar de amar. Lo que me hiciste me dolió y bastante... Pero el amor que siento por ti es muy especial. Te amo Erik, pero lo nuestro ya no tiene solución. Espero que seas feliz y déjame vivir ahora mi vida sin ti. Hasta pronto.

Fin de la carta

Cuando ley la carta una lágrima resbalaba en mi mejilla, no podía creer que Mayte se fue, ahora que voy hacer sin ella, la tengo que encontrar aún que a si me lleve mil años.

Narra Mayte:

Pasan 5 meses

Bueno en estos meses que pasaron les contaré lo que a sucedidó. Mi hermano ya se casó con Susana y ahora están aquí conmigo visitandome ya que después se irán a París y a Londres. De Erik no he sabido nada. Yo ya estoy empezando mi carrera y tengo muchos amigos, de hecho tengo una mejor amiga llamada Ana que al rato vendrá a vivir conmigo. Mientras ahorita estoy platicando con mi hermano.

- ¿Cómo estás Mayte?, te veo un poco desanimada - preguntó

- Estoy bien Fernando - dije con la voz un poco cortada y mis ojos estaban cristalizados.

- No, no estás bien Mayte dime ¿qué tienes?

- Ya no puedo Fernando, no puedo dejar de pensar en él. Me duele que me haya hecho esto, yo lo amo pero no lo perdonare jamás. - dije mientras mis lágrimas bajaban sobre mis mejillas.

- Mayte, solo deja de pensar en eso, Erik cometió un error pero tienes que seguir adelante

- Fernando, no puedo, me llegan los recuerdos, y me preguntó ¿El por qué lo hizo? sí me decía que me amaba.

- No lo sé

- Bueno, ya voy a tranquilizarme y olvidarme de él aunque así me lleve mil años.

- Está bien. Te dejo, solo vine a ver cómo estabas pero ya me tengo que ir porque si no vamos a perder el vuelo

- Sí, está bien, diviértete

- Mayte te quiero - contestó dándome un abrazo

- Yo también Fernando cuidate - respondí de igual manera

Fernando se fue y mi amiga Ana llego a los cinco minutos, ella tiene otro cuarto y ahí puso su cama y sus cosas, lo bueno es que también ese cuarto tiene baño. Al terminar vimos una película en la sala hasta que Ana saco un tema.